Caballero Bonald o el placer de leer por razones est¨¦ticas

"Creo que ha significado mucho, que ha sido un perseverante aprendizaje literario, aunque no fuera siempre consciente de ello¡­ Yo me hice escritor porque le¨ª primero a unos escritores que me emocionaron, que me abrieron un camino. Sin esas lecturas previas, estoy seguro que no me habr¨ªa dedicado a cultivar la literatura. Y adem¨¢s, el hecho de haber sido un lector constante a lo largo de los a?os, tambi¨¦n me ha servido para ir calibrando la natural evoluci¨®n de mis gustos est¨¦ticos". Con estas palabras Jos¨¦ Manuel Caballero Bonald (Jerez de la Frontera, 1926) cuenta lo que ha significado y significa la lectura en su vida. Una apreciaci¨®n que cobra especial vigencia en estos d¨ªas cuando este poeta, narrador, ensayista y ¨²ltimo premio Miguel de Cervantes, que recibir¨¢ el 23 de abril, publica el libro Oficio de lector (Seix Barral), una serie de art¨ªculos y conferencias sobre escritores, b¨¢sicamente, en espa?ol.

Es un recorrido por una galer¨ªa de recuerdos literarios. Un entretenido y culto viaje por las lecturas de un lector como Caballero Bonald, por sus impresiones, opiniones y afectos a autores y obras en los que parece escucharse la voz n¨ªtida del escritor jerezano, sus palabras redondas que llevan al lector por los pasadizos de la creaci¨®n literaria. De los cambios del gusto, de la preferencia, de la percepci¨®n o del rastro que han dejado en ¨¦l.

Por eso, ante la pregunta de cu¨¢les son los autores cuya opini¨®n ha cambiado, primero muy a favor y luego no tanto y viceversa, Caballero Bonald reconoce que no sabe, "as¨ª a primera vista"; pero luego reconoce que si lo pensara bien le saldr¨ªan m¨¢s autores de los que puede citar. Entonces se anima: "Que yo recuerde, y sin salirnos de la ¨®rbita de la lengua espa?ola, cada vez me siento m¨¢s alejado de escritores tan distintos como Unamuno o Baroja, Le¨®n Felipe o Manuel Machado, y al contrario, cada vez aprecio m¨¢s a Valle-Incl¨¢n, a Juan Ram¨®n Jim¨¦nez, a Onetti, a Rulfo, a Lezama¡­ El caso es que el gusto se modifica con el paso del tiempo y que hay libros que un d¨ªa resultaron atractivos y pueden acabar siendo prescindibles. Y al rev¨¦s, claro". Y no duda en se?alar que un escritor que no est¨¢ tan bien valorado como debiera pero que todos deber¨ªan leer es Benito P¨¦rez Gald¨®s.

Cada vez aprecio m¨¢s a Valle-Incl¨¢n, a Juan Ram¨®n Jim¨¦nez, a Onetti, a Rulfo, a Lezama¡­ El caso es que el gusto se modifica con el paso del tiempo y que hay libros que un d¨ªa resultaron atractivos y pueden acabar siendo prescindibles. Y al rev¨¦s, claro

Una recomendaci¨®n que podr¨ªa trasladarse, especialmente, al 37% de los espa?oles que no lee, seg¨²n el reciente bar¨®metro de H¨¢bitos de lectura y compra de libros 2012 presentado por la Federaci¨®n de Gremios de Editores de Espa?a (FGEE). Una cifra alta dentro de la Uni¨®n Europea lo que hace recordar a Caballero Bonald que hace no tanto esa cifra era la mitad. ?Las razones de esos ¨ªndices? Supone que se trata de "una cuesti¨®n pedag¨®gica o, mejor, de educaci¨®n escolar. Si no se inculca en los ni?os el amor por el libro, la libre aventura de leer, incluyendo la opci¨®n a sustituir un libro que no agrade por otro, las cosas seguir¨¢n yendo mal¡­ O seguir¨¢ produci¨¦ndose el consumo de ¨ªnfimos productos de la subliteratura".

Tras esta advertencia el premio Cervantes explica por qu¨¦ es importante leer, por qu¨¦ se debe leer: "Hay muchas respuestas a esa pregunta. Yo, personalmente, leo por razones est¨¦ticas, sin atender mayormente a otros aspectos argumentales, a todas esas copias mim¨¦ticas de la realidad. Los ¨²nicos argumentos que me interesan son los de los heterodoxos. Yo leo por el placer est¨¦tico que me produce la poes¨ªa o la prosa que va m¨¢s all¨¢ de las palabras propiamente dichas. Si el libro que leo no me seduce por ese camino, lo abandono, adi¨®s muy buenas. Pero tambi¨¦n entiendo a los que leen por instruirse, por distraerse, y compadezco a los que leen por obligaci¨®n".

Su lecturas placenteras, adem¨¢s de las obras de Miguel de Cervantes, son de autores como Fernando de Herrera, G¨®ngora, Quevedo, B¨¦cquer, Clar¨ªn, Juan Ram¨®n Jim¨¦nez, Jorge Guill¨¦n, Lezama Lima, Garc¨ªa Lorca, Olga Orozco, Juan Rulfo, ?lvaro Cunqueiro, ?lvaro Mutis; y entre los escritores en otros idiomas figuran Dostoievski, Mallarm¨¦, Eliot, Albert Camus, Paul Bowles...

Yo, personalmente, leo por razones est¨¦ticas, sin atender mayormente a otros aspectos argumentales, a todas esas copias mim¨¦ticas de la realidad. Los ¨²nicos argumentos que me interesan son los de los heterodoxos.

Es su biograf¨ªa lectora Una biograf¨ªa lectora De todos ellos y de muchos m¨¢s escribe el autor de obras como Entreguerras, Dos d¨ªas de septiembre, ?gata ojo de gato, Toda la noche oyeron pasar p¨¢jaros, En la casa del padre y Campo de Agramante. Textos esparcidos de reflexiones, an¨¢lisis, emociones, recuerdos. Incluso confesiones. Como esta que recoge parte del esp¨ªritu del autor y del libro: "Yo he sido un lector de Dostoievski bastante indisciplinado. En realidad, he sido un lector indisciplinado de casi toda la literatura que m¨¢s me ha ido afectando y a la que he vuelto con met¨®dica envidia".

O como cuando habla de Bowles: "A medida que uno no se hace viejo va desarrollando una cierta especializaci¨®n sensitiva en cuanto al control de calidad de las obras ajenas, aun sin haberlas frecuentado de hecho. Por ah¨ª se filtra lo que a todas luces puede parecer una predicci¨®n arbitraria y termina siendo un baremo irrefutable".

Confesiones de Jos¨¦ Manuel Caballero Bonald que el 28 de febrero ser¨¢ investido Doctor Honoris Causa por la Uned y el 23 de abril recibir¨¢ el Premio Cervantes, donde hablar¨¢ sobre la poes¨ªa en lal obra del autor del Quijote. Un trazo biogr¨¢fico de un lector que lee por el placer est¨¦tico y que reconoce: "Si el libro que leo no me seduce por ese camino, lo abandono, adi¨®s muy buenas".