El ¡®momentazo¡¯ Banderas

Hola, Antonio, ?c¨®mo est¨¢s? ¡°Bien, bien, ummm¡­ estoy bien. Habiendo acabado un a?o de trabajo muy largo y preparando otro que promete ser igual de interesante. Del resto... bueno, Melanie y yo hemos llegado a un acuerdo de silencio y no voy a ser yo quien lo rompa¡±. Al tel¨¦fono desde Los ?ngeles Antonio Banderas, malague?o de 54 a?os, el actor no anglosaj¨®n m¨¢s famoso en Estados Unidos. Mi¨¦rcoles tarde. Est¨¢ a pocas horas de despegar hacia Londres para promocionar Los mercenarios 3,y de ah¨ª a Marbella, donde el martes 5 dar¨¢ una rueda de prensa con Sylvester Stallone y otros actores de la pel¨ªcula, como Wesley Snipes y Jason Statham, y donde el fin de semana asistir¨¢ a la gala Starlite, plataforma filantr¨®pica internacional en la que ¨¦l ejerce de anfitri¨®n. En esta entrevista exclusiva, y con absoluto desparpajo, desv¨ªa a c¨®rner el tema que le persigue desde inicios del mes de junio: su divorcio, tras 19 a?os de matrimonio, de Melanie Griffith. ¡°Ahora me toca rearmar un poco mi vida¡±, comenta.

Vida de este chico

DIEGO GAL?N

Desde el momento en que descubri¨® el teatro tuvo claro que ese era su mundo. El jovenc¨ªsimo Antonio Banderas se inscribi¨® en el grupo teatral malague?o ARA, donde destac¨® como buen actor, y ¨¦l, respirando hondo, agarr¨® mochila y se present¨® en Madrid con 19 a?os y pr¨¢cticamente sin un duro. Las pas¨® canutas porque, como contar¨ªa a?os despu¨¦s, "el hambre no entiende de deseos". Pero al muchacho nunca le falt¨® arrojo y un buen d¨ªa se present¨® ante la hija de Nuria Espert, Alicia Moreno, entonces administradora del Centro Dram¨¢tico Nacional, y le pregunt¨® con desparpajo qu¨¦ deb¨ªa hacer para ingresar en ¨¦l. Algo debi¨® de ver ella en aquel muchacho tan osado, puesto que fue llamado pronto a hacer una prueba. Sali¨® victorioso. A¨²n se recuerda el asombro que produjo en los espectadores de 1978 su trabajo en Eduardo II de Inglaterra,de Christopher Marlowe, dirigido por Llu¨ªs Pasqual.

En plena movida madrile?a el joven director Pedro Almod¨®var le propuso intervenir en la que iba a ser su segunda pel¨ªcula, Laberinto de pasiones (1982), y ese fue el hist¨®rico encuentro que tuvo Banderas con el cine. Su colaboraci¨®n con Almod¨®var se prolong¨® entonces durante cuatro pel¨ªculas m¨¢s (Matador, La ley del deseo, Mujeres al borde de un ataque de nervios y ?tame), pero entre tanto el actor trabaj¨® igualmente a las ¨®rdenes de Carlos Saura, Jos¨¦ Luis Garc¨ªa S¨¢nchez, Francesc Betriu, Fernando Colomo, Montxo Armend¨¢riz¡­ Todos le quer¨ªan, era un verdadero animal cinematogr¨¢fico, como le defini¨® Almod¨®var cuando a?os despu¨¦s, en 2008, le entreg¨® en San Sebasti¨¢n el premio Donostia. El director elogi¨® la intensidad de la mirada de Antonio Banderas, su instinto, su pasi¨®n, su humor salvaje y su ternura. Tambi¨¦n habl¨® de la belleza de Banderas, "uno de los culos m¨¢s votados por mujeres de todo el mundo".

