La edici¨®n en Brasil: de lo imprescindible a lo felizmente inevitable

La literatura brasile?a es fundamental en nuestro cat¨¢logo de Adriana Hidalgo, desde que comenzamos con la editorial en 1999. Durante estos catorce a?os y tomando todo 2013 habremos publicado una veintena de maravillosos textos de autores y autoras de Brasil, no solo porque la literatura de aquel pa¨ªs es imprescidible en el panorama de las letras modernas y contempor¨¢neas universales, sino porque a¨²n no es suficientemente le¨ªda, ni est¨¢ suficientemente difundida fuera de sus fronteras. Por su calidad e inter¨¦s deber¨ªa ser tan conocida como la m¨²sica y el f¨²tbol brasile?os. Pero como a¨²n esto no sucede, la funci¨®n de un editor independiente debe ser activa: buscar, rescatar, descubrir, traducir, dar a conocer, intentar que cada vez menos lectores se est¨¦n perdiendo tan buena literatura.

Excepto dos, todos los libros que publicamos de Brasil y buena parte de sus autores, estaban in¨¦ditos hasta ahora en castellano. Y es l¨®gico que por razones (al menos) de vecindad, desde la Argentina estemos impulsando con entusiasmo que los lectores de todo el mundo de habla castellana descubran esta gran literatura. Por eso podr¨¢n encontrarse con nuestros libros tanto en las librer¨ªas de Am¨¦rica Latina como por supuesto en las de Espa?a.

Fuera del mundo de los especialistas y m¨¢s a all¨¢ de la traducci¨®n de algunos escritores can¨®nicos del siglo XIX y el XX la literatura brasile?a ha estado relativamente aislada de otras literaturas en parte por cuestiones idiom¨¢ticas (y de geopol¨ªticas lingu¨ªsticas) y en parte por las pol¨ªticas editoriales de fragmentaci¨®n de los mercados. Se da muchas veces el caso de grandes editoriales espa?olas con sede en Brasil, que publican a autores brasile?os en Brasil, pero deciden no traducirlos al castellano ni publicarlo en otras casas de la misma empresa, en Argentina, Colombia o Espa?a.

La vastedad cultural y territorial de Brasil hace que no pueda hablarse de una sola literatura, sino de varias. Para dar dos ejemplos extremos: la literatura del noredeste (y del sert¨®n) y la de Rio Grande do Sul.

La vastedad cultural y territorial de Brasil hace que no pueda hablarse de una sola literatura, sino de varias. Para dar dos ejemplos extremos: la literatura del noredeste (y del sert¨®n) y la de Rio Grande do Sul

Gran sert¨®n: veredas de Jo?o Guimar?es Rosa, es una novela can¨®nica, viva e inspiradora, que con un lenguaje nuevo da voz a un territorio y a una ¨¦poca. Otro libro crucial del mismo autor: Sagarana, est¨¢ conformado por un conjunto de varias nouvelles que anticipan lo que se vendr¨ªa con Gran sert¨®n. Entre los grandes textos recientes sobre el Nordeste se cuenta la apasionante novela Galilea -ganadora del consagratorio premio Sao Paulo de literatura-, escrita por Ronaldo Correia de Brito.

Y si pasamos a Rio Grande do Sul, est¨¢n Dyonelio Machado, con su kafkiana El d¨ªa de las ratas; Caio Fernando Abreu y su tragic¨®mica ?D¨®nde andar¨¢ Dulce Veiga?; Jo?o Gilberto Noll que con su prosa existencial, deslumbrante y beckettiana -en novelas como Lord, Bandoleros, Harmada y A cielo abierto- gan¨® varias veces el prestigioso Premio Jabuti. O podemos citar a un excelente escritor joven como Altair Martins, que con su primera novela, La pared en la oscuridad, tambi¨¦n gan¨® el Premio S?o Paulo.

Entre las escritoras m¨¢s radicales, leidas e influyentes de Brasil est¨¢ Clarice Lispector, y la mejor puerta de entrada a su obra (seg¨²n dijo este diario) son sus cr¨®nicas in¨¦ditas Revelaci¨®n de un mundo y Descubrimientos. Quien quiera saber m¨¢s sobre la misteriosa e intensa vida de Lispector puede remitirse a su completa biograf¨ªa Clarice, una vida que se cuenta, de N¨¢dia Battella Gotlib.

Debemos nombrar a otro enorme escritor, Jo?o Antonio, que en su libro Malagueta, Perus y Bacanazo hizo con el lenguaje de una S?o Paulo marginal, el equivalente urbano de lo que Guimar?es Rosa hab¨ªa hecho con el sert¨®n.

En 2012 fue el centenario del nacimiento de Nelson Rodrigues el m¨¢s celebrado escritor de Rio de Janeiro y quien mejor pint¨® esa ciudad en La vida tal cual es. Cuando distribuimos muy recientemente ese libro en Espa?a, el diario EL PA?S escribi¨®: ¡°Paren las rotativas para anunciar la aparici¨®n en castellano de La vida tal cual es¡±. A no desesperar, habr¨¢ un volumen II de esta saga carioca.

Y en 2013 festejaremos otro centenario, el de Vinicius de Mor?es, con una deliciosa antolog¨ªa po¨¦tica biling¨¹e.

Hace catorce a?os, cuando empezamos a construir este puente con la literatura brasile?a, Brasil estaba entre los diez o doce pa¨ªses m¨¢s importantes del mundo. Hoy, tan poco tiempo despu¨¦s, est¨¢ a punto de transformarse en el quinto pa¨ªs en importancia. Sin embargo, la mayor parte de los libros que publicamos de Brasil y buena parte de sus autores, estaban in¨¦ditos en castellano. En breve, y cada vez por m¨¢s razones, la literatura brasile?a ser¨¢ felizmente inevitable.