¡°Es mentira que la tele nos vuelva gilipollas, yo ya era gilipollas¡±

Llega en punto y va al grano: ¡°Tengo 45 minutos¡±. Xavier Sard¨¢ (Barcelona, 1958) fue el due?o de la televisi¨®n en Espa?a durante ocho a?os. Le amaron todos y luego otros le odiaron. Brillante, simp¨¢tico, culto¡­ quiz¨¢ justamente lo que no le perdonaban. Y muy divertido. Si a ¨¦l le apetece, te partes de risa. De la etapa de Cr¨®nicas no le gusta hablar. Y te lo hace notar muy r¨¢pido. Aunque es complicado, claro: 1.300 programas, ocho a?os, audiencias de otra ¨¦poca¡­ Pero est¨¢ a otra cosa.

P. ?A qu¨¦ se dedica estos d¨ªas?

R. Acabo de hacer un curso de patr¨®n de yate. La navegaci¨®n a¨¦rea y n¨¢utica son una tendencia a huir de los sitios. Y soy tertuliano: me quedo pasmado con la realidad y lo poco que pagan.

P. Igual antes le pagaban mucho. Qu¨¦jese a Julia Otero.

R. Pagan mal en general. Pero satisfactorio. Envidiaba a los tertulianos que entraban en mi programa, dec¨ªan algo y se iban. Yo me quedaba d¨ªas y a?os.

P. ?Ha estado huyendo de Cr¨®nicas¡­? Todo lo que ha hecho luego est¨¢ en las ant¨ªpodas.

R. No tanto. Fue una gran fiesta con momentos de una enorme calidad formal y con un compromiso pol¨ªtico extraordinariamente llamativo. Con algunos momentos de televisi¨®n popular y, sin duda, momentos cutres.

P. ?Se arrepiente de algo?

R. ?Yo? ?Arrepentirme? He vivido un sue?o. Imagine que hace un programa diario y el primer d¨ªa le dicen: lo dejar¨¢s en ocho a?os porque t¨² quieres. Era una revista burlesca, atrevida y sin l¨ªmites. Estoy orgulloso.

P. ?Si aquello era telebasura qu¨¦ es lo de ahora?

R. Eso se dice con un animus injuriandi. Ya lo dije en su d¨ªa: telebasura tu puta madre.

P. Le vi el otro d¨ªa en un programa con Ferran Monegal muy cabreado con eso...

R. ?Y qui¨¦n ten¨ªa raz¨®n?

P. ?l ten¨ªa que pregunt¨¢rselo.

R. Usted es un hip¨®crita. Uno de los dos tendr¨ªa m¨¢s raz¨®n. No se quiere mojar porque est¨¢ pendiente de su futuro profesional. As¨ª que si no se moja, no me pregunte m¨¢s por esto.

P. No me van a despedir por darle la raz¨®n. Y, con todo el respeto, a mi jefe el se?or Monegal le da bastante igual.

R. Pues a m¨ª tambi¨¦n. No quiero hablar m¨¢s de esto. No quiero hablar m¨¢s. A no ser que la pr¨®xima pregunta sea interesante.

P. Cuando se cabrea sonr¨ªe y cuando est¨¢ de co?a se pone serio.

R. No entiendo la diferencia entre hablar en broma y en serio. No quiero asustarle pero este planeta gira a unos 2.000 kil¨®metros por hora y vamos a morir. Es inquietante.

P. ?Y esto d¨®nde nos deja?

R. Estupefacci¨®n infantil continuada. La gente agoniza y grita ¡°Mam¨¢, mam¨¢¡­¡±. Y as¨ª se cierra el c¨ªrculo. Es ins¨®lito.

P. Como nacer el d¨ªa de Benedicto XVI.

R. S¨ª. Y Jos¨¦ Luis Moreno y Emilio Arag¨®n. Cuatro ventr¨ªlocuos. Porque el Papa es el mu?eco a trav¨¦s del que habla Dios.

P. ?Usted es el padre de un modelo de televisi¨®n?

R. No, no¡­ Era la sensaci¨®n de que pod¨ªa pasar de todo. Todo lo hac¨ªamos con humor.

P. Pero habr¨ªa mucho guion¡­

R. Nada. Y nunca me he puesto un teleprompter o un pinganillo. Marc¨¢bamos las pautas, busc¨¢bamos ideas, las encarg¨¢bamos¡­ pero no guion.

P. ?No animaba a los tertulianos a discutir?

R. En absoluto. Acababa el programa y les dec¨ªa: ¡°no cobran ustedes tanto para pelearse as¨ª¡±. Pero no quiero hablar m¨¢s de ese programa. Si quiere hablamos de mi libro. Es que me voy a ir y usted no para de hablar de Cr¨®nicas. Me ha de hacer una entrevista diferente.

