Una exposici¨®n muestra la vida apasionada de Jos¨¦ Agust¨ªn Goytisolo
La vida del poeta, fallecido en 1999, se repasa en el C¨ªrculo de Lectores de Barcelona
Los or¨ªgenes de la familia Goytisolo; la tragedia de la madre de los escritores, Julia Gay, muerta en un bombardeo en Barcelona en marzo de 1938; la etapa de formaci¨®n; su boda con Asunci¨®n, Ton, Carandell y el nacimiento de Julia; los amigos; los viajes; el puente entre culturas; el poeta comprometido con su tiempo. Ocho tramos que muestran la vida apasionada y las m¨²ltiples facetas e intereses del poeta en la exposici¨®n Jos¨¦ Agust¨ªn Goytisolo, m¨¢s cerca, que ayer se inaugur¨® en C¨ªrculo de Lectores, en Barcelona.
Cuando uno entra se encuentra con las palabras, enormes, de El lobito bueno; la biograf¨ªa y la bibliograf¨ªa de JAG; carteles de sus recitales con Paco Ib¨¢?ez y un v¨ªdeo con declaraciones del escritor y sus poemas musicados. En la segunda sala, una selecci¨®n de potentes fotograf¨ªas y textos recorren toda su vida. Hay manuscritos, cartas, figuras de lobitos y corderos, objetos sorprendentes, como la colcha que bordaron durante un verano los Goytisolo y los Carandell con amigos como Rafael S¨¢nchez Ferlosio, Carmen Mart¨ªn Gaite o Blas de Otero. Tambi¨¦n son divertidas las notas que se dejaban en casa Jos¨¦ Agust¨ªn y Asunci¨®n, entre ellos Tote y Ton. Entre las muchas curiosidades, la foto de un negro negr¨ªsimo cubano llamado Juan Goytisolo. JAG fue a verlo durante uno de sus viajes. Es parte de la historia de la familia. El bisabuelo Goytisolo se instal¨® en Cienfuegos, donde esclavos trabajaron para ¨¦l la zafra. Hay unas 500 familias de nombre Goytisolo en la zona.
La inauguraci¨®n se celebr¨® con un recital de poemas de JAG a cargo, entre otros, de Joan Margarit, Rosa Lentini, Ana Mar¨ªa Moix, Pere Rovira y ?lex Susanna. La exposici¨®n, abierta hasta el 30 de abril, coincidi¨® con la clausura del quinto congreso sobre JAG, organizado por la c¨¢tedra Jos¨¦ Agust¨ªn Goytisolo, de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona(UAB), que dirige Carme Riera, y el Ayuntamiento de la ciudad. Ha sido un ¨¦xito. Para conmemorar el d¨¦cimo aniversario de la muerte del poeta, que el 19 de marzo de 1999 falleci¨® al caer por una ventana de su casa, la UAB quiso sacarlo del ¨¢mbito exclusivamente acad¨¦mico y abrirlo a un p¨²blico m¨¢s amplio, en el Palau de la Virreina de Barcelona. La decisi¨®n de combinar las ponencias m¨¢s eruditas con los actos m¨¢s festivos ha sido un acierto y los numerosos asistentes han intervenido con una estupenda espontaneidad incluso en las cuestiones m¨¢s ¨¢ridas.
Como era de esperar, el di¨¢logo entre Julia Goytisolo, la hija del poeta, y Paco Ib¨¢?ez, concit¨® la mayor concentraci¨®n. En una sala abarrotada hasta el l¨ªmite, ambos dedicaron la mitad de su intervenci¨®n a cantar los poemas de JAG, coreados por un p¨²blico entregado: Autorretrato, El lobito bueno -"¨¦l era el lobito bueno, aunque le gustaba parecer malo", dijo Ib¨¢?ez- hasta la apoteosis de Palabras para Julia.
Julia Goytisolo (Barcelona, 1956) dijo que se consideraba superviviente de ese poema, que no pudo leerlo hasta los 45 a?os y cuando los presentaron su padre e Ib¨¢?ez en Cotlliure llor¨® a mares. Pero el verdadero plato fuerte del congreso fue la intervenci¨®n de Luis Goytisolo, que por primera vez habl¨® en p¨²blico de su hermano. Explic¨® sus periodos de euforia y de depresi¨®n, sus problemas con los poetas de su generaci¨®n, algunos de los cuales, dijo, le consideraron de segunda fila por ser tan popular, lo que le provoc¨® una inseguridad en su creaci¨®n literaria, extremo que fue rechazado de plano por la mayor¨ªa de los asistentes.
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