Julia Solomonoff: "He huido del sensacionalismo y del oportunismo"

Mujeres, dudas sexuales y hast¨ªo veraniego. Con todo eso y cuatro largos a?os desde que estrenara Hermanas, su debut en el largo, a la bonaerense Julia Solomonoff le ha salido un peque?o y formidable filme, El ¨²ltimo verano de la Boyita. "Esas temporadas no han sido en balde. Depende de c¨®mo se mire. He producido Cocalero, sobre la campa?a electoral de Evo Morales. Y adem¨¢s he tenido dos hijos". Solomonoff, entre risas tras al confesi¨®n maternal, asegura que en Argentina toma su tiempo hacer cine. "As¨ª que, ?ves? Cuatro a?os no son tanto. El gui¨®n lo acab¨¦ en 2006, rod¨¦ en 2008 y empec¨¦ la gira festivalera en 2009". Entre los riesgos que asume su segundo largometraje est¨¢ en la inmersi¨®n que hace de los adultos -y los espectadores- en el mundo de los ni?os, aut¨¦nticos protagonistas. "Es un mundo sobresimplificado, que ha sufrido muchos varapalos en el cine, dud¨¦ mucho desde d¨®nde iba a contarlo".

A Solomonoff le importaba, y mucho, que la ni?a fuera cre¨ªble, que el p¨²blico entendiera su insistencia, sus preguntas, su curiosidad ante un chico diferente (mejor no desvelar m¨¢s que lo estricto: la intersexualidad del protagonista, Mario), al que ni siquiera sabe c¨®mo describirlo. "Con 11 a?os conoc¨ª un caso parecido y de esa an¨¦cdota naci¨® mi inter¨¦s actual. Ahora he intentado encontrarlo de nuevo, no lo he logrado y casi mejor, porque as¨ª me he sentido libre para contar la historia. Huyendo siempre del sensacionalismo, del oportunismo".

Extra?a que las dos mejores pel¨ªculas sobre este problema gen¨¦tico sean argentinas: XXY, de Luc¨ªa Puenzo, y El ¨²ltimo verano de la Boyita, de Solomonoff. "Mi gui¨®n era previo a XXY. Entr¨¦ a verla con p¨¢nico, y me tranquilic¨¦. Para m¨ª el reto era que la situaci¨®n de Mario no se comiera la pel¨ªcula, no absorbiera el punto de vista, que es el de la ni?a. Por eso no est¨¢ ni en el t¨ªtulo ni en el p¨®ster ni en los tres primeros minutos de la pel¨ªcula. El ¨²ltimo verano de la Boyita describe la evoluci¨®n de ella, no de ¨¦l". La cineasta habla sobre el descubrimiento, sobre los cambios rec¨ªprocos provocados por la amistad y la mirada amorosa, sobre la magia que destilan el lugar donde se desarrolla el filme y el mundo infantil. "Odio el campo de postalita. La pel¨ªcula est¨¢ muy pensada mucho en gui¨®n, aunque no tanto plano por plano. El producto final nace de la colaboraci¨®n con el director de fotograf¨ªa y de usar un equipo t¨¦cnico peque?o y por tanto muy flexible". As¨ª cambiaban el orden del rodaje para aprovechar cielos plomizos o momentos de sol a plomo que acompa?aran a lo escrito. "Otro problema era que la gente de esa localizaci¨®n que trabajaban en la pel¨ªcula no se sintieran intimidados por la c¨¢mara, que pudieran mantener su naturalidad". En cambio, la ni?a protagonista viene de un proceso normal de selecci¨®n de reparto. "Es incre¨ªble c¨®mo la televisi¨®n ha marcado a los cr¨ªos actuales. Todos quieren ser estrellas, pierden su gracia. Se hizo cuesta arriba encontrar a alguien como Guadalupe Alonso". Ser madre, ?ayuda para esta historia? "Por supuesto, porque cambia la perspectiva incluso f¨ªsica. Te bajas al suelo, juegas con ellos a su altura, y espero que el p¨²blico baje como yo a ese suelo".