Los sue?os h¨²medos son mojados
Las mujeres tienen menos de la mitad que los hombres.- Adem¨¢s, en el caso femenino rara vez producen lubricaciones u orgasmos en la vigilia
Casillas no me est¨¢ follando, me est¨¢ haciendo el amor. Tiene puesta su camiseta azul, la que llevaba cuando lo entrevist¨® Sara despu¨¦s de ganar la final. Me besa con fuerza y en el ¨²ltimo minuto vence mi resistencia; nos revolcamos sobre una cama que es tan grande como un campo de f¨²tbol. Nos miramos durante mucho rato, como dos simples enamorados en el banco de un parque. Iker intenta tapar mis pechos con cada una de sus manos. No lo logra porque son muy grandes. El guardameta me acaricia tiernamente hasta llegar al pubis. Siento caer sus l¨¢grimas, se ha emocionado, a m¨ª tambi¨¦n me pasa eso de llorar de placer. Aprieto su cabeza contra mi cuerpo y me pongo, como en el poema que le dedic¨® la poeta cordobesa Elena Medel, Ikeri¨®nida, esto es, como bendecida por un semi dios.
Siento un espasmo caliente y una n¨ªtida, violenta lubricaci¨®n, que ahora envuelve mis zonas m¨¢s ¨ªntimas y humedece por completo mi entrepierna. Abro los ojos. Pero qu¨¦ pasa, ?si ¨¦ste es el techo de mi habitaci¨®n! Maldita sea, ha sido s¨®lo un sue?o -deb¨ª suponerlo por la utilizaci¨®n de la palabra pubis y el tufillo general a literatura er¨®tica (aclaraci¨®n: en la pornograf¨ªa un co?o es un co?o y en la sonrisa vertical, un jugoso melocot¨®n en alm¨ªbar)-.
Admito que no he tenido demasiados sue?os h¨²medos en mi vida. Seg¨²n las estad¨ªsticas, las mujeres tenemos menos de la mitad de sue?os de este tipo que los hombres. Esto no s¨¦ si habla bien o mal de nosotras, en cualquier caso, siendo absolutamente sincera, durante la mayor parte de mi vida he so?ado despierta, he sido una son¨¢mbula sexualmente activa, he dormido en una cama de agua o me han despertado para follar, pero pocas veces he copulado en la fase REM.
Seg¨²n los especialistas, en un sue?o er¨®tico, hasta un sombrero de ala ancha que se inclina hacia un lado puede representar un pene para el subconsciente. De los sue?os ya lo dijo todo Calder¨®n -incluso algo sabemos de las pesadillas h¨²medas y de so?ar con muertos, como dice esta se?ora en el minuto 3.10-, pero de los sue?os er¨®ticos, y sobre todo de los que tiene una mujer, hay todav¨ªa algunas zonas oscuras por descubrir. Y empiezo desde ya.
De vuelta a mi lecho, donde no est¨¢ Casillas, me siento a¨²n excitada, tanto que es un poco doloroso, doy vueltas sobre las s¨¢banas, las im¨¢genes de mi escarceo madridista -los sue?os sexis, como se sabe, suelen tener el elemento de la trasgresi¨®n, lo digo porque yo soy del Bar?a-, todav¨ªa siguen fijas en mi imaginaci¨®n y siento que estoy muy cerca del ¨¦xtasis, por eso me toco.
Me siento obligada a hacerlo porque mi mam¨¢ me ense?¨® desde muy peque?a que deb¨ªa terminar las cosas que comienzo. Me dispongo a tocarme, no como una conejita de Playboy, sino de verdad. De pronto ocurre algo pat¨¦ticamente freak: no estoy mojada.
Al principio, temo ser presa de un cuadro de menopausia precoz entre gallos y medianoche, pero pronto me doy cuenta de que ni siquiera estoy excitada, o sea, s¨ª que tengo ganas, pero mi cuerpo no se ha enterado de nada.
Lo supe s¨®lo despu¨¦s y gracias a Internet, que tampoco es del todo de fiar: mientras que los sue?os er¨®ticos de los t¨ªos acaban con hermosas erecciones nocturnas y otras tantas poluciones, resulta que los sue?os er¨®ticos femeninos rara vez producen lubricaciones u orgasmos en la vigilia.
Rabiosa con mi biolog¨ªa, intento despertar a mi consorte, pero tengo un arrebato de compasi¨®n (los que dormimos juntos aprendemos a valorar un sue?o profundo tanto como un polvo largo) y lo dejo en paz. Me aplico entonces en hacerlo con el hombre invisible o, lo que es lo mismo, pongo a trabajar a mi dedo coraz¨®n, que tiene que empezar de cero y con vehemencia. Entonces, cuando la cosa ya marcha, cuando parece que el sue?o h¨²medo por fin va a hacerse realidad, justo ah¨ª, como en una escena de Aqu¨ª no hay qui¨¦n viva o algo por el estilo, escucho la voz de mi vecino con problemas respiratorios: "?Pero qu¨¦ pasa, joder, todo tiembla! ?Se¨ªsmo?" No, sue?o seco.
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