De la p¨²rpura ¡®country¡¯ a la sabidur¨ªa en voz baja

La gracia, ya se sabe, no reside en el gorgorito. ¡°Hay gente que trabaja muy duro para crear preciosas melod¨ªas, y abordarlas dando rodeos con acrobacias vocales lo encuentro poco respetuoso¡±. La tesis corresponde a Suzy Bogguss (Alado, 1956), una de las tesituras m¨¢s elegantes del country y sus aleda?os en la m¨²sica estadounidense. La vocalista y compositora de Illinois act¨²a el domingo 14 de abril por primera vez en Espa?a, dentro del exquisito festival Blues & Ritmes de Badalona. ¡°Har¨¦ un poco de swing, viejo country, cosas a la manera de Merle Haggard o Johnny Cash, un poco de todo. Tambi¨¦n algunas de mis canciones que han sonado en la radio estadounidense y que se encuadran en el country rock¡±.

Hablamos de una artista ecl¨¦ctica dentro de lo que cabe y conocedora a principios de los noventa del ¨¦xito en las listas, los discos de platino y las candidaturas al Grammy. ¡°Cuando empec¨¦, influida por Linda Ronstadt o Emmylou Harris, tocaba muchos palos y eleg¨ªa estilos seg¨²n donde actuara. Te puedo asegurar que los Hell Angels de los bares de moteros ped¨ªan a veces los temas m¨¢s sensibles¡±. Sus a?os de repercusi¨®n comercial vienen de la mano del sello Capitol: ¡°Firm¨¦ por ellos porque me descubrieron en el parque tem¨¢tico de Dolly Parton, una gran plataforma de lanzamiento. No solo llegu¨¦ a abrir para ella delante de m¨¢s de 10 mil personas, sino que nos animaba a hacer nuestras propias canciones y ejerc¨ªa de hermana mayor: a¨²n recuerdo sus charlas sobre no dejarse atrapar por las drogas en la vor¨¢gine del escenario¡±.

Los doces a?os de v¨ªnculo con Capitol conocen una cumbre en 1991 gracias al ¨¢lbum Aces, trufado de hits como Outbound plane o Someday soon. ¡°Y eso que ciertas personas trabajaron en mi contra, porque no cre¨ªan en el disco. Tuve que despedir incluso a mi m¨¢nager. Menos mal que lleg¨® una nueva cabeza visible al sello y apost¨® por m¨ª¡±. Los cambios en la c¨²pula, principio de todo: ¡°Conoc¨ª hasta cuatro jefaturas distintas, y cada una tra¨ªa debajo del brazo un nuevo artista en el que creer¡±. La euforia por vaqueros tipo Garth Brooks arrincon¨® a Bogguss. ¡°No result¨® doloroso porque coincidi¨® con el nacimiento de mi hijo, y aunque pude cambiar de compa?¨ªa prefer¨ª quedarme en un segundo plano m¨¢s relajado¡±. En esa onda sin ambiciones de p¨²rpura, cocin¨® un ¨¢lbum compartido, Simpatico, con el legendario guitarrista de Nashville Chet Atkins. ¡°Fue agridulce, le hab¨ªan detectado un tumor cerebral y la operaci¨®n empezaba a mermar sus habilidades a la seis cuerdas. Tuve la fortuna de ser la ¨²ltima en poder disfrutar de su magisterio¡±. Simpatico pas¨® desapercibido, y los trabajos posteriores a la marcha del productor Jimmy Bowen patinaron: ¡°Me temo que buscaban en m¨ª algo que yo no ten¨ªa¡±.

El despido en la multinacional la llev¨® a funcionar en un peque?o sello propio, Loyal Dutchess, y presumir de una espl¨¦ndida madurez, con dos joyas en la pasada d¨¦cada: el Western swing a la manera de los a?os treinta de Swing (¡°mi madre adoraba la era de las big bands, las escuch¨¢bamos en casa¡±) y un Sweet danger capaz de escalar en las listas de jazz (¡°aunque tambi¨¦n posee elementos de R&B¡±). En ambos su firma, siempre a medias con la de su marido, el compositor Doug Crider, prevalece sobre los covers. ¡°Noto que cada vez fluyo m¨¢s como escritora. Ahora estoy preparando nuevas canciones, tras el par¨¦ntesis necesario para absorber lo que me rodea¡±. Esa pausa la ha resuelto con American Folk Songbook, una colecci¨®n de piezas tradicionales de las que sol¨ªa aprender en el colegio. Y ahora que su hijo ya entra en la universidad, ella recupera las giras europeas, sin renegar del country (¡°a¨²n adoro su sentimiento de tristeza¡±) y con la diversi¨®n clara: ¡°Depende de tu empe?o por continuar compartiendo lo que tienes, no importa el tama?o de los sitios donde toques¡±.

Suzy Bogguss act¨²a el 14 de abril en el Teatre Principal de Badalona, dentro del festival Blues & Ritmes.