La vida por nada
El director logra una pel¨ªcula desbordante que habla de la fascinaci¨®n por la tragedia y del impacto de la mirada
En 1952, Edgar Neville llev¨® a cabo con Duende y misterio del flamenco una de esas propuestas que, ancladas en la tradici¨®n pero con el dardo apuntando al negocio, parecen a simple vista un souvenirpara extranjeros, un producto para vender fuera y quiz¨¢ sonrojar dentro por culpa de la acumulaci¨®n de t¨®picos, las explicaciones ya asimiladas y ciertas ¨ªnfulas de cortejo at¨¢vico, desolador e inexplicable. Aquel documental, que lleg¨® al Festival de Cannes y que, por supuesto, fue un ¨¦xito fuera de Espa?a, ten¨ªa verdaderos apuntes de po¨¦tica, de enso?aci¨®n y de sorpresa. Como aquella estampa de Antonio, el bailar¨ªn, danzando en plano fijo y con el Tajo de Ronda como fondo natural, que podr¨ªa haber sido un hortera disparate y que gracias al martinete de fondo re¨²ne un aura m¨ªstica.
ENCIERRO
Direcci¨®n: Olivier Van der Zee.
Intervienen: Miguel ?ngel Eguiluz, Joe Distler, Miguel Reta, Julen Madina, Javier Solano.
G¨¦nero: Documental. Espa?a, 2013.
Duraci¨®n: 80 minutos.
Algo de todo esto ocurre tambi¨¦n con Encierro, documental producido en Espa?a, dirigido por el holand¨¦s residente en San Sebasti¨¢n Olivier van der Zee, cuyo subt¨ªtulo no admite duda respecto de sus intenciones: Bull running in Pamplona. Y, sin embargo, como en aquella operaci¨®n de Neville, tambi¨¦n hay mucho de espect¨¢culo verdadero, de documento veraz y de an¨¢lisis certero, en este caso sobre uno de esos hechos absurdos de la vida que no admiten m¨¢s explicaci¨®n que el llano porque s¨ª: salir a una calle atestada de gente para que una manada de toros pueda segarte la vida.
En las ant¨ªpodas de la austeridad narrativa y del poder desmitificador de Notes on the other (2009), extraordinario corto de Sergio Oksman sobre los encierros y la impostura alrededor de Hemingway como personaje, la pel¨ªcula de Van der Zee es adrenalina, mitoman¨ªa y espect¨¢culo. Armado de su brillantez t¨¦cnica, de su filmaci¨®n en tres dimensiones (esa c¨¢mara-cable que corre por la calle de la Estafeta a la velocidad de toro y corredores es un impacto), del dise?o de sonido que consigue llegar al realismo, de los testimonios de expertos y de una notable labor de documentaci¨®n, el director logra una pel¨ªcula desbordante. As¨ª, Van der Zee y Oksman, extranjeros residentes en Espa?a, no est¨¢n tan lejos como parec¨ªa. Hablan de la fascinaci¨®n por la tragedia y del impacto de la mirada, y captan la desconcertante calma de jugarse la vida por nada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.