Ventura, otra vez, a lo grande

No consigui¨® Diego Ventura su objetivo de salir a hombros por duod¨¦cima vez, pero hizo m¨¦ritos para ello, fue torero de una pieza, pero fall¨® a la hora de matar al segundo y una actuaci¨®n completa qued¨® reducida a una apote¨®sica vuelta al ruedo.

Fue, otra vez, un torero a caballo a lo grande, en el podio de la m¨¢xima categor¨ªa por la calidad de los caballos que monta, por su dominio de las suertes y por esa facilidad que ha adquirido para conectar con los p¨²blicos.

Ventura explic¨® de nuevo lo que es el temple; y para ello, sac¨® en sus dos toros a Nazar¨ª, un torero que anda a cuatro manos, valiente hasta la heroicidad y que disfruta en la cara de sus oponentes. El lucimiento de caballo y caballero fue total templando a dos bandas, metidos los pitones en los mismos pechos del equino, y no contento con eso, se los deja sentir en la misma piel en un arrebato de torer¨ªa que conmueve a la plaza entera. Nazar¨ª es un torero valeroso, elegante, fino y con empaque. Y tras ¨¦l, Pegaso, que todo lo que hace es de una belleza inigualable. Y Milagro, que quiebra en la misma cara de su oponente, o Morante, el que muerde a los toros, pero se juega el tipo y queda a merced de su enemigo en cada encuentro.

En fin, que la actuaci¨®n en conjunto de Diego Ventura fue de muchos quilates, de emoci¨®n incontenida y arrebato generalizado porque ha alcanzado unos l¨ªmites dif¨ªcilmente alcanzables. Un fallo con las banderillas en su primero, y con el rej¨®n de muerte en el otro le impidieron salir a hombros por la puerta grande. Pero lo de este rejoneador es de calidad suprema.

As¨ª las cosas, Ventura marca la diferencia con sus compa?eros. Ah¨ª est¨¢ el caso de Ferm¨ªn Boh¨®rquez, que mantiene la escuela cl¨¢sica que siempre se le ha reconocido, pero al que se le nota falto de ilusi¨®n. Claro que ha cumplido ya 24 a?os de alternativa, y los a?os no pasan en balde para nadie. Pech¨® con el toro m¨¢s descastado, el primero, clav¨® a la grupa, fall¨® en los pares de banderillas a dos manos en sus dos toros, y se luci¨® a lomos de Bohemio en el tercio de banderillas del cuarto. No estuvo certero con el rej¨®n de muerte y su actuaci¨®n fue silenciada.

Mejora Moura hijo, pero a¨²n le quedan cursos por aprobar. Templa muy bien, algunos pares al quiebro fueron espectaculares junto al caballo Perera y no acert¨® a clavar en lo alto.

Al final, la noticia fue que Ventura sali¨® por su pie, que hizo fr¨ªo y llovizn¨®, como casi todas las tardes, y que la feria se acab¨®.

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