La fotogenia del hormig¨®n

¡°El fot¨®grafo es probablemente el mejor cr¨ªtico de arquitectura que existe¡±. Esta frase del brit¨¢nico Eric de Mar¨¦ (maestro de maestros en lo que se refiere a fotograf¨ªa de edificios) cierra Fotograf¨ªa y arquitectura moderna en Espa?a (1925-1965), exposici¨®n de la Fundaci¨®n ICO que muestra el papel de los profesionales de la c¨¢mara en el conocimiento e interpretaci¨®n de la arquitectura espa?ola que naci¨® a partir de los a?os treinta.

Una relaci¨®n tan formal como emocional que va m¨¢s all¨¢ de nombres ya reconocidos como el de Kindel o Catal¨¤-Roca y que incluye el trabajo de Pando, Paco G¨®mez o Luis Llad¨®. ¡°La fotograf¨ªa de arquitectura, junto a su innegable vocaci¨®n documental, tiene una curiosa cualidad art¨ªstica: aisla lo que que captura y le da valor en s¨ª mismo¡±, explica I?aki Bergera, comisario de esta exposici¨®n que re¨²ne 250 im¨¢genes pertenecientes a archivos familiares de fot¨®grafos y arquitectos, colegios de arquitectura y colecciones privadas. ¡°Quer¨ªamos hacer un puzle, un mapa de mapas en el que se fuese pasando p¨¢gina, de forma cronol¨®gica, por la relaci¨®n este matrimonio¡±.

La contribuci¨®n de la fotograf¨ªa a la difusi¨®n y compresi¨®n de la arquitectura convierte a una pareja destinada a ser de mera conveniencia en apasionados amantes. Una relaci¨®n fuerte porque nace de la adversidad y de la imposibilidad. ¡°La arquitectura no es est¨¢tica, es din¨¢mica, se recorre. Un edificio es una secuencia y por eso se parece mucho m¨¢s al cine que a la fotograf¨ªa. La fotograf¨ªa no puede captar al edificio en toda su dimensi¨®n, por eso busca la luz y la atm¨®fera. Una buena fotograf¨ªa de arquitectura interpela al edificio¡±. Busca la esencia, en definitiva, de un objeto que se le resiste. ¡°Por ejemplo, las mejores fotos de Kindel¡±, asegura Bergera, ¡°son las de los poblados de colonizaci¨®n, de donde extrae todo el lirismo y po¨¦tica de una arquitectura pobre¡±, asegura Bergera.

De ah¨ª que la mejor fotograf¨ªa de construcciones tenga una extra?a vida, ajena pero vibrante, misteriosa pero aut¨¦ntica, que su soledad (los edificios siempre lo est¨¢n) parezca romperse gracias a esa ¨ªntima mirada del fot¨®grafo, en eterna lucha contra el espacio y la geometr¨ªa.