Peter Singer: ¡°La Iglesia no se toma muy en serio acabar con la pobreza¡±

?ltimamente las noticias, libros, pel¨ªculas y series sobre la crisis nos invaden a todas horas, pero a nadie se le ocurre escribir sobre donaciones con los tiempos que corren. A nadie, salvo al profesor de la Universidad de Princeton Peter Singer (Melbourne, Australia, 1946). En Salvar una vida: C¨®mo terminar con la pobreza (Katz y Clave intelectual), el intelectual defiende la tesis de que la pobreza se puede erradicar y, no hacerlo, demuestra una ¨¦tica err¨®nea. Con la ayuda de ejemplos que plantean serios dilemas morales Singer propone algunos cambios para acabar con la pobreza y dicho comportamiento equivocado.

"De la misma manera que un art¨ªculo de The New York Times convenci¨® a un n¨²mero significativo de personas a realizar una donaci¨®n, la posible repercusi¨®n de una obra as¨ª ha sido una raz¨®n poderosa para escribir este libro", explica Singer. De la misma forma, el acad¨¦mico ha querido quitarse esa espinita que conservaba desde su primer art¨ªculo sobre la pobreza en 1972. "Hay un desequilibrio en el mundo. Debemos cambiar nuestra ¨¦tica a la hora de pensar y quienes m¨¢s tienen deben colaborar de forma significativa con los que pr¨¢cticamente no tienen nada".

Uno de los puntos clave del libro se basa en la idea de solucionar o, al menos, paliar la pobreza extrema a trav¨¦s de peque?as donaciones, que crecer¨ªan en funci¨®n de la renta. Por ejemplo, en la priemra categor¨ªa, Singer sugiere que aquellos ganen entre 78.000 y 110.000 euros donen un 5% de su salario. "No es un secreto. Yo dono en torno a un cuarto o un tercio de lo que gano. Son cifras de seis d¨ªgitos", asegura.

La ¨¦tica del australiano es, sin duda, exigente. Otra de sus proposiciones pasa por arg¨¹ir que una vez satisfechas todas las necesidades materiales, el resto del dinero debe destinarse a donaciones. "Si con tu dinero o el m¨ªo un ni?o no contrae la malaria, pues est¨¢ mejor empleado que en un hotel caro durante unas vacaciones. Me gustar¨ªa, pero es m¨¢s importante", asevera.

Pol¨ªtica y revoluci¨®n

Si bien es cierto que el mundo necesita un cambio, un moderado Singer no quiere esperar a cambios en la pol¨ªtica. "Una revoluci¨®n, como ser¨ªa el comercio justo, es un sue?o a corto plazo. Es una cuesti¨®n pr¨¢ctica. Si hay pocas posibilidades de alcanzar ese tipo de cambio, debemos mirar alrededor y encontrar una estrategia que ofrezca mejores espectativas de ayudar realmente a algunos pobres". El papel de los Estados es, no obstante, vital en los pa¨ªses m¨¢s pobres del planeta."Si cambiamos la forma de comerciar y eliminamos los subsidios agr¨ªcolas lograr¨ªamos un gran cambio para algunos pa¨ªses", vaticina Singer.

Pero m¨¢s all¨¢ del comercio just, el acad¨¦mico identifica m¨¢s problemas. Los pa¨ªses desarrollados obligan a aquellos necesidades de ayuda exterior a comprarles productos a cambio de ayudas. Asimismo, los pa¨ªses m¨¢s ricos comercian con reg¨ªmenes dictatoriales que no miran por el bienestar de sus ciudadanos. "El dinero que pagamos por petr¨®leo u otros bienes no llega la gente del pa¨ªs, se queda en los bolsillos de una ¨¦lite corrupta. Es como comprar bienes robados. Deber¨ªamos tener una lista de estos pa¨ªses y boicotearles de la misma manera que se quiere hacer con Ir¨¢n por su supuesto desarrollo de armamento nuclear".

Alejados de la realidad

La combinaci¨®n entre la difusi¨®n de la responsabilidad -descrita as¨ª en psicolog¨ªa social por el caso de falta de ayuda a Kitty Genovese- y el efecto v¨ªctima -no identificar a quien necesita ayuda- motiva la pasividad ante la que nos encontramos. Una clara muestra de ello son las cifras de mortandad infantil mundial. "Muchos ni?os mueren antes de su quinto cumplea?os por causas que son evitables. Desde la primera edici¨®n del libro en EE UU la cifra se ha reducido de nueve millones al a?o, hasta el informe m¨¢s reciente de UNICEF que habla de 6,9 millones. Es buena se?al pero queda trabajo por hacer".

La inacci¨®n de la Iglesia

Tras describir el papel que juegan las donaciones en el islam y el juda¨ªsmo, Singer arremete contra la Iglesia cat¨®lica. "La Iglesia no se toma esto muy en serio lo de 'Vended vuestros bienes y d¨¢dselo a los pobres'. Se ocupan m¨¢s del matrimonio gay, el aborto, la eutanasia, que no son temas muy prominentes en la Biblia. Si Jes¨²s volviera a la Tierra se har¨ªa a un lado y dir¨ªa: 'No viv¨ªs como cristianos, sino en la comodidad y deber¨ªais centraros en los pobres como prioridad ¨¦tica n¨²mero uno".

Crisis econ¨®mica occidental

La tormenta en la que est¨¢ sumergida Europa y, en menor medida, Estados Unidos, es una crisis a medio gas comparado con lo que se vive en otros pa¨ªses, seg¨²n Singer. "No quiero minimizar el sufrimiento de Espa?a, Grecia u otros pa¨ªses europeos pero est¨¢n mejor que un proporci¨®n grande de la poblaci¨®n mundial. Espa?a ha recortado su ayuda al exterior y es lamentable porque apenas le afecta. Entiendo que la gente diga que hay que ayudar a los desempleados o desahuciados pero, con todo y con eso, un desempleado en Espa?a no est¨¢ tan mal como en pa¨ªses extremadamente pobres: nadie tiene que andar dos horas para ir a conseguir aguar, todo el mundo tiene acceso a sanidad, sus hijos pueden ir a colegios", razona el acad¨¦mico.

Productividad y poblaci¨®n

Uno de los puntos que m¨¢s parecen irritar a Singer es el hecho de poder acabar con la pobreza con los medios de que disponemos, seg¨²n ¨¦l. "Es una cuesti¨®n de distribuci¨®n porque la productividad es lo suficientemente buena. Si dividimos la cantidad de alimentos entre la poblaci¨®n, nos da una cantidad suficiente para que todos tengamos una dieta adecuada de calor¨ªas y proteinas", argumenta el acad¨¦mico. Sin embargo, reconoce que la poblaci¨®n es un problema y un reto que se aborda cada diez a?os en cumbres mundiales.

*Salvar una vida. C¨®mo terminar con la pobreza, de Peter Singer. Editado por Katz y Clave intelectual. 203 p¨¢ginas.