Smyslov, el rey arm¨®nico (III)
La aparente sencillez del juego de Smyslov era, en realidad, un indicio de su virtuosismo. Esta partida es un buen ejemplo
Blancas: V. Smyslov (URSS). Blancas: M. Euwe (Holanda).Apertura Espa?ola (C81). Campeonato del Mundo (19? ronda). Mosc¨², 3-5-1948.
¡°Yo har¨¦ 40 jugadas buenas. Si usted puede hacer lo mismo, la partida terminar¨¢ en tablas¡±.Pero llegar a la jugada 40 frente a Smyslov con una posici¨®n aceptable era muy dif¨ªcil. Su padre le ense?¨® a disfrutar de las posiciones sencillas, con pocas piezas, comprendiendo la funci¨®n y la esencia de cada una, y as¨ª capt¨® el sentido de la armon¨ªa entre ellas. Muy influido por los grandes astros anteriores a la Revoluci¨®n ¨CChigorin, Nimz¨®vich y Aliojin-, Smyslov tambi¨¦n bebi¨® de la escuela sovi¨¦tica. Y de la fusi¨®n de esos aprendizajes sali¨® un jugador fin¨ªsimo y brillante: 1 e4 e5 2 Cf3 Cc6 3 Ab5 a6 4 Aa4 Cf6 5 0¨C0 Cxe4 6 d4 b5 7 Ab3 d5 8 dxe5 Ae6 9 De2 Cc5 10 Td1 Cxb3 11 axb3 Dc8 (diagrama) (una posici¨®n y una partida que marcan la aportaci¨®n de la escuela sovi¨¦tica a la comprensi¨®n del ajedrez; Euwe est¨¢ satisfecho de la apertura porque ha logrado la pareja de alfiles; pero Smyslov, acertadamente, da m¨¢s importancia a los factores din¨¢micos: su tremenda ventaja de desarrollo es mucho m¨¢s importante que los alfiles negros) 12 c4!! dxc4 13 bxc4 Axc4 (con la posici¨®n abierta y el negro en el centro, Euwe corre serio peligro) 14 De4 Ce7?! (agranda la herida al retrasar a¨²n m¨¢s el desarrollo; se pod¨ªa aguantar con 14 ..Db7) 15 Ca3! c6 (si 15 ..Ae6? 16 Cxb5! Tb8 17 Cbd4, con ventaja decisiva) 16 Cxc4 bxc4 17 Dxc4 Db7 18 e6! f6 19 Td7 Db5 20 Dxb5 cxb5 21 Cd4 Tc8 22 Ae3 Cg6 23 Txa6 Ce5 24 Tb7 Ac5 25 Cf5 0¨C0 26 h3!, y Euwe abandon¨® tras calcular 26 ..g6 27 Ch6+ Rh8 28 Axc5 Txc5 29 Taa7, con ataque de mate. Correspondencia: ajedrez@elpais.es
Babelia
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