El gran conocedor del ser humano

N¨²ria Espert se ha encontrado con Shakespeare muchas veces a lo largo de su carrera. ?Incluso hizo de Hamlet! ¡°S¨ª, pero no estaba preparada, ten¨ªa 24 a?os, ojal¨¢ lo hubiera hecho diez a?os despu¨¦s¡±, recuerda. ¡°En cambio la Julieta que interpret¨¦ con 16 a?os, dirigida por Esteve Poll sali¨® muy bien¡±. Tambi¨¦n ha encarnado ¨Cd¨¢ndole como con Hamlet la vuelta a la tradici¨®n shakespeariana de que los papeles de mujer los hac¨ªan hombres- al mago Pr¨®spero de La tempestad, otro de los grandes papeles del Bardo, si es que no lo son todos. ¡°Como obra prefiero Hamlet, La tempestad es demasiado misteriosa para m¨ª, nunca he sido capaz de entender todo ese contenido, esos valores que se le atribuyen¡±, reflexiona.

Shakespeare, ?c¨®mo es para el actor?. ¡°Te acercas a ¨¦l como int¨¦rprete siempre con mucho temor, dudas de tu capacidad intelectual, se lo puede hacer en tantos niveles: la an¨¦cdota, el argumento de sus obras ya es fascinante, pero hay tantos enigmas escondidos dentro. Mira los Sonetos, maravillosos como poes¨ªa, y a la vez con ese misterioso contenido biogr¨¢fico¡±. Espert conviene que parece incre¨ªble que todo el Planeta Shakespeare, sea obra de una sola cabeza, de una mente y un coraz¨®n ¨²nicos. ¡°Es tan poco lo que sabemos de ¨¦l¡±, suspira, ¡°tiene que haber sido alguien muy culto, muy viajado, muy vivido, con mucho sentido del humor, con pasi¨®n, conocimientos de filosof¨ªa, un poeta. Todas las hip¨®tesis que se han formulado sobre su personalidad parecen plausibles, y a la vez ninguna satisface del todo. En fin, tambi¨¦n parece imposible que la Capilla Sixtina la pintara un ¨²nico Miguel ?ngel y no una veintena. Recuerdo que con Robert Lepage habl¨¢bamos de ello y el argumentaba y argumentaba y yo pensaba ¡®y en el fondo qu¨¦ m¨¢s da, ah¨ª est¨¢ Shakespeare y no te lo acabas¡¯, y eso es lo que cuenta, nunca lo agotaremos¡±.

?Qu¨¦ es lo que nos ofrece Shakespeare para fascinarnos tanto? ¡°Su conocimiento del ser humano; con dos l¨ªneas te describe un personaje, ya sabes qui¨¦n es, a qu¨¦ est¨¢ abocado, cu¨¢l ser¨¢ su destino. Y no me refiero solo a los grandes protagonistas, sino tambi¨¦n a los personajes menores. Mira los dos hijos de Gloucester en El rey Lear, Edgard y Edmundo, tienen unos peque?os mon¨®logos y sin embargo creo que s¨¦ m¨¢s de ellos que de mis hijas¡±.

¡°Hablando de Shakespeare, de la sabidur¨ªa de Shakespeare en su tratamiento del ser humano¡±, contin¨²a Espert, ¡°Jerzy Grotowski me dijo una vez: ¡®La gente no cree en Dios, pero Dios existe, y es Shakespeare. Solo Dios podr¨ªa saber tanto del ser humano¡¯¡±.

?Para un actor, Shakespeare es una garant¨ªa o un reto? ¡°Es la garant¨ªa de que por muy malo que seas no lo vas a estropear. Y el reto de estar a su altura¡±. N¨²ria Espert tiene claro que papel del Bardo no ha hecho y le gustar¨ªa: ¡°Lady Macbeth. Parece raro que no lo haya hecho porque su registro es adecuado para m¨ª¡±. Una mujer larger than life. ¡°S¨ª, en cambio ¨¦l, el marido, no tanto. Un hombre menor. Ella no, inmensa, tr¨¢gica, como Electra, como Medea¡±. Hay el gran debate eterno de si Lady Macbeth ha tenido hijos o no, o los ha perdido. ¡°No, no los ha tenido. Me parece claro en la escena en que Macbeth le dice que de quedar en cinta solo podr¨ªa alumbrar hombres, y hombres valerosos. ?Es est¨¦ril? No lo sabemos. Me inclino por creer que el est¨¦ril es ¨¦l. Sus espermatozoides no marchan bien¡±. Me atrevo a sugerir que al rev¨¦s que el bosque de Birnam, y la actriz r¨ªe de buena gana.

?Cu¨¢l es su escena favorita de Hamlet? ¡°Seg¨²n qui¨¦n la interprete, la he visto representada tantas veces, por tantos actores, maravillosos, buenos, regulares y malos. A veces ves que el actor est¨¢ por el medio y no acaba de hacerse con la obra, me pone de los nervios, me dan ganas de gritarle ¡®?chico, l¨¢nzate ya, t¨ªrate, hazlo!¡¯. Cuando funciona, mi parte favorita es la del cementerio. Ah¨ª Hamlet ha cambiado, ha vivido m¨¢s, es m¨¢s maduro¡±. ?Y Ofelia, pobre? ¡°Pobre, no s¨¦ qu¨¦ decirte, las Ofelias¡­. Curioso personaje, si no la haces una ni?a de 14 a?os, si la ves como una chica mayor¡­ Polonio no parece un padre para volverte loca si te lo matan. Tampoco parece tan enamorada de Hamlet. No s¨¦, ?qu¨¦ quiso hacer Shakespeare con ese personaje? Probablemente lo interpretaba un chiquito. Se nota el papel retocado, como que no tiene una l¨ªnea clara. Como si Shakespeare le a?adiera cosas para ayudarlo a explicarse. Y esa escena de la locura, ?es imposible!, ah¨ª se estrella cualquiera. En cambio, en la ¨®pera Hamlet, de Thomas, est¨¢ mucho mejor. ?Ofelia es m¨¢s convincente cantada que hablada!¡±.

A veces hay algo de chapucero en Shakespeare, de genial chapucero. ¡°Es que trabajaban en unas condiciones entonces¡­ ?y ahora que nos fastidia a los actores que venga el autor a los ensayos! Imag¨ªnate en aquella ¨¦poca, en aquella compa?¨ªa, con Shakespeare por todas partes y dando cuartillas mientras las escrib¨ªa. Ahora somos tan respetuosos, lo queremos todo bien acabado y nos arrugamos ante cualquier cambio¡±. ?Le hubiera gustado a N¨²ria Espert formar parte de la compa?¨ªa de Shakespeare? ¡°Ah, no me habr¨ªan dejado, tendr¨ªa que haber pasado antes por Casablanca¡±. ?? ¡°A hacerme un cambio de sexo. Eran todo hombres, recuerda¡±. Bueno, con ella quiz¨¢ har¨ªan una excepci¨®n. ¡°Ja, ja, ja, no s¨¦. Por eso no me gusta Shakespeare in love, es mentirosa en ese aspecto¡±.

?Es actual Shakespeare? ¡°Absolutamente, est¨¢ en la calle, la gente ha aprendido por fin a no respetarlo, en el mejor sentido de la expresi¨®n. Entienden que no hay en realidad una barrera con ¨¦l, que les va a llegar, que lo van a pasar bien, se trate de una de sus tragedias o de sus comedias. Y esa es la gran victoria de Shakespeare, la popularidad. Su gran victoria sobre el tiempo y el espacio: llegar a todo el mundo, a la gente de la calle¡±.