La cocina como galer¨ªa de arte

La revoluci¨®n culinaria ha venido acompa?ada en los ¨²ltimos tiempos de un nuevo g¨¦nero de restaurantes trocados en salas de exposiciones. Uno de los establecimientos de referencia de la modernidad de Londres ha propuesto una verdadera simbiosis entre el arte de los fogones y el que suele desplegarse en galer¨ªas y museos, con un espacio gastron¨®mico concebido por uno de los nombres m¨¢s destacados del panorama conceptual brit¨¢nico, Martin Creed. Paredes, suelos, mobiliario, incluso la cristaler¨ªa y los cubiertos, ser¨¢n obras en s¨ª mismas, firmadas por este ganador del premio Turner, cuyo universo inspirar¨¢ a su vez los platos de la carta.

Fundado por el empresario y dise?ador Mourad Mazouz y el chef franc¨¦s Pierre Gagnaire, el restaurante Sketch quiere dar una nueva vuelta de tuerca a su conocida vocaci¨®n por el arte y el dise?o, que ha definido casi una d¨¦cada de singladura del local. Si en sus tres espacios ha tenido cabida hasta ahora una combinaci¨®n ecl¨¦ctica de muebles estilo Luis XV con las ¨²ltimas propuestas del videoarte, a partir del pr¨®ximo marzo inaugura el concepto del restaurante de artista. La obra de Creed Work No. 1347, por ejemplo, consiste en 96 tipos de m¨¢rmol que cubrir¨¢n en forma de zigzag el pavimento de la sala. El artista ultima, asimismo, una serie de pinturas a gran escala a modo de murales del restaurante, donde cada mesa, silla, plato o copa ser¨¢ diferente.

La elecci¨®n de este artista para poner en pr¨¢ctica el experimento ha obedecido a "la funcionalidad de su cuerpo de trabajo", explica Victoria Brooks, responsable del programa de exposiciones que desde hace un lustro patrocina la Sketch Gallery Foundation (creada por Mazouz). Creed se hizo con el Turner en 2001 gracias a una instalaci¨®n minimalista que en su d¨ªa no fue del gusto de todos los paladares: una habitaci¨®n vac¨ªa, con una bombilla colgada en el centro que se encend¨ªa y apagaba de forma intermitente. Protagonista de numerosas exposiciones -tanto en Reino Unido como en ciudades europeas, Nueva York e Hiroshima-, su figura cobrar¨¢ especial atenci¨®n en el a?o ol¨ªmpico de Londres. A las 8 de la ma?ana del 27 de julio -momento de arranque de los Juegos- ha propuesto que las campanas de iglesias, colegios y otros centros de las islas brit¨¢nicas repiquen al un¨ªsono, junto a bocinas de bicicletas, cl¨¢xones de autom¨®viles y timbres de casas.

Por entonces, el restaurante de artista en la sede de Sketch ya habr¨¢ dado sus primeros pasos con el aliciente de la cocina de Pierre Gagnaire, un chef multiestrellado que dirige un ramillete de establecimientos desde St. Etienne hasta Dubai o Tokio. Con 30 a?os de experiencia a sus espaldas, ?va a permitir que un personaje ajeno a su mundo como Creed meta las narices en sus cazuelas? "Martin no est¨¢ implicado en la creaci¨®n del men¨²", precisa Brooks, "pero los platos responder¨¢n a su despliegue art¨ªstico". De c¨®mo esas obras se proyectar¨¢n en las propuestas del cocinero es a¨²n dif¨ªcil hacerse una idea, porque el men¨² est¨¢ en proceso de elaboraci¨®n y las ideas que se barajan son un secreto bien guardado. A la postre, remacha Brooks, lo que los clientes encontrar¨¢n es "una atm¨®sfera ¨²nica para degustar la mejor cocina".