Joe Dante: pasi¨®n por la serie B
El director de ¡®Gremlins¡¯ y ¡®Aullidos¡¯ recibe un homenaje en Madrid
Joe Dante (Morristown, 1946) habla con tanta pasi¨®n sobre la historia del cine que cuando la entrevista termina se sienten unas ganas inmensas de navegar durante horas por su p¨¢gina web, Trailers from Hell, para descubrir pel¨ªculas perdidas y recrearse en la serie B. Dante es parte de esta historia, con largometrajes en los que mezcla lo fant¨¢stico con el humor y la cr¨ªtica pol¨ªtica, como Aullidos o Gremlins. Hoy, en el festival de cine fant¨¢stico Nocturna, Gremlins se proyecta en Madrid para homenajear a su autor. En un hotel madrile?o, Dante juguetea con un mu?eco de un gremlin que le ha regalado un aficionado. ¡°Esta no las tuvimos en EE UU¡±, le dice se?alando la figura a su esposa, que interrumpe la charla: ¡°Es espa?ola, de 1984, me encanta¡±. Acompa?a cada afirmaci¨®n con golpecitos en la mesa, le brillan los ojos al hablar de aquellos tiempos en los que hacer cine era m¨¢s f¨¢cil y de aquellas pel¨ªculas que las nuevas generaciones casi ni saben que existen.
Dante comenz¨® en los setenta en la industria del cine montando tr¨¢ilers de pel¨ªculas de Roger Corman. Esa habilidad, que reconoce que es su parte favorita en el trabajo, la demostr¨® en The movie orgy, una montaje de escenas de pel¨ªculas de serie B y anuncios de los a?os 50 y 60 que duraba tres horas. ¡°Tienes m¨¢s control en la sala de montaje, mientras que en el rodaje ocurren millones de cosas. Es ca¨®tico, tienes que darte prisa, el tiempo es dinero¡±, explica. ¡°En la sala de montaje eres solo t¨² y la pel¨ªcula. Tratas de hacerlo lo mejor posible con el material del que dispones. Ah¨ª tienes tiempo¡±.
Spielberg se fij¨® en ¨¦l con Pira?a (1978), que Universal trat¨® de boicotear, ya que la consideraban una copia de Tibur¨®n. El director invit¨® a Dante a dirigir uno de los cap¨ªtulos de En los l¨ªmites de la realidad (1983) y a embarcarse en la pel¨ªcula que le lanzar¨ªa a la fama, Gremlins (1984). ¡°Es m¨¢s f¨¢cil trabajar con actores que con marionetas, que consumen mucho tiempo y supone un proceso exhaustivo¡±, dice Dante al diseccionar por en¨¦sima vez la pel¨ªcula. Primero rod¨® la parte con actores, despu¨¦s durante dos semanas prepararon todo lo relativo a los misteriosos monstruos y al final trabajaron durante dos meses solo con las marionetas. ¡°Era la pel¨ªcula con mu?ecos m¨¢s larga hecha hasta entonces y, a la vez, est¨¢bamos inventando la tecnolog¨ªa. Fue tan arduo que, pese al ¨¦xito, cuando me propusieron hacer una secuela me negu¨¦¡±.
Los estudios le convencieron ofreci¨¦ndole algo ¨²nico en Hollywood: libertad absoluta. ¡°Hice una pel¨ªcula que se re¨ªa de la primera y del hecho de que fuera una secuela que nadie necesitaba. Llegaban los noventa, hab¨ªa muchos cambios tecnol¨®gicos y sociales y pens¨¦ que podr¨ªa meter todo eso. As¨ª que dirig¨ª Gremlins 2, que prefiero a la anterior¡±. "Cuando hicimos Gremlins establecimos una serie de reglas, algunas muy tontas [que no pod¨ªan comer despu¨¦s de medianoche, que no pod¨ªan tocar el agua...], y est¨¢bamos aterrorizados de que el p¨²blico pensara que todo era una tonter¨ªa", narra con una sonrisa p¨ªcara, "pero los espectadores, una vez que entraron y pagaron su dinero, quer¨ªan que les entretuviesen, te daban v¨ªa libre, siempre y cuando no rompieras esas reglas e hicieras trampas y fueras honesto. Por eso hicimos la secuela, para reirnos de esas cosas, como que no comieran tras medianoche¡ ?cu¨¢ndo es medianoche?, ?en qu¨¦ uso horario...?".
Esa libertad a la hora de trabajar no siempre la ha tenido, aunque ha luchado po ella: ¡°Todas las pel¨ªculas tienen una lectura pol¨ªtica, aunque no lo pretendan. Uso el g¨¦nero como una cubierta para mis ideas¡±.
¡°En los ochenta hab¨ªa una estructura diferente. Despu¨¦s que E. T. se convirtiera en un ¨¦xito, los estudios se dieron cuenta de que hab¨ªa dinero en las pel¨ªculas familiares¡±. Y as¨ª llegaron Exploradores, El chip prodigioso, Peque?os guerreros o Matin¨¦e. En esta ¨²ltima rend¨ªa homenaje al cineasta William Castle y a las pel¨ªculas de ciencia ficci¨®n de los cincuenta. Todo en Dante es evocaci¨®n a un cine que parece perdido para los espectadores m¨¢s j¨®venes: ¡°Hay poco entendimiento de la historia cinematogr¨¢fica, en parte porque es historia, y no porque sean pel¨ªculas: resultan viejas y, por tanto, irrelevantes. Por antiguos me refiero a filmes de hace 15 a?os. Eso se extiende a los que dirigen los estudios en Hollywood. No conocen lo que guardan en sus videotecas¡±. Por eso mont¨® Trailers from Hell, donde, junto a cineastas como Roger Corman, John Landis, John Sayles o Guillermo Del Toro, analiza y recomienda filmes antiguos.
¡°Lo dif¨ªcil hoy es conseguir dinero para hacer pel¨ªculas. Antes ven¨ªan a ti, te dec¨ªan: ¡®Tenemos un gui¨®n y este presupuesto, ?quieres hacerla?¡±. Dante cree que rodar ahora es demasiado complicado: ¡°Ya no vienen a ti si eres mayor. Se hacen menos pel¨ªculas y son m¨¢s caras. Hay m¨¢s competencia, as¨ª que tienes que tener tus proyectos y conseguir financiaci¨®n¡±. Para sobrevivir, el director se ha convertido tambi¨¦n en productor: ¡°No puedes producir una sola pel¨ªcula, sino varias a la vez, porque no sabes cu¨¢l saldr¨¢ adelante¡±. Dante dice tener cinco proyectos entre manos, dos de ellos en Francia, todos controlados hasta el final por ¨¦l: ¡°M¨¢s vale tener muchas cosas en el aire para hacer juegos malabares¡±.
Babelia
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