La Mafia protagoniza la Mostra

¡°?Berlusconi podr¨ªa haber formado parte de la Cosa Nostra?¡±, pregunta una voz en off a un exmafioso. ¡°Ten¨ªa el car¨¢cter¡±. Hace una pausa y luego suspira: ¡°Pero para formar parte de la Cosa Nostrase requiere seriedad¡±, responde un hombre con pasamonta?as negro, sentado en la terraza luminosa y llena de plantas verdes. Las palabras salen de la boca de Francesco Di Carlo, exjefe mafioso arrepentido y actual colaborador de la justicia italiana.

La secuencia forma parte de la pel¨ªcula La trattativa (La negociaci¨®n), que combina entrevistas documentales con la intervenci¨®n de actores en el rol de mafiosos, asesinos, esp¨ªas, generales y procuradores de la Rep¨²blica. Escrito, dirigido e interpretado por la actriz c¨®mica Sabina Guzzanti (directora de Viva Zapatero), la misma que la RAI, en tiempos de Berluconi, puso patitas en la calle por el contenido de sus programas sat¨ªricos. Ha sido proyectada en la Mostra en la secci¨®n oficial fuera de concurso y acogida ayer con una lluvia de aplausos.

Hoy ning¨²n italiano pone en duda que los atentados contra los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borselino no fueron solo obra de la Cosa Nostra. Hace 22 a?os, el 23 de mayo de 1992, los cuerpos de Falcone, su esposa, la tambi¨¦n magistrada Francesca Morvillo y tres escoltas saltaron por el aire. El juez Borselino, amigo de Falcone muri¨® en un coche bomba, 57 d¨ªas despu¨¦s.

Fueron capturados los autores materiales, Salvatore Tot¨® Riina ¡ªel padrino de los padrinos¡ª, y el responsable de apretar el detonador, Giovanni Brusca. Sin embargo, se sabe que la Cosa Nostra habla de t¨² a t¨² con la c¨²pula pol¨ªtica y que hubo una negociaci¨®n para suavizar la c¨¢rcel a los mafiosos. Si el gobierno no torc¨ªa el brazo, la mafia no habr¨ªa parado de poner bombas. Esa es la versi¨®n que se maneja de la negociaci¨®n. En La trattativa, la autora inicia y concluye plante¨¢ndose qu¨¦ es verdaderamente la negociaci¨®n: ¡°?Es lo que nos han dicho los mafiosos?¡±. ¡°?Es lo que nos han dicho los pol¨ªticos?¡±.

¡®La trattativa¡¯, de Sabina Guzzanti, se?ala directamente a Berlusconi

Guzzanti sostiene que Falcone y Borselino fueron asesinados porque hab¨ªan descubierto las conexiones de la mafia siciliana. ¡°Falcone era un genio, admirado hasta por los mafiosos. Por primera vez, hab¨ªa logrado poner en dificultad a la Cosa Nostra y estaba por arrestar a todos los c¨®mplices de la mafia: empresarios, la banca del Vaticano, servicios secretos. Hab¨ªa creado leyes eficaces para combatir la mafia, todav¨ªa vigentes y que la pol¨ªtica quisiera suavizar. Borselino era su amigo fraterno y sab¨ªa todo lo que Falcone hab¨ªa descubierto¡±, explica Guzzanti a EL PA?S.

Los atentados, sostiene Guzzanti, modificaron el rumbo de Italia. ¡°Despu¨¦s de 1993, la cultura dominante es la mafiosa. Tras la muerte de Falcone y Borselino nace un nuevo partido de derechas, mientras que el partido de izquierdas deja de hacer oposici¨®n¡±, comenta. Y a?ade: ¡°Hubo un acuerdo para obstruir la verdadera democracia, un consenso transversal para garantizar que la clase dirigente corrupta permaneciera en el poder con la misma modalidad de siempre¡±, afirma.

La pel¨ªcula habla tambi¨¦n de Berlusconi. Tres mafiosos comentan el nacimiento de un nuevo partido y de un empresario que est¨¢ construyendo una nueva ciudad, que llamar¨¢ Milano 2. Una alusi¨®n directa a Fuerza Italia, el partido de Berlusconi. Hace unos d¨ªas, el jefe mafioso Tot¨® Riina, preso en una c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad milanesa desde 1993, confes¨® que ¡°a nosotros Berlusconi nos daba 250 millones cada seis meses¡±. Lo dijo a su compa?ero Alberto Lorusso durante la hora de aire cotidiano, seg¨²n el diario La Repubblica.

La mafia es el tema de otras dos pel¨ªculas en la Mostra. Como Belluscone, una historia siciliana, de Franco Maresco: Belluscone, es as¨ª como se pronuncia en siciliano el apellido del cavaliere que durante los ¨²ltimos 20 a?os llev¨® el tim¨®n del pa¨ªs. Fuera de la competici¨®n oficial, el filme de Maresco documenta las fiestas en las plazas y los barrios populares de Palermo, donde la adhesi¨®n a Fuerza Italia es total. El amor de los sicilianos por Berlusconi es tan grande, que hasta un cantante joven ha compuesto una canci¨®n titulada Quisiera conocer a Berlusconi. Los j¨®venes que retrata Maresco solo quieren ser como Berlusconi.

Elegantes, refinados, cultos y atractivos; as¨ª son los nuevos mafiosos de la ¡¯Ndrangheta, la mafia calabr¨¦s, la m¨¢s poderosa y peligrosa de todas las mafias italianas. As¨ª son retratados en el filme Anime nere, de Francesco Munzi, a concurso por el Le¨®n de Oro, recibido con 13 minutos de aplausos. Este drama es un viaje al coraz¨®n de la ¡¯Ndrangheta, en un pueblo de Calabria. El director romano traslada al cine la novela de Gioacchino Criarco que narra la historia de tres hermanos que han crecido odiando al capo que mat¨® a su padre. Dos emigran a Mil¨¢n, el m¨¢s joven y carism¨¢tico (Marco Leonardi) es traficante de drogas y cuate de los narcos mexicanos. El mediano (Peppino Mazzotta) es un milan¨¦s adoptivo, universitario y burgu¨¦s. Construye edificios en la capital econ¨®mica de Italia con el dinero sucio del narco. El hermano mayor (Fabrizio Ferracane) decide quedarse en el pueblo cuidando las cabras y sembrando en el campo, intentando no meterse con la mafia. Pero su hijo Leo (Giuseppe Fumo) tiene sed de venganza y ganas de seguir a sus t¨ªos. En la realidad, Fumo vive en Calabria, donde campa el desempleo y la mala vida. ¡°No arriesguen sus vidas porque no hay trabajo. No se junten con la mafia. Busquen un futuro mejor¡±, pide Fumo a los j¨®venes calabreses.