Una de ellas fue Madonna, que, tras el ¨¦xito de las pel¨ªculas de Almod¨®var en Estados Unidos, reclam¨® al actor para que interviniera en Madonna: truth or dare (1991), y eso fue lo que anim¨® de nuevo al malague?o a dar otro salto, esta vez a Hollywood, ahora con 30 a?os y algo m¨¢s de dinero pero sin saber una palabra de ingl¨¦s. De nuevo, pues, el arrojo. Y el ¨¦xito. Porque tras Los reyes del mambo intervino, entre otras, en Philadelphia junto a Tom Hanks, o en Entrevista con el vampiro, junto a Tom Cruise y Brad Pitt, es decir, Banderas se situ¨® bien pronto en el cine estadounidense. Su valent¨ªa fue premiada con tan buena estrella que su filmograf¨ªa abarca actualmente los 90 t¨ªtulos, destacando entre ellos su gran ¨¦xito personal, La m¨¢scara del Zorro (1998), de Martin Campbell. Ha sido candidato a los Globos de Oro, a los Premios Tony y a los Premios Emmy, porque a pesar de su intensa carrera cinematogr¨¢fica no ha olvidado su amor por el teatro ni por el canto; en Broadway interpret¨® el musical Nine (2003), y en el cine Evita, en el papel del Ch¨¦, de nuevo junto a Madonna.

Adem¨¢s, se ha lanzado a la direcci¨®n cinematogr¨¢fica con dos notables pel¨ªculas muy distintas entre s¨ª, Crazy in Alamaba (1999) y El camino de los ingleses (2006), rodada en su M¨¢laga natal, ciudad de la que nunca se ha apartado. "No quiero dejar de ser lo que soy: espa?ol, andaluz y malague?o", dice, y con raz¨®n, puesto que ¡ªpor si fuera poco¡ª pertenece a la cofrad¨ªa malague?a de la Virgen de L¨¢grimas y Favores, a trav¨¦s de la cual realiza actividades sociales. A sus 54 a?os este Antonio Banderas sigue enterito y verdadero. Y lo que le queda¡­

Durante a?os, Banderas ha confesado su deseo de vivir en Nueva York, de disfrutar de su vida teatral ¡ªdurante un tiempo, mientras representaba el musical Nine, calm¨® ese ansia¡ª. ?Ha llegado el momento, ahora que su hija se va a la Universidad? ¡°Hollywood ha cambiado mucho en los a?os que llevo aqu¨ª. En realidad, ya no es un lugar, sino un sello. Y si Cameron Diaz rueda en Australia da igual. Hollywood es una marca que algunos llevamos ya pegada. As¨ª que no importa d¨®nde residas. Quiero disfrutar del mundo teatral de Nueva York, no solo como actor, porque no paran de ofrecerme cosas que me atraen, sino tambi¨¦n como espectador. Hoy mismo tengo una reuni¨®n con gente de la cadena de televisi¨®n NBC, porque una vez al a?o producen y retransmiten un musical, y por ahora les ha ido muy bien en audiencia, por ejemplo con Sonrisas y l¨¢grimas. Este a?o me ofrecieron ser el capit¨¢n Hook en Peter Pan, pero no pod¨ªa ser... Y ahora se me cruza la posibilidad de por fin retomar mi proyecto del musical sobre Zorba el griego. Son cosas as¨ª las que me motivan¡±.

En esta temporada finalizada, en la que Banderas no ha dejado de trabajar, su ni?a bonita es su ¨²ltimo paso como productor, Aut¨®mata, de Gabe Ib¨¢?ez, que en oto?o inicia su recorrido festivalero, ¡°ciencia ficci¨®n basada en un buen guion, hecha de la mejor manera posible en la medida de nuestras posibilidades¡±, pel¨ªcula en la que compartir¨¢ pantalla con su ya expareja Melanie Griffith. ¡°Est¨¢ hecha con mucho cari?o, sin subvenciones, con mi propio dinero, tirando de relaciones personales... Es una pel¨ªcula ins¨®lita para nuestra industria. No s¨¦ de su comercialidad pero s¨ª de su calidad. Con ella se demuestra una vez m¨¢s que el problema del cine espa?ol no es de talento, sino otro... del que ya hablaremos otro d¨ªa¡±.

