Rosa Montero pasa la rev¨¢lida
La escritora dialoga con los lectores en el cibertaller literario de EL PA?S
"Por favor, dos preguntas: (1) ?C¨®mo se puede trascender la percepci¨®n intuitiva del tiempo, esa que nos dice que el tiempo es lineal? (2) ?C¨®mo cree que ha cambiado la percepci¨®n de espacio y tiempo de los lectores en esta era medi¨¢tica? Gracias" El lector que firma como Map12 pone el list¨®n bien alto. Rosa Montero supera ese list¨®n con soltura. Y con gracia: "Guau, son preguntas como de examen, jaja...", responde. "Dif¨ªciles, digo. La percepci¨®n lineal del tiempo se puede trascender en narrativa.... porque las novelas nos permiten todo. Por ejemplo, Sterne, en su Tristran Shandy, escribe algo as¨ª como tres cap¨ªtulos en el tiempo que un personaje tarda en bajar un escal¨®n de una escalera".
Est¨¢ visto que iba a ser un encuentro en la cumbre, un distendido pero riguroso encuentro en la cumbre. Y educad¨ªsimo. V¨¦ase el "por favor" y el "gracias" de Map12. Con motivo de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, la escritora y periodista Rosa Montero (Madrid, 1951) ha mantenido esta tarde un di¨¢logo con los lectores en torno a la escritura . Nada de generalidades, pura fibra. La fibra del tiempo y del espacio, dos de los asuntos en los que la literatura del siglo XX ha dado un salto mortal respecto a la tradici¨®n. "Se escribe contra el tiempo.... O sea que revent¨¦moslo sin miedo. En cuanto al cambio de la percepci¨®n del espacio y el tiempo, sin duda hemos ganado libertad expresiva... El siglo XX fue el siglo de la demolici¨®n de lo real", dijo la autora de Amado amo, que, no obstante, record¨® que el Mediterr¨¢neo ya estaba descubierto: ah¨ª estaba el ejemplo de Sterne.
?De d¨®nde viene, no obstante, ese cambio de paradigma? Del bombardeo de im¨¢genes al que viven sometidos los lectores: "La descripci¨®n espacial y geogr¨¢fica es hoy mucho menos importante y minuciosa que en siglo XIX por el cine y la televisi¨®n. Antes todo deb¨ªa ser descrito a lo Balzac, pero hoy tenemos un archivo mental de im¨¢genes enorme".
El archivo es tan grande que a veces se bloquea. Cuando la escritora se pierde por los caminos del ciberespacio, los lectores se ponen nerviosos. ?Ad¨®nde ha ido? Cuando vuelve, lo hace como una flecha: "?????Vale!!!!! Soy bruta con el eskup.... estaba fuera del tema y no pod¨ªa ver vuestras preguntas. Ya me he metido. Contesto ahora mismo y PERDONAD!!!!!!!!!!"
Una vez perdonada, la charla se detiene en los t¨®picos, esas c¨¦lulas muertas de la literatura que, parad¨®jicamente, mucha gente considera como el gran distintivo de la literatura. "Los clich¨¦s son como los par¨¢sitos de la creatividad. Est¨¢n enroscados en el fondo de tu cabeza y salen a la luz en cuanto relajas tu vigilancia. Enseguida las cortinas son "espesas", la negrura como "boca de lobo", todos los t¨®picos verbales". Pero los clich¨¦s no son solo verbales, tambi¨¦n los hay argumentales, "los m¨¢s insidiosos". Un ejemplo: "Como dec¨ªa la protagonista de Elvira Lindo en su novela Una palabra tuya, las novelas est¨¢n llenas de gente que hace el amor de pie..."
Para terminar, un consejo y dos libros de cocina (literaria). Los libros: Verdades y mentiras de la literatura, de Stephen Vicinzey, y La verdad de las mentiras, de Mario Vargas Llosa. O sea, dos obras de dos escritores que son, adem¨¢s, dos enormes lectores (se puede ser escritor sin tener una carrera acad¨¦mica, pero no sin tener una carrera de lector, apunt¨® tambi¨¦n la novelista).
Y el consejo: trabajar, trabajar, trabajar: "Para escribir ficci¨®n hace falta mucha, much¨ªsima disciplina, un enorme tes¨®n. Es tan importante o m¨¢s que el talento. Algunos escritores usan el truco de levantarse de la mesa y dejar el trabajo de cada d¨ªa justo cuando est¨¢n a punto de escribir algo que les apetece.... para as¨ª tener ganas de volver a sentarse al d¨ªa siguiente. No es nada f¨¢cil, porque a menudo, sobre todo en la escritura de una novela, puedes pasarte semanas teniendo que arrastrarte hasta el ordenador, porque la escritura no te sale, porque es como picar piedra".
Tiempo y espacio, talento y trabajo. Cuatro lecciones que entran en el examen. Ma?ana se examina Jorge Volpi .
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.