elBulli, patrimonio nacional
El Gobierno catal¨¢n prepara una ley a medida para el ¨²ltimo proyecto de Ferran Adri¨¤ La normativa actual impedir¨ªa una ampliaci¨®n como la prevista dentro de un parque natural
Para algunos, Ferran Adri¨¤ es (o fue) el mejor chef del mundo. Otros prefirieron calificarlo de alquimista. E incluso hay quien se ha referido a ¨¦l como el Salvador Dal¨ª de la cocina. La vinculaci¨®n no es gratuita. Ambos encontraron parte de su genialidad en el Cap de Creus, el parque natural del Empord¨¤ donde los Pirineos y el Mediterr¨¢neo topan en una combinaci¨®n de acantilados y peque?as calas. Si Dal¨ª hall¨® la inspiraci¨®n en Port-Lligat (Cadaqu¨¦s), Adri¨¤ vio reconocida su creatividad en la cala Montjoi (Roses, Girona). Fue all¨ª donde elBulli, su restaurante, consigui¨® tres estrellas Michelin y lleg¨® a lo m¨¢s alto de la cocina internacional. Hasta que lo cerr¨® en 2011 con la ¨²nica intenci¨®n de reformularlo. En el mismo lugar.
Tras la ¨²ltima cena servida por su equipo, Adri¨¤ dijo: "El mensaje que sale de aqu¨ª es que elBulli contin¨²a". Durante los ¨²ltimos a?os, entre ofertas de una parte y otra del mundo para albergar la sede del nuevo complejo, el cocinero ha ido desarrollando el proyecto que quer¨ªa "para perpetuar el legado hist¨®rico material e inmaterial" del que fuera "referente internacional en el arte gastron¨®mico" y "perseverar en el esp¨ªritu innovador del Bulli mediante el an¨¢lisis, el estudio, la investigaci¨®n y la experimentaci¨®n en los aspectos cient¨ªficos y t¨¦cnicos relacionados con la alta cocina y la gastronom¨ªa".
Los entrecomillados no son de Adri¨¤ ni de su socio Juli Soler ni de elBulli Foundation. Proceden de un borrador del anteproyecto de ley elaborado por la Generalitat que ha levantado una polvareda en Catalu?a tras conseguir recabar 85.000 firmas en su contra a trav¨¦s de la plataforma Change.org. Los contestatarios critican la elaboraci¨®n de una ley a medida para, seg¨²n denuncian algunas entidades ecologistas y reconoce el propio Gobierno catal¨¢n, saltarse cerca de una decena de normas urban¨ªsticas, territoriales y ambientales que impiden ahora levantar un gran centro cultural y de investigaci¨®n de la gastronom¨ªa de vanguardia denominado elBulli1846 ¡ªel n¨²mero se refiere a las recetas que all¨ª se inventaron¡ª donde estaba el antiguo restaurante. El centro albergar¨¢ un laboratorio en el que 30 personas trabajar¨¢n durante ocho meses al a?o sobre la eficiencia de la creatividad de la cocina y una exposici¨®n permanente sobre la historia de la cocina de vanguardia.
Pero las quejas no llegan por el contenido del centro sino porque el proyecto prev¨¦ construir 3.466 metros cuadrados de obra nueva (actualmente hay 1.116), por lo que el proyecto incrementar¨¢ un 213% la superficie del antiguo restaurante. La ley impide que una obra existente en un espacio natural gane m¨¢s del 20% del espacio ya existente.
"No estamos en contra de elBulli1846, solo pedimos cambiar la ubicaci¨®n y dejarlo en Roses, que est¨¢ a las puertas del parque natural", sostiene Barbara Schmidt, portavoz de la plataforma IAEDEN-Salvem l'Empord¨¤. Depana, la otra organizaci¨®n que se ha opuesto frontalmente al proyecto, comparte la misma opini¨®n. Consideran que el traje a medida para el proyecto de Adri¨¤ supone abrir la misma puerta de excepciones a futuros proyectos y que el nuevo reclamo tur¨ªstico tendr¨¢ impacto sobre el parque natural por los miles de personas que visitar¨¢n cada a?o las instalaciones. Adem¨¢s, el parque ya tuvo una actuaci¨®n de calado hace poco tiempo, cuando se desmantel¨® la antigua villa de vacaciones ClubMed del mismo entorno. "Probablemente el proyecto sea una maravilla, pero la cuesti¨®n es que es completamente ilegal y que si se aprueba esa ley se est¨¢ violando el Estado de derecho, primando a los poderosos ante el resto de los ciudadanos", denuncia Gum¨¤, quien recuerda que a Dal¨ª nunca se le ocurri¨® crear su museo en Port-lligat, sino en Figueres.