El a?o movidito le ha llevado hasta, incluso, el cine infantil. Banderas encarna al ¨²nico personaje de carne y hueso, el pirata Alameda Jack, que aparece en Bob Esponja: un h¨¦roe fuera del agua, segundo largo de los personajes de dibujos animados de televisi¨®n. Pero tambi¨¦n ha hecho de minero chileno; ha paseado en tanque por Cannes... Para ese oto?o ya tiene cerrada una pel¨ªcula espa?ola sobre el hallazgo de las cuevas de Altamira, en la que encarnar¨¢ a Marcelino Sanz de Sautuola, el descubridor de la cueva... Banderas es un no parar, una fuerza de la naturaleza. ¡°No te creas, cada vez llevo peor los vuelos Los ?ngeles-Madrid. Son insoportables. La distancia es demasiado grande. Necesito dos semanas para recuperarme¡±.

Este arre¨®n laboral le parece al malague?o un ¡°resumen de su carrera¡±. ¡°Desde filmes independientes que produzco; al mundo de los ni?os... y claro, Los mercenarios 3¡±. Durante a?os, Banderas hizo bastante cine de acci¨®n: Desperado, Asesinos, El guerrero n¨²mero 13, la saga del Zorro, El mexicano... Antes o despu¨¦s ten¨ªa que estar en esa panoplia de h¨¦roes machacacr¨¢neos que recoge la serie Los mercenarios. ¡°Le dije a Sly [Sylvester Stallone, fundador, productor y protagonista de la saga] que yo no pod¨ªa competir contra sus pu?os, que me dejara hacer comedia. Y me respondi¨®: ¡®Lo que te d¨¦ la gana¡¯. Pr¨¢cticamente he improvisado el personaje, muy apoyado por Sly y por un reparto que parece el Paseo de la Fama de los h¨¦roes de acci¨®n¡±. En ese reparto de la pel¨ªcula, que se estrena en Espa?a el 14 de agosto, est¨¢n Stallone, Arnold Schwarzenegger, Dolph Lundgren, Jason Statham, Mel Gibson, Harrison Ford, Wesley Snipes, Jet Li... Y solo por citar algunos. ¡°Me lo pas¨¦ mejor de lo que pensaba en el rodaje. S¨ª, filmaba rodeado de explosiones, pero pude bromear ante la c¨¢mara y eso me hizo sentir c¨®modo¡±.

¡®Los mercenarios 3¡¯, para la que le reclut¨® Stallone, se estrena el 14 de agosto

?De lo mejor que le ha pasado este a?o ha sido pasear con todos estos monstruos en tanque por el paseo de La Croisette en Cannes? ¡°Pues s¨ª. Mira, el cine puede ir desde la diversi¨®n y la banalidad hasta lo m¨¢s rec¨®ndito de las complejidades del alma humana. Todo tiene cabida en un fotograma, y el festival de Cannes lo entiende. ?El paseo? Era como entrar en un museo de cera [risas]. Te gusten o no, esos hombres son historia de Hollywood, han sustentado econ¨®micamente la industria¡±.

