Sheikha Al-Mayassa, la m¨¢s poderosa del mundo del arte
La lista de los 100 m¨¢s influyentes que elabora 'ArtReview' entroniza a la mujer con la cartera m¨¢s generosa Catar hace siete a?os que invierte del orden de 700 millones de euros anuales en obras
Una combinaci¨®n de la influencia que una persona u otra ejerza en la escena internacional del arte; de su capacidad para que el dinero se mueva en el circuito y de la actividad que haya llevado a cabo en los ¨²ltimos 12 meses es la receta para ser incluido en la lista de los m¨¢s poderosos del mundo del arte que publica anualmente por estas fechas ArtReview, con sus Power 100. A tenor de los resultados, la hermana del emir de Catar Sheikha Al-Mayassa bint Hamad bin Khalifa Al-Thani ha sido la m¨¢s activa y ahora la encabeza, despu¨¦s de que en la clasificaci¨®n de 2012 apareciera ya como la m¨¢s influyente del arte en Oriente Medio y tras escalar diez posiciones. Por segunda vez consecutiva un nombre femenino, de entre los galeristas, coleccionistas, comisarios y artistas que, seg¨²n la web, son candidatos, se hace con la corona. El a?o pasado fue el turno de la comisaria italiana Carolyn Christov-Bakargiev, que fue la directora art¨ªstica de Documenta 13 de 2012. La cita que se celebra en la ciudad alemana de Kassel y es considerada el acontecimiento art¨ªstico m¨¢s importante en su categor¨ªa a nivel mundial logr¨® entonces un aumento de p¨²blico del 14% con respecto a la anterior de 2007.
El caso es que a nadie deber¨ªan sorprenderle los resultados que apuntan al arte como forma de intercambio en un mundo global, ha se?alado Mark Rappolt, editor de ArtReview, en The Guardian; la carrera hacia al ascenso de Sheikha Al-Mayassa ya tiene su ¡ªfort¨ªsimo¡ª recorrido. Catar no cesa de levantar masivos proyectos para convertirse en el centro del deporte, de la moda, de la educaci¨®n, del lujo, del cine, de la arquitectura... Si las reservas de petr¨®leo o de gas pueden ser perecederas, no lo es desde luego la lluvia de ideas que siguen cayendo desde la peque?a pen¨ªnsula en forma de perla que cuenta con la mayor renta per c¨¢pita del mundo (alrededor de 80.000 euros). Con la mirada en un horizonte m¨¢s all¨¢ sin tapujos para su ambici¨®n.
Sheikha Al Mayassa tiene el encargo de su familia de convertir Doha en la capital del arte
Sheikha Al Mayassa es la compradora de arte m¨¢s importante del mundo, una mecenas cuya presencia se rifa entre lo m¨¢s granado del mundillo. Hija de la segunda esposa del emir (que preside la Fundaci¨®n Catar), regres¨® a su pa¨ªs cuando ya la potente maquinaria de adquisici¨®n de obras de arte llevaba cincuenta a?os puesta en marcha por su familia. Ah¨ª est¨¢ el ejemplo de Los jugadores de cartas de Paul C¨¦zanne, 190 millones de euros que se pagaron en venta privada y que marcaron un r¨¦cord. O los 224 que se han invertido en 11 obras de Mark Rothko, o los 36 millones para comprar Ni?o con paloma, seg¨²n el diario franc¨¦s Le Figaro, uno de los tesoros de la National Gallery de Londres, y que pertenec¨ªa a una familia galesa. La pulsi¨®n coleccionista se alimenta de otras grandes firmas: Warhol, Bacon, Hirst, Lichtenstein¡ La suma invertida en los ¨²ltimos siete a?os habla a voces de ese deseo de ¡°instigaci¨®n cultural¡± al que se ha referido Sheikha Al Mayassa. Se estima, a falta de cifras oficiales y confirmaci¨®n por parte de la real familia, que el ritmo de gasto de los ¨²ltimos siete a?os ha sido de 700 millones de euros cada a?o con el fin de adquirir obras de arte. Como explicaba el semanario The Economist, la familia en el poder se niega a aclarar si las compras se hacen a t¨ªtulo privado o en nombre del Estado o de qu¨¦ forman van a ser beneficiosos para los ciudadanos. El asunto del macroimpulso cultural est¨¢ en manos de la familia, que se cuida bien de revelar datos de presupuesto. Por temor a que roben las ideas, indicaron.
Sheikha Al Mayassa est¨¢ al frente de la Autoridad de Museos de Catar, responsable a su vez de los descomunales Museo de Arte Isl¨¢mico ¡ªabierto en 2008 y ya que presume de estar entre los seis mejores del mundo¡ª y el de Arte Moderno, adem¨¢s de ocuparse del Instituto de Cine de Doha, entre otros proyectos de conquista cultural.
Mujeres en alza. El arte alem¨¢n cruza fronteras
En la lista de los 100 poderosos el artista Ai Weiwei sigue apareciendo en primer lugar en su categor¨ªa, si bien baja desde el tercer escal¨®n en el que estaba subido en 2012 al noveno. Si la artista estadounidense Cindy Sherman, maga del retrato conceptual, sigue en el n¨²mero 13, otra experimenta un irresistible subid¨®n: Marina Abramovic va desde la posici¨®n 35 a la 11. Alemania tiene una fuerte presencia en la escalera confeccionada por ArtReview y dos mujeres precisamente copan las posiciones m¨¢s altas: Isa Genzken, quien se ha dedicado sobre todo a la escultura, que consigue un n¨²mero 35 desde el 46 que ten¨ªa el a?o pasado, y Rosemarie Trockel. El fot¨®grafo Wolfgang Tillmans, Hito Steyerl que trabaja en video documental ensay¨ªstico y Tino Sehgal, art¨ªfice de "situaciones construidas" dan asimismo cuenta del poder¨ªo alem¨¢n.
