Los Platino

Cuando parec¨ªa que ya se hab¨ªan entregado todos los premios cinematogr¨¢ficos del a?o, ma?ana, en Panam¨¢, se celebrar¨¢ la primera ceremonia de los denominados premios Platino del cine iberoamericano, que nacen con la vocaci¨®n de ser una r¨¦plica a los Oscar. Una llamada de atenci¨®n al resto del mundo sobre la existencia de unas cinematograf¨ªas creativas y brillantes que no limitan sus ¨¦xitos a casos aislados, como podr¨ªan ser este a?o el del mexicano Alfonso Cuar¨®n con Gravity, o el de la venezolana Mariana Rond¨®n con Pelo malo, Concha de Oro en el festival de San Sebasti¨¢n, sino que hay mucho m¨¢s y bueno. As¨ª lo demuestran las 701 pel¨ªculas de 22 pa¨ªses, Espa?a entre ellos, que compiten por los siete premios Platino. Aunque no se han escatimado medios para que su celebraci¨®n sea un espect¨¢culo, estos premios arrancan con m¨¢s modestia, al menos en el n¨²mero de trofeos: mejor pel¨ªcula, direcci¨®n, actriz, actor, m¨²sica, animaci¨®n y documental, frente a los 25 que se dan en los Oscar o los 29 de los Goya.

Habr¨¢ tambi¨¦n un premio de honor, que en esta primera convocatoria recibir¨¢ la actriz brasile?a de 64 a?os Sonia Braga. Nominada en tres ocasiones a los Globos de Oro, en una a los BAFTA y en otra a los Emmy, Sonia Braga se ha codeado con grandes del cine, trabajando a las ¨®rdenes, entre otros, de Bruno Barreto (Do?a Flor y sus dos maridos), Robert Redford (Un lugar llamado Milagro), Clint Eastwood (El principiante), H¨¦ctor Babenco (El beso de la mujer ara?a), Paul Mazursky (Presidente por accidente) o Carlos Diegues (Tieta de Agreste)¡­ en cerca de 80 pel¨ªculas de cine o televisi¨®n (Sexo en Nueva York, por ejemplo), rodadas entre Brasil y Hollywood; y tambi¨¦n en Espa?a, donde Sonia Braga aparece envejecida por el maquillaje como madre de Lope (2010), pel¨ªcula del brasile?o Andrucha Waddington. Su talento interpretativo unido a una sensualidad desbordante han deslumbrado en sus pel¨ªculas a todos, aunque quiz¨¢s fuera Marcello Mastroianni su m¨¢s ardiente enamorado, y con motivo dada la exhibici¨®n de belleza que ella hace en esa comedia triste y picante, Grabriela, clavo y canela, que en la taquilla espa?ola no destac¨® como merec¨ªa. Sea como fuere, la presencia de Sonia Braga en los premios Platino quiz¨¢s estimule a una revisi¨®n de su trabajo, y de paso del cine latinoamericano que desconocemos a¨²n por estos lares. Y viceversa. En realidad de eso se trata, de hacer m¨¢s fluida la relaci¨®n entre las distintas cinematograf¨ªas iberoamericanas y de no estar todos sumisos a las propuestas de Hollywood y aleda?os.