El arte obsesivo de Yayoi Kusama llega a M¨¦xico

Yayoi Kusama se despierta todos los d¨ªas a las nueve de la ma?ana, se pone el delantal y empieza a pintar en su estudio de Tokio junto a un grupo de asistentes que son como su familia. Por la noche regresa al hospital psiqui¨¢trico en el que est¨¢ internada voluntariamente desde 1977. ¡°Ah¨ª s¨®lo est¨¢ su cama, su verdadero hogar es el estudio¡±, explica la curadora brit¨¢nica Frances Morris.

Yayoi Kusama. Obsesi¨®n infinita presenta en el Museo Tamayo Arte Contempor¨¢neo de la Ciudad de M¨¦xico una retrospectiva de 100 piezas realizadas entre 1949 y 2013 por la artista japonesa nacida en Matsumoto en 1929. La muestra estar¨¢ abierta al p¨²blico a partir del viernes 26 y hasta el 18 de enero de 2015. La exhibici¨®n estuvo antes por Argentina y Brasil, en donde recibi¨® m¨¢s de dos millones de visitas. Santiago de Chile ser¨¢ la ¨²ltima parada en marzo de 2015 antes de que las piezas vuelvan a Londres.

¡°Fue una revelaci¨®n saber que es tan conocida en Latinoam¨¦rica¡±, comenta Morris, quien junto con el franco-canadiense Philip Larratt-Smith, seleccionaron las piezas que viajan por el continente.

Los puntos en la obra de Kusama son una representaci¨®n de las alucinaciones que sufre desde peque?a; en su arte est¨¢ plasmado el mundo que le ven¨ªa a la cabeza, nublado por una red infinita de c¨ªrculos y polka dots. ¡°Puede que est¨¦ loca, pero es muy talentosa¡±, revela entre risas Frances Morris.

Kusama es considerada una revolucionaria en todos los sentidos. En su paso por Nueva York, entre 1957 y 1972, escribi¨® una carta al expresidente Richard Nixon ofreci¨¦ndole ¡°sexo vigoroso¡± a cambio de que diera por terminada la guerra en Vietnam. Seg¨²n Philip Larratt-Smith, en contraste con Andy Warhol, Kusama fue una activista mientras estuvo en EE UU.

Dentro de las 100 piezas que se exhiben est¨¢n las m¨¢s representativas de la artista japonesa de 85 a?os: Infinity Nets, Kusama¡¯s Self-Obliteration, v¨ªdeos con sus happenings en Nueva York como Flower Orgy, adem¨¢s de las instalaciones m¨¢s esperadas como el cuarto lleno de puntos fluorescentes I¡¯m here but nothing o el Infinity Mirror Room, un cuarto lleno de espejos y luces multicolor.

La obsesi¨®n mayor de Yayoi Kusama, cuenta Frances Morris, fue la de ser no solo conocida, sino mundialmente famosa. ¡°La gente famosa no lo es por suerte sino porque est¨¢n destinados a tener reconocimiento, quieren ser conocidos mundialmente. ?Por qu¨¦ ten¨ªa la obsesi¨®n de ser famosa desde los 15 a?os? No lo s¨¦, es parte de su ADN¡±.