Violencia en la isla sun¨ª
Adhamiya fue uno de los barrios de Bagdad m¨¢s afectados por la invasi¨®n estadounidense en 2003. Su infiltraci¨®n por Al Qaeda y los subsiguientes enfrentamientos de ese grupo con las milicias chi¨ªes que intentaban tomar el control, lo convirtieron en paradigma de la violencia sectaria que termin¨® dividiendo la capital iraqu¨ª de acuerdo con el credo y la etnia de sus habitantes. Adhamiya qued¨® etiquetado como una isla sun¨ª en el este chi¨ª de la capital.
Su nombre es un derivado de Al Adham, el fundador de una de las cuatro escuelas jur¨ªdicas del islam sun¨ª, tambi¨¦n conocido como Abu Hanifa y a quien est¨¢ dedicada la principal mezquita del barrio. Fue all¨ª donde se vio por ¨²ltima vez a Saddam Husein el d¨ªa que entraron las tropas estadounidenses en Bagdad, y antes de que se escondiera durante meses. El jeque Ahmed al Samarrai hizo del santuario un centro de resistencia violenta a la ocupaci¨®n y a las nuevas autoridades.
Cualquier semblanza de vida normal hab¨ªa desaparecido de Adhamiya para 2006 cuando adentrarse en sus calles era comprar varios boletos para ser secuestrado o morir en el fuego cruzado entre extremistas de uno y otro bando. En 2007, los militares estadounidenses levantaron un muro de cuatro metros alrededor del barrio para dificultar la entrada de artefactos explosivos y frenar as¨ª la violencia. Desde entonces, el regreso a la normalidad ha sido lento y doloroso. A¨²n no se ha logrado del todo y, como cuenta Pedro Azara en su blog, los extranjeros solo lo visitan con mucha precauci¨®n.
Pero el odio sectario que vino a asociarse con Adhamiya no estaba necesariamente en el ADN de sus habitantes. En septiembre de 2005, estos salvaron centenares de vidas de chi¨ªes durante la estampida que se produjo sobre el puente que une el barrio con el vecino de Kadhamiya, el principal centro de peregrinaci¨®n chi¨ª de Bagdad, y que dej¨® cerca de un millar de muertos. Muchos se tiraron al agua para sacar a los peregrinos chi¨ªes a la orilla o les llevaron a los hospitales. Ese esp¨ªritu de solidaridad es el que tiene que ayudar a recuperar la remodelaci¨®n propuesta por el equipo de arquitectos espa?oles que ha ganado el concurso.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.