Hace unos cuatro a?os, Banderas cambi¨® de representante. Sent¨ªa que se hab¨ªa atascado en su carrera y deseaba recuperar sus esencias como actor. A partir de ah¨ª film¨® con Steven Soderbergh (Indomable), Woody Allen (Conocer¨¢s al hombre de tus sue?os), Jean-Jacques Annaud (Oro negro), picote¨® cine indie americano (Ruby Sparks), volvi¨® con Almod¨®var (La piel que habito). Buscaba aventuras como Knight of cups, con el siempre enigm¨¢tico Terrence Malick, el cineasta que filma y filma para luego en el montaje modelar su obra. ¡°La rod¨¦ hace dos a?os. Fue algo incre¨ªblemente extra?o. Solo trabaj¨¦ un d¨ªa pero fue una jornada eterna. Me enviaron un mon¨®logo de nueve p¨¢ginas, donde hablaba del universo y de las u?as de los pies. Iba de todo, era surrealista. Me lo hizo interpretar con Christian Bale en diferentes espacios y me explic¨®: ¡®Vamos a saltar de un lado a otro. No te preocupes, ah, y no busques l¨®gica, porque no hay guion¡¯. Terrence me dijo que la premisa era pasear a un escritor en crisis [Bale] por diversos sitios, que el resto depend¨ªa de los actores. As¨ª que cuando dec¨ªa acci¨®n me envi¨® a los que ¨¦l llamaba torpedos, int¨¦rpretes que interrump¨ªan mi charla con Bale para obligarnos a improvisar. Era un juego cinematogr¨¢fico rar¨ªsimo nacido de un hombre absolutamente libre, algo muy extra?o en una ciudad como esta. Empuj¨® a mi personaje por recovecos y caminos que yo ni me pod¨ªa imaginar. Al final del d¨ªa me desped¨ª dici¨¦ndole: ¡®Espero verme en la pantalla¡¯, por esa fama de que muchos actores ruedan con ¨¦l pero pocos aparecen en sus montajes definitivos, y me solt¨®: ¡®Yeahhh¡¯. Hace dos meses me pidieron permiso para que mi nombre aparezca como el quinto en importancia en los carteles... Me dej¨® estupefacto¡±.

Tambi¨¦n aparece en Los 33, la recreaci¨®n de la odisea que vivieron los 33 mineros sepultados en Chile en 2010 a 720 metros bajo tierra durante 69 d¨ªas. ¡°Perm¨ªteme el chiste, pero fue un rodaje muy oscuro. Estuve dos meses y medio metido en una mina colombiana, interpretando a Mario Sep¨²lveda [uno de los l¨ªderes del grupo]. Muy duro f¨ªsicamente, uno acaba por entender el dolor de esos hombres que no bajan all¨ª por unas semanas sino toda su vida. Incluso nosotros sufrimos algunos mareos por el gas metano¡±.

En octubre dar¨¢ vida al descubridor de las pinturas de la cueva de Altamira

En octubre Banderas se mudar¨¢ a Espa?a a protagonizar la pel¨ªcula sobre las cuevas y las pinturas rupestres de la cueva de Altamira. ¡°Estoy muy ilusionado con este proyecto porque se rueda en Espa?a con producci¨®n espa?ola de Morena Films y porque lo dirige Hugh Hudson [Carros de fuego, Revoluci¨®n]. En realidad me gust¨® mucho la reflexi¨®n que esconde el guion sobre lo que ocurre en Espa?a a finales del siglo XIX, el enfrentamiento entre religi¨®n y ciencia, entre raz¨®n e ignorancia, y que afect¨® incluso al matrimonio de Sautuola, porque su esposa, Conchita, era casi fundamentalista¡±. No hay m¨¢s actores firmados para la pel¨ªcula. ¡°Me gusta mucho la apuesta por un tono muy ingl¨¦s, casi de James Ivory, apoyada en el verde paisaje c¨¢ntabro¡±. ?Y despu¨¦s? ¡°Puede que haya otra pel¨ªcula espa?ola en marzo, y estoy intentando reconducir la situaci¨®n de 33 d¨ªas, la pel¨ªcula sobre la creaci¨®n del Guernica de Picasso, en la que estamos involucrados Carlos Saura, el director de fotograf¨ªa Vittorio Storaro, Gwyneth Paltrow y yo. Espero resolver los problemas de producci¨®n. Pero yo voy a meter mano a eso fijo. Me apetece mucho hacer de Picasso, que Carlos haga otra gran pel¨ªcula¡±.

Eso s¨ª, en su futuro se aleja la posibilidad de dirigir. ¡°Es que tienes que dedicar mucho tiempo y aunque tengo cosas escritas es complicado. En fin, vamos a ver c¨®mo me reinserto en esta nueva temporada de mi vida¡±.