'Surviving Amina': la vida no es como ense?an en Hollywood

Barbara Celis tiene dos amigos: Anne y Tommaso. Los tres viven en Nueva York. Celis, colaboradora del diario EL PA?S, quiere documentar el nacimiento del segundo hijo de la pareja c¨¢mara en mano. De un parto, uno de los hechos m¨¢s felices que pueden darse en la vida, nace Surviving Amina, el desgarro de una pareja mientras su hija peque?a lucha durante dos a?os y finalmente muere por una leucemia.

"Todo fue una casualidad", comenta Celis desde Valladolid, donde el filme participa en la Seminci, en la secci¨®n Tiempo de Historia. "Los dos eran buenos amigos m¨ªos, dos artistas europeos que deseaban celebrar junto a su hijo mayor Francesco y la gente que les rode¨¢bamos el nacimiento de Amina". Sin embargo, a sus cuatro meses, la leucemia empieza a marcar el d¨ªa a d¨ªa del beb¨¦ y, por tanto, de la familia.

"Anne [que el jueves asistir¨¢ a las proyecciones en la Seminci] me propuso que la filmara a ella y a otros padres de ni?os con leucemia, ya que hab¨ªa grabado el nacimiento de Amina, pero pronto me di cuenta de que yo ten¨ªa acceso a una intimidad que no me iba a dar el resto de las parejas", comenta Celis.

El t¨ªtulo, Surviving Amina, juega con dos ideas: la lucha de la ni?a, desde luego, pero tambi¨¦n la lucha de la pareja por sobrevivir a la muerte de Amina. No habla tanto de una enfermedad infantil, habla de la desintegraci¨®n de una familia. Delante de la c¨¢mara, Anne y Tommaso se desnudan, "la usan como confesionario", apunta su directora, lo que provoca una reacci¨®n extra?a en el p¨²blico: "Por un lado, obviamente, les toca, pero por otro lado me agradecen mucho tras las proyecciones todo el esfuerzo. No es un documental pesimista, es la vida".

Surviving Amina fue rematado con el dinero de su venta a una televisi¨®n suiza, y desde entonces ha sido adquirido por tres televisiones europeas m¨¢s y por una distribuidora que tiene sus derechos mundiales excepto en EE UU y Espa?a.

A Celis, como ocurr¨ªa con Capturings the Friedmans, se le cruz¨® por delante un hecho muy especial, y decidi¨® seguir sus pasos: "Por eso me gusta el documental y no la ficci¨®n. La vida es m¨¢s parecida a esto que cualquier filme de Hollywood con final feliz". Por eso su autora remata con un ep¨ªlogo rodado en Europa la vida de Anne y Tommaso, y una curiosa charla con la abuela materna, un tierno y a la vez revelador remate a una peque?a vida que ha marcado a muchas personas.