La muestra de Dal¨ª en el Reina Sof¨ªa se clausura con m¨¢s de 730.000 visitas

La furia del comienzo ha llegado hasta el final. Las colas andaban all¨¢ por mayo por la hora y media. Solo hab¨ªa pasado una semana desde que se inaugurara el 26 de abril la exposici¨®n del a?o en el Museo Reina Sof¨ªa, y ya la pinacoteca hab¨ªa decidido que era necesario ampliar el horario los viernes hasta las 11 de la noche para Dal¨ª. Todas las sugestiones po¨¦ticas y todas las posibilidades pl¨¢sticas. La paciencia de los asistentes para ver la retrospectiva se ha tenido que extender hasta a seis horas de hileras en las tres ¨²ltimas semanas. A las puertas del museo ya hab¨ªa gente a las ocho de la ma?ana dispuesta a conseguir sus entradas por ocho euros, dos horas antes de que se abriera la taquilla. El n¨²mero de visitas no ha superado a las que tuvo el centro Georges Pompidou de Par¨ªs que, en un plazo de cuatro meses, roz¨® las 800.000. Pero las cifras definitivas que ha dado la pinacoteca espa?ola hablan a gritos del artista de Cadaqu¨¦s como fen¨®meno del arte: 730.339 personas han acudido a la cita en estos cuatro meses y medio. El Reina Sof¨ªa la valora como la exposici¨®n de mayor ¨¦xito de p¨²blico de los ¨²ltimos a?os.

Las dos ¨²ltimas semanas se ha ampliado el horario hasta las 11 de la noche, hasta el pasado viernes y el s¨¢bado en que se dej¨® a los visitantes observar hasta la 1 de la madrugada obras como El gran masturbador, de las m¨¢s de 200 piezas entre pinturas, esculturas o dibujos que ilustran el principio de su carrera, los trabajos escenogr¨¢ficos o su pasi¨®n por la ciencia y la tecnolog¨ªa ya en los sesenta. La organizaci¨®n de la exposici¨®n ha tenido que ir reajustando tanto tiempos como log¨ªstica. Por ejemplo, cuenta una portavoz, los ¨²ltimos cuatro d¨ªas se permit¨ªa adquirir entradas para d¨ªas siguientes. Las que se han vendido por Internet, y de las que a¨²n no hay un n¨²mero oficial, se agotaron hace una semana. Ya en los inicios, el equipo de Borja-Villel, director del centro, celebr¨® reuniones de urgencia para decidir la gesti¨®n de las visitas. Pero, a diferencia de lo que hizo el Pompidou, el Reina Sof¨ªa no ha abierto finamente sus puertas por la noche durante los ¨²ltimos d¨ªas.

La asistencia ha superado las previsiones del Reina Sof¨ªa, que calcula que la media de visitantes ha sido de 6.500-7.000 por d¨ªa. La instituci¨®n, prosigue un portavoz, ha hecho todo lo posible por encauzar esta masiva afluencia, sobre todo en las ¨²ltimas semanas, dentro de lo que se pod¨ªa hacer de acuerdo con el aforo, que se garantizara una visita de calidad y por la misma seguridad de las obras que se exponen.

El perfil de los visitantes se divide al 50% entre turistas y espa?oles. No obstante, durante las tres ¨²ltimas semanas que han marcado un nuevo pico ¡°se han multiplicado los de procedencia nacional¡±, seg¨²n la organizaci¨®n.

La exposici¨®n sobre Dal¨ª ha buscado abrir la mirada sobre su obra, mostrando la manera en qu¨¦ construy¨® como pensador su visi¨®n del mundo. Organizada por el Museo Reina Sof¨ªa, el Centro Pompidou de Par¨ªs y con la colaboraci¨®n del Salvador Dal¨ª Museum Saint Petersburg (Florida) y comisariada por Montse Aguer, la idea era reflejar c¨®mo el controvertido surrealista fue mucho m¨¢s all¨¢ de la creaci¨®n de un movimiento. Han prestado sus obras el MoMA de Nueva York, el Philadelphia Museum of Art, la Tate Modern de Londres y los Mus¨¦es Royaux des Beaux-Arts de B¨¦lgica. Su juventud en la Residencia de Estudiantes, la faceta m¨ªstica y nuclear¡­ En todo caso, Salvador Dal¨ª sigue siendo ese showman medi¨¢tico que tambi¨¦n descubre la exposici¨®n.