El tesoro de Nuestra Se?ora de Las Mercedes se muestra por fin al p¨²blico

Acudi¨® la pr¨¢ctica totalidad de las autoridades competentes. No era para menos: hoy se inauguraba? en el Museo Nacional de Arqueolog¨ªa Subacu¨¢tica de Cartagena la exposici¨®n que muestra por fin al p¨²blico el tesoro de la fragata Nuestra Se?ora de las Mercedes. Espa?a lo recuper¨® tras una larga pelea judicial con la compa?¨ªa de cazatesoros Odyssey, que lo extrajo del fondo del mar donde el nav¨ªo se hundi¨® en 1804.

As¨ª, frente a unos selectos invitados, se hallaba la comitiva encabezada por el secretario de Estado de Cultura, Jos¨¦ Mar¨ªa Lassalle -quien calific¨® la recuperaci¨®n del tesoro de "¨¦xito internacional sin precedentes en la lucha contra el expolio y el tr¨¢fico il¨ªcito de patrimonio cultural"-. Satisfacci¨®n, orgullo y unidad para celebrar la nueva secci¨®n del ARQUA, bautizada como La navegaci¨®n oce¨¢nica y que incluye, en forma de exposici¨®n permanente, el objeto de una disputa internacional en un caso que podr¨ªa denominarse El Estado Espa?ol contra Odyssey Marine Exploration inc. la sentencia favorable e inapelable devolvi¨® el 30 de enero de 2012, tras un lustro de "contienda jur¨ªdica", la parte encontrada del cargamento que transportaba aquel nav¨ªo espa?ol hundido por los ca?ones de la marina brit¨¢nica en 1804 y encontrado, dos siglos despu¨¦s, por la empresa estadounidense especializada en la b¨²squeda de tesoros sumergidos.

Ejerciendo de anfitri¨®n, el reincorporado director del museo, Iv¨¢n Negueruela hizo de entusiasta gu¨ªa por los 330 metros cuadrados de la muestra, dedicados a conseguir los principales objetivos marcados: divulgar de manera accesible el legado recuperado y concienciar sobre el da?o que provoca la pirater¨ªa subacu¨¢tica.

La exposici¨®n es r¨¢pida de recorrer, amplia de espacio, ordenada, ilustrativa, visual, t¨¢ctil -e incluso olfativa- y probablemente abrir¨¢ la imaginaci¨®n del visitante pues le llega a introducir a uno en una apasionante historia naval con piratas profesionalizados de por medio. ?Pero qu¨¦ encontrar¨¢ el p¨²blico a partir de ma?ana en el ARQUA de Cartagena y distribuido por las cuatro unidades tem¨¢ticas dise?adas: Nuevas rutas y el comercio Interoce¨¢nico, Z¨®calo (construcci¨®n naval), Nuestra Se?ora de las Mercedes y Un legado a proteger?

Siguiendo el orden marcado, se comienza jugando a visualizar las rutas comerciales interoce¨¢nicas impulsadas por la Corona de Espa?a y Portugal a partir de finales del siglo XV, as¨ª como algunas piezas de porcelana y cer¨¢mica representativas de aquellos negocios. Se contin¨²a frente a algunas estanter¨ªas con varios instrumentos utilizados en el arte de la navegaci¨®n, una inmensa reproducci¨®n de la embarcaci¨®n en secci¨®n transversal -que incluso se observa desde el exterior del museo- y algunas cajas arom¨¢ticas que traen a nuestro sentido del olfato aquellas otrora apreciadas especias con las que se comerciaba al alza.

Seguramente lo m¨¢s llamativo se encuentra en las dos grandes vitrinas centrales contenedoras del tesoro propiamente entendido: unas 8.000 monedas estabilizadas (restauradas y tratadas) que aparentan cobre oxidado en vez de plata -otras 35.000 viajaran en una exposici¨®n itinerante prevista pr¨®ximamente- que representan casi el 90% de las exhibidas, ya que las restantes 500 tambi¨¦n limpiadas -que no pulidas- deslumbran junto a una muestra de las piezas de oro resplandeciente y a algunos objetos personales y documentaci¨®n de la tripulaci¨®n, que ayudaron a probar la propiedad del cargamento. Y en ¨²ltima etapa, a modo de ep¨ªlogo, un rinc¨®n audiovisual dedicado a la defensa del patrimonio, enfatizando la importancia del conocimiento, investigaci¨®n, conservaci¨®n, divulgaci¨®n y puesta en valor de la propia identidad a trav¨¦s de los bienes culturales subacu¨¢ticos.

En resumen, una m¨ªnima muestra de las 580.000 monedas recuperadas que junto a otras piezas de igual valor hist¨®rico -aunque no numism¨¢tico- ir¨¢ aumentando la colecci¨®n exhibida en tiempos venideros y en el espacio desde ahora dedicado a ello. A saber cu¨¢nto quedar¨¢ en el yacimiento submarino expoliado: al menos con este caso tan cinematogr¨¢fico se ha puesto atenci¨®n social e institucional sobre el mundo de la arqueolog¨ªa submarina fuera de las colecciones privadas.