El pen¨²ltimo ejemplo ha venido tambi¨¦n de la mano de la hija del antiguo emir, a quien su familia ha encargado convertir Doha en la capital del arte, con la inauguraci¨®n de Qulture, una publicaci¨®n online de impactante factura que, como su nombre sugiere, ahonda en que el peque?o emirato marque la pauta, como la agenda que hay que consultar para saber qu¨¦ hay de arte, tendencias en gastronom¨ªa por ejemplo, viajes, deportes o estilos de vida en la regi¨®n del Golfo P¨¦rsico. Y un acontecimiento inminente lo acompa?a: la exposici¨®n de Damien Hirst Relics, la primera muestra exclusiva del artista en Oriente Medio en la galer¨ªa Al Riwaq de Doha. Una de sus piezas, por cierto, ha tenido que ser censurada para respectar la sensibilidad de los coleccionistas chinos: la estatua de san Bartolom¨¦ tiene ahora, a diferencia de la original de 2006, una hoja que oculta sus genitales. Si la revista online empez¨® con fuerza, a las pocas semanas sin embargo ha pasado a ser un proyecto fantasma por la desaparici¨®n tanto de la web como de las noticias que ya hab¨ªan sido colgadas en la p¨¢gina oficial de Facebook. La direcci¨®n de la revista lo ha atribuido a problemas t¨¦cnicos.
Whitney G. Robinson, co-fundador de Qulture, con una trayectoria larga en Hearst Magazines y graduado por Duke (Carolina del Norte), la universidad estadounidense a la que asisti¨® Sheikha Al Mayassa para estudiar Ciencias Pol¨ªticas y Literatura, ve as¨ª la necesidad de este proyecto: ¡°Hay cambios muy r¨¢pidos en la cultura y arte de Oriente Medio. Para seguir el ritmo de lo que sucede en la regi¨®n y de lo que importa, la gente necesita un insider, sin filtros. Qulture es ese pulso, un centro cultural de primera categor¨ªa que marca un nuevo patr¨®n en la cobertura de las artes y de la cultura¡±. El editor a?ade que este proyecto constituye una oportunidad para que los lectores conecten con el lugar ¡°extraordinario y din¨¢mico¡± que es Catar. ¡°Llevamos el esp¨ªritu de la regi¨®n¡±, y, junto con esto, indica Robinson, un di¨¢logo que se crea por las historias, el entendimiento entre el este y el oeste. ¡°La clave para abrir el potencial de paz en nuestras sociedades es el periodismo cultural¡±, afirma de manera rotunda, mientras el periodista no duda en asegurar que Catar lleva el camino de convertirse en visita obligada en el mundo del arte, y estar a la altura de Nueva York, Londres, Hong Kong o Shangh¨¢i.
El mismo silencio tiene como respuesta la pregunta sobre el dinero que se ha destinado a la creaci¨®n de Qulture, que se va desplegando entre poderosos colores para dar cuenta de la agenda cultural de la regi¨®n. ¡°Ya se dice bastante en la informaci¨®n global en t¨¦rminos de religi¨®n o de pol¨ªtica, pero no se cuenta mucho m¨¢s¡±. De esta manera, con una edici¨®n tanto en ingl¨¦s como en ¨¢rabe, los creadores piensan que cubren un hueco en temas que hasta ahora se hab¨ªan desasistido. ?El p¨²blico al que se destina? Los ciudadanos catar¨ªes, los expatriados occidentales que residen en el emirato ¡ª de los cerca de dos millones de habitantes que viven en Catar, solo un 15% son nativos¡ª o cualquiera allende los mares que est¨¦ interesado en lo mucho que se cuece en un emirato en el que, por otra parte, no existen los partidos pol¨ªticos.
El controvertido artista Damien Hirst protagoniza uno de los art¨ªculos de Qulture y lo hace en un momento en que adquiere una fuerte presencia en el emirato. Su exposici¨®n Relics es la mayor retrospectiva que se ha hecho hasta ahora de un hombre c¨¦lebre por su apuesta por las calaveras de diamantes o los animales muertos preservados en formol. En la muestra presenta precisamente un nuevo tibur¨®n de casi 1.500 kilos y obras como Mil a?os (A thousand years), una pieza de 1990 que se compone de descomposici¨®n: carne putrefacta y moscas. Pero no va a ser el ¨²nico Hirst por el que apueste Doha. El brit¨¢nico est¨¢ tambi¨¦n detr¨¢s de las 14 torres escult¨®ricas de bronce que muestran la evoluci¨®n de un feto y que franquean la entrada de Sidra Medical and Research Centre, una serie realizada a petici¨®n de la Autoridad de Museos de Catar.
Las entradas y las omisiones de Power 100
Dos jovenc¨ªsimos estadounidenses se unen por primera vez a la lista: Ryan Trecartin, de 32 a?os que llega de sopet¨®n al n¨²mero 64, y que explora la cultura que nace de la era post-Internet, y el bloguero de 25 a?os Forrest Nash que con su p¨¢gina web Contemporary Art Daily logra un mill¨®n de visitas cada mes. La juventud en contraste con la veteran¨ªa: la artista japonesa Yayoi Kusama entra por primera vez con 84 a?os en este peculiar olimpo de qui¨¦n corta el bacalao en el arte. Zeng Fanzhi, el artista chino que m¨¢s vende en la actualidad, se incorpora al 83. ?Los desaparecidos? El magnate Charles Saatchi que fue el primero de la clase en 2002 y el controvertido Damien Hirst que lleg¨® al 41 en 2012 no est¨¢n.
Babelia
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