Oriol Maspons, un premio para la fotograf¨ªa

No voy a a?adir documentaci¨®n a lo dicho por Rosa Reg¨¤s, Laura Terr¨¦ y P¨¦rez Siquier. Conoc¨ª a Oriol Maspons por sus escritos y sus fotograf¨ªas en AFAL. Y a partir de entonces nuestra relaci¨®n fue muy cercana. Admiraba su humor, creatividad y genialidad. Era cercano a los grandes fot¨®grafos y su forma de interpretar a los personajes ten¨ªa morbo y humor.

Extrovertido, se relacion¨® con fot¨®grafos europeos y norteamericanos, les fotografiaba e intercambiaba obras con ellos. A m¨ª me puso en contacto con Robert Frank. Generalmente, la relaci¨®n entre autores no es muy corriente, cada uno tiene sus puntos de vista, su forma de expresarse y no se intercambian m¨¦todos ni t¨¦cnicas, en este caso con otros fot¨®grafos.

Pasaban los a?os y nuestra comunicaci¨®n era constante con sus escritos y llamadas telef¨®nicas. Manej¨¢bamos un mundo de ideas. Conectar con ¨¦l era especial por su agudeza y sentido cr¨ªtico. Tuvimos una gran amistad.

Su gran amigo Xabier Miserachs, falleci¨® en el a?o 1998, y su ausencia le afect¨® mucho. Le anim¨¦ a escribir o participar en televisi¨®n, ten¨ªa capacidad y desenvoltura, adem¨¢s de creatividad. Lo hizo y con buen ¨¦xito. Yo me daba cuenta de que una personalidad tan compleja como la suya no estaba c¨®moda en un entorno que ya no invitaba a genialidades.

Cuando realic¨¦ la serie de los retratos psicol¨®gicos, con trasfondo pol¨ªtico, Maspons, que trabajaba entonces con retratos de artistas extranjeros, entendi¨® perfectamente su inter¨¦s cr¨ªtico y pol¨ªtico. Intent¨¦, intentamos, presentar su candidatura para una vacante en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. La idea fue bien acogida y a Oriol le hizo ilusi¨®n, pero surgieron complicaciones para ¨¦l en Barcelona y no pudo ser. Lo sent¨ª porque hubiera sido un gran est¨ªmulo entonces, para ¨¦l y para los acad¨¦micos.

Oriol Maspons fue un premio para la fotograf¨ªa en Espa?a.