P. Tiene bastante pronto.

R. Tengo una capacidad de trabajo impresionante y no me asusto por los acontecimientos. Tengo un car¨¢cter solvente.

P. En la tele hizo m¨¢s amigos o enemigos.

R. Tengo los mismos que antes. Es mentira que la tele nos vuelva gilipollas, yo ya era gilipollas.

P. ?Le gusta la tele de ahora?

R. ?A usted le gusta su nevera? Depende de lo que haya dentro. Hay cosas extraordinarias. Me gusta la Sexta y la Cuatro¡­ y -el presentador Antonio Garc¨ªa- Ferreras. Di que soy fan de ¨¦l.

P. Creo que manda mucho.

R. Yo hab¨ªa trabajado con ¨¦l. ?Tienes su tel¨¦fono? Hace d¨ªas que quiero felicitarle¡­

P. Por lo de Alarma Roja¡­

R. Eso de Alarma Roja lo dice usted. No se llama as¨ª -el programa de debate pol¨ªtico presentado por Ferreras se llama Al rojo vivo-¡­ Pero no tendr¨¢ cojones de ponerlo.

P. De Buenafuente a Boris ha alumbrado a una generaci¨®n.

R. Buenafuente me acompa?¨®¡­ Le conoc¨ª en la radio y luego sali¨® dando la cara en un programa que hicimos. Pero no lo siento como a un hijo como a Boris.

P. ?Ya se han arreglado?

R. Tiene un talento inconmensurable y un car¨¢cter a menudo complicado para ¨¦l. A veces dice cosas como trascendentes¡­ Es un gran profesional.

P. ?Qu¨¦ quiere decir trascendentes?

R. Ya lo he dicho. Que ¨¦l mismo es el que m¨¢s tiene que soportar su temperamento. Pero me gusta. Es el mejor monologuista de Espa?a.

P. Y cuando parec¨ªa que se reconciliaban¡­

R. Es que ¨¦l se enfad¨® porque no fui a una entrevista de un libro. Pero ya est¨¢, somos amigos.

P. ?Todo por la audiencia?

R. Si en lugar de audiencia fuera ¡°Todo por la gente¡±, ?le gustar¨ªa m¨¢s? Pues es lo mismo. Que un programa est¨¦ dispuesto a hacerlo todo por su p¨²blico est¨¢ bien: informarle, entretenerle¡­ Pero si ponemos audiencia suena mal. Pi¨¦nselo, escriba un libro y yo se lo presento.

P. La audiencia es negocio.

R. D¨ªgaselo a los pol¨ªticos cuando hacen campa?a electoral. ?Est¨¢n dispuestos a hacerlo todo por los votos? El PP lo ha hecho.

P. Cuando lleg¨® el PSOE se acab¨® Cr¨®nicas.

R. No ten¨ªa nada que ver¡­ hac¨ªa un a?o. Pero no voy a hablar m¨¢s de Cr¨®nicas. Me voy a levantar y me voy a marchar. ?Usted qu¨¦ edad tiene? ?32? Es una edad dif¨ªcil.

P. ?Profesional u hormonal?

R. Hormonal siempre es dif¨ªcil. Pero est¨¢ usted en una edad definible como ¡°ni chicha ni limon¨¢¡±.

P. ?La crisis se cargar¨¢ el periodismo?

R. Me gustar¨ªa que en este pa¨ªs hubiera equidistancia entre la prensa de derechas y la de izquierdas. Me preocupa que la derecha no tenga una prensa civilizada. La veo montaraz, muy fachorra y desvergonzada. Casi enfermiza. Su concepto de Espa?a jam¨¢s ser¨¢ el m¨ªo.

P. ?Nos haremos m¨¢s conservadores?

R. A Gallard¨®n le ha pasado. Nos estamos hundiendo¡­ y sale ¨¦l, que era un t¨ªo que parec¨ªa progresista con unas cosas del aborto¡­ La religi¨®n ha hecho mucho da?o. La hipot¨¦tica existencia de un Dios es espantosa. Yo creo en el aborto de plazos y en paz. No quiero una poblaci¨®n de condones reventados.

P. Es como para echarse a la calle.

R. Con el cond¨®n puesto.

P. ?Tuvo Una mierda de infancia?

R. Era una ¨¦poca cutre. Pero no se entristezca, que es usted muy sensible.

P. Ahora que no hay un duro en la tele, ?por qu¨¦ no vuelve a la radio?

R. Porque no. Ya lo he hecho. Con 54 a?os puedo hacer un poco lo que me plazca. Cuando sea mayor quiero presentar un concurso, ser como Carlos Sobera. Oiga, no tengo m¨¢s tiempo.

P. ?En general o para la entrevista?

R. Los dos. Pero no me toque los cojones con el titular, y esto p¨®ngalo tambi¨¦n, porque si no escribir¨¦ una carta al director diciendo 'este t¨ªo es un cabr¨®n'.