La nueva esperanza de Hollywood

Las cifras asustan: en las primeras 24 horas despu¨¦s de que se colgara el primer tr¨¢iler en la red, ocho millones de personas lo visionaron; las ventas de la trilog¨ªa se acercan a los 25 millones de copias en todo el mundo; la pel¨ªcula tiene prevista su estreno en Estados Unidos en m¨¢s de 4.000 pantallas y ser¨¢ la primera de las cuatro de una saga...? si los resultados son los esperados. Hablamos de Los juegos del hambre, el fen¨®meno editorial (y pronto cinematogr¨¢fico) que Hollywood ve como su gran oportunidad para crear una franquicia multimillonaria que sustituya a Harry Potter o Crep¨²sculo.

Las comparaciones con esta ¨²ltima han surgido de forma casi inevitable pero su ¨²nica raz¨®n de ser parece ser el predicamento de sus autoras con los ¡°j¨®venes adultos¡±, esa parte del p¨²blico que se mueve entre los 14 y los 25 y que parecen haber huido de los cines como alma que lleva el diablo. Los juegos del hambre, de la escritora Suzanne Collins (editada en Espa?a por Molino), parte de un precepto sencillo: Estados Unidos ha sido destruido y lo que queda se agrupa en doce distritos (que acostumbraban a ser 13) regidos por el pu?o de hierro de El capitolio. En esta distop¨ªa de cariz puramente orwelliano todos los a?os se celebran los juegos del hambre, en los que cada distrito es obligado a enviar a dos tribunos para combatir a muerte entre ellos hasta que solo quede uno.

Con ecos del minotauro de Creta, de 1984, del mencionado Orwell y sobre todo de la novela de Koushun Takami, Battle royale, que despu¨¦s se convirti¨® en pel¨ªcula, Los juegos del hambre cuenta la historia de Katniss, una chica de 16 a?os que se presenta como voluntaria para los juegos, con el fin de evitar que su hermana peque?a sea quien tenga que acudir a la arena. A la joven la interpreta la muy en boga Jennifer Lawrence (Winter's bone, X-Men) y le acompa?a un reparto de desconocidos secundados por dos veteranos, Elizabeth Banks y Woody Harrelson, y con la ¨Crelativa- sorpresa del m¨²sico Lenny Kravitz, que deja la guitarra para probar la actuaci¨®n y ya de paso estrena nuevo look.

Lo mejor de la pel¨ªcula (a ojos de los que mandan) son los 70 millones de d¨®lares de presupuesto (85, seg¨²n otras fuentes) que significan que, por mal que vaya la cosa, la franquicia tiene grandes posibilidades de ser un triunfo. La otra buena noticia (para el espectador) es que la trilog¨ªa literaria es ¨Cen tono y ambiciones- mucho mejor que Crep¨²sculo. De momento, el que no pueda aguantar la espera hasta el 20 de abril siempre puede recurrir a los tres libros: Los juegos del hambre, En llamas y Sinsajo.