El consejero de Territorio de la Generalitat, Santi Vila, ha tomado la batuta de las negociaciones con Ferran Adri¨¤ y es un ferviente defensor del virtual renacimiento del restaurante que, cuando reabra en 2016 (seg¨²n sus previsiones), solo ofrecer¨¢ cenas 20 d¨ªas al a?o y la mitad de las plazas ser¨¢n gratuitas, mediante sorteo. El resto ser¨¢n de pago y a un precio que permita recaudar fondos para mantener parte del recinto. Vila est¨¢ convencido de que "en un parque natural se tienen que poder hacer cosas, como sucede en Estados Unidos o Canad¨¢", y que el de elBulli1846 es un proyecto de los que "pueden atraer a personas que vivan en la Quinta Avenida de Nueva York". En resumen, que merece otra ley excepcional como la que se ha aprobado recientemente para que el complejo de casinos y hoteles BCN World se pueda levantar en Tarragona, junto al parque tem¨¢tico de PortAventura. En aquel caso, adem¨¢s de un planeamiento urban¨ªstico m¨¢s libre, BCN World se beneficiar¨¢ de una rebaja de impuestos para el sector del juego.
Entre esos dos proyectos hay una diferencia sustancial. Mientras que BCN World dar¨¢ dividendos al capital privado, el proyecto de Girona ser¨¢ eminentemente p¨²blico. Pese a que elBulli Foundation invertir¨¢ los nueve millones de euros que ser¨¢n necesarios para construir los nuevos espacios, Adri¨¤ ya ha anunciado que donar¨¢ ese patrimonio ¨ªntegramente a la Generalitat si la ley sale adelante y el proyecto puede ver la luz tal y como lo ha dise?ado el arquitecto Enric Ruiz-Geli. Por el momento ya ha traspasado la documentaci¨®n de elBulli y de sus 1.846 recetas.
En respuestas a trav¨¦s de correo electr¨®nico, Ferran Adri¨¤ deja la puerta abierta a que el tama?o de elBulli1846 sea ¨²nicamente el del 20% que le permite la actual normativa o el del 213% que plantea la nueva ley. La decisi¨®n la deja en manos de "la sociedad civil" y asegura: "Por nuestra parte, el consenso debe ser fundamental". De momento, solo la CUP ha planteado que presentar¨¢ una enmienda a la totalidad de la ley. Tambi¨¦n deja claras otras dos cosas: "Habr¨¢ un elBulli1846" y este estar¨¢ en la cala Montjoi, "donde se ha forjado la historia de elBullirestaurant".
Tanto los responsables de elBulli Foundation como la Generalitat defienden que el proyecto arquitect¨®nico se ha basado en una cuidada integraci¨®n paisaj¨ªstica en un entorno privilegiado, con muchas de las instalaciones soterradas. "Preservamos el camino de ronda, la biodiversidad del entorno, el camino de la riera, la arquitectura ser¨¢ de estilo mediterr¨¢neo, restauramos todos los muros de piedra seca", va enumerando el autor del proyecto, Enric Ruiz-Geli, hasta que llega un momento en el que, con cierta iron¨ªa, asume: "Pero s¨ª, incumplimos dos puntos de las normativas". El primero es el referente al l¨ªmite de construcci¨®n de obra nueva y el segundo, m¨¢s ir¨®nico todav¨ªa, lo explica: "Enterramos las l¨ªneas el¨¦ctricas y ponemos placas fotovoltaicas e instalaciones de microe¨®lica, que la normativa del parque no permite. Incumplimos, pero es necesario", remarca.
Jordi Sargatal, que fue director de un parque natural pr¨®ximo al de Cap de Creus (el de los Aiguamolls de l'Empord¨¤) y cofundador de IAEDEN, es uno de los conservacionistas que han roto una lanza a favor del proyecto. "Hablamos de una actuaci¨®n de media hect¨¢rea en un parque con 13.000 y, en todo caso, es bueno que la gente vaya a los parques naturales por otro motivo y sepa que se est¨¢n haciendo cosas para mantener su conservaci¨®n. Los parques naturales tienen que servir como escaparate", opina.
De momento, existe una pugna de puntos de vista. La recogida de firmas en contra contin¨²a, pese a que ya fueron entregadas 75.000 en el Parlamento, y los apoyos tambi¨¦n: empresarios, alcaldes e instituciones de Girona se manifestaron hace una semana en la cala Montjoi para reivindicar el nuevo elBulli como un revulsivo cultural y econ¨®mico para la zona.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.