Eduardo Fal¨², renovador del folklore argentino

El compositor y guitarrista de folklore argentino Eduardo Fal¨², renovador del g¨¦nero en el siglo XX, muri¨® este viernes a los 90 a?os en Buenos Aires. "Sin duda es uno de los artistas fundamentales de nuestra m¨²sica, un pr¨®cer cultural¡±, escribi¨® una de las cantautoras m¨¢s prol¨ªficas del folklore argentino actual, Teresa Parodi, en el peri¨®dico?Tiempo Argentino. ¡°Due?o de un arte ¨²nico, que marc¨® a varias generaciones y nos convenci¨® de lo hermoso que era ser un guitarrero. De hecho, yo creo que much¨ªsimos j¨®venes adoptaron la (guitarra) criolla gracias a ¨¦l. Creo que Fal¨² y (Atahualpa) Yupanqui fueron los dos folkloristas que m¨¢s nos marcaron en ese sentido", a?adi¨® Parodi.

Nacido en un pueblo de la provincia norte?a de Salta, El Galp¨®n, el 7 de julio de 1923, hijo de inmigrantes sirios, su segundo nombre era Yamil, pero se cri¨® como un hombre del campo argentino. En 1945 fue a probar suerte como artista en Buenos Aires. All¨ª, con otro reconocido m¨²sico y poeta salte?o, Jaime D¨¢valos, compusieron canciones que reflejaban la nostalgia compartida por su provincia. Juntos crearon Vidala del nombrador, Vamos a la zafra, Zamba de un triste, Las golondrinas, La nostalgiosa, Sirvi?aco, R¨ªo de tigres, Trago de sombra, Milonga del alucinado, Zamba de la Candelaria, Rosa de los vientos, La verde rama, El silbo del zorzal, Cuando se dice adi¨®s y la recordada Tonada del viejo amor. Con el poeta Manuel J. Castilla dieron a luz Minero potosino, Puna sola y Celos del viento. Con uno de los escritores m¨¢s importantes de la Argentina del siglo XX, Ernesto S¨¢bato, compuso una de sus obras ¨¦picas y conceptuales, Romance de la muerte de Juan Lavalle. Aprendi¨® m¨²sica cl¨¢sica con Carlos Guastavino y as¨ª es que cruz¨® g¨¦neros musicales para crear Suites argentinas. Adem¨¢s, grab¨® con su voz grave y su guitarra maestra?Milonga del muerto, canci¨®n de Sebasti¨¢n Piana basada en un poema de Jorge Luis Borges sobre la Guerra de Malvinas (1982), en la que Reino Unido derrot¨® a Argentina. Fal¨² tambi¨¦n cre¨®, a partir de versos de Borges, Jos¨¦ Hern¨¢ndez, en honor al autor del Mart¨ªn Fierro, la obra m¨¢s importante del g¨¦nero gauchesco de Argentina.

Fal¨² registr¨® m¨¢s de 200 canciones propias, incluidas zambas, carnavalitos, cuecas, bailecitos y melod¨ªas de estilo espa?ol. Tambi¨¦n compuso con los poetas C¨¦sar Perdiguero, Le¨®n Benar¨®s, Hamlet Lima Quintana, Osiris Rodr¨ªguez Castillos y Marta Mendicutti. Varios de sus temas fueron entonados por la maravillosa voz de Mercedes Sosa. Adem¨¢s fue defensor de los derechos de autor. Como tal, ocup¨® el cargo de vicepresidente de la Sociedad Argentina de Autores y Compositores de M¨²sica. Padre de dos hijos, uno de ellos guitarrista, Juan Jos¨¦, fue tambi¨¦n t¨ªo de otro instrumentista consagrado del folklore argentino, Juan Fal¨².

A los diez a?os se enamor¨® de la guitarra. Primero aprendi¨® solo y despu¨¦s tom¨® clases. Debut¨® en el grupo Los Troperos, que tocaba en una radio de la ciudad de Salta. Despu¨¦s integr¨® La Tropilla de Huachi Pampa y m¨¢s tarde emprendi¨® camino como solista, primero en su provincia y despu¨¦s en Buenos Aires. Entre la d¨¦cada del 50 y la del 70 no se cans¨® de dar conciertos por el mundo: desde EE UU hasta varios pa¨ªses latinoamericanos, desde Europa, incluida Espa?a, hasta Jap¨®n. ¡°Era un hombre de la guitarra en el mundo, todos hablaban con mucho respeto de ¨¦l en Europa, en todas partes. De este dolor terminaremos d¨¢ndonos cuenta cuando entren a escasear sus discos que nos dejaron conmovidos, dolidos, sabiendo con dolor que la vida es esto¡±, escribi¨® otro folklorista compatriota de Fal¨², Jaime Torres, como despedida en Tiempo Argentino.