El gran hospital de las pel¨ªculas
Se presenta en Madrid el Centro de Conservaci¨®n y Restauraci¨®n de la Filmoteca Espa?ola El edificio servir¨¢ para cuidar y guardar el patrimonio de la instituci¨®n
El tiempo es un enemigo cruel. Tarde o temprano, sus ataques acaban con todo. Sin embargo, hay un b¨²nker cerca de Madrid donde resisten miles de ancianas supervivientes. Algunas escaparon de una inundaci¨®n, otras del olvido. Muchas llegaron descompuestas u oxidadas y muestran las arrugas de la edad. Una hasta estuvo a punto de ser vendida como si nada en el mercado del Rastro. Ahora, sin embargo, est¨¢n a salvo, en el g¨¦lido fr¨ªo de un almac¨¦n y bajo el cuidado intensivo de un equipo que las conoce al dedillo. Hasta 300.000 son los envases de pel¨ªculas que ya protege la nueva sede del Centro de Conservaci¨®n y Restauraci¨®n de la Filmoteca Espa?ola, presentada hoy ante los medios. Y la otra mitad del patrimonio de la instituci¨®n se ir¨¢ hospitalizando a lo largo de los pr¨®ximos dos a?os.
¡°Catalogar, restaurar, preservar, difundir¡±. As¨ª un v¨ªdeo de presentaci¨®n dejaba claros esta ma?ana los objetivos de la Filmoteca. Para ello la instituci¨®n a?ade ahora a los cines Dor¨¦ su nueva sede, costada unos 23 millones ¨Ctres millones m¨¢s de lo presupuestado-. El centro cuenta con m¨¢s de 15.000 metros cuadrados que se reparten por encima y por debajo del suelo. ¡°Bajo la tierra, las pel¨ªculas; sobre la tierra, la investigaci¨®n¡±, resum¨ªa Alfonso del Amo, hasta hace poco jefe de investigaci¨®n y restauraci¨®n de la Filmoteca.
Restauraciones principales
Entre otras obras, la Filmoteca Espa?ola se ha encargado de rescatar y cuidar:
El misterio de la puerta del Sol (Francisco El¨ªas Riquelme, 1929), primera pel¨ªcula sonora del cine espa?ol.
El perro andaluz (Luis Bu?uel, 1929).
Curro Vargas (Jos¨¦ Buchs, 1923).
El verdugo (Luis Garc¨ªa Berlanga, 1963).
Se vende un tranv¨ªa (Juan Estelrich, 1959).
Campanadas a medianoche (Orson Welles, 1965).
Traducido, el proyecto del arquitecto V¨ªctor L¨®pez Cotelo deja a la luz del sol las oficinas para la inspecci¨®n, catalogaci¨®n, restauraci¨®n y digitalizaci¨®n del patrimonio, pero preserva en el s¨®tano su aut¨¦ntico coraz¨®n. All¨ª se alzan las estanter¨ªas repletas de miles de latas con las joyas de la historia f¨ªlmica sobre todo espa?ola, aunque no solo. Hay espacio para 1,2 millones de rollos, de los nost¨¢lgicos envases de Amanece que no es poco a los flamantes de X-men, d¨ªas del futuro pasado. Cada rollo atesora una historia. Como Viridiana, de Bu?uel, que la Filmoteca descubri¨® escondida en una lata con la etiqueta Felipe II, una pel¨ªcula ficticia que serv¨ªa de estratagema para esquivar la censura.
Las temperaturas en este espacio oscilan entre los 5 y los 10 grados, seg¨²n lo que precise el material (color, blanco y negro, etc.) y seg¨²n lo que establezca el climatizador personal que cada uno de los 36 almacenes tiene asignado. El clima g¨¦lido congela a los visitantes -de hecho, el centro est¨¢ destinado a los investigadores, no al p¨²blico- pero sirve para conservar las pel¨ªculas durante al menos 200 a?os, aunque el objetivo es alargar su esperanza de vida hasta el medio milenio.
¡°La salvaguardia de este patrimonio es algo fundamental. Somos un pa¨ªs visual, la mirada es quiz¨¢s lo que define m¨¢s al espa?ol¡±, afirm¨® el secretario de Estado de Cultura, Jos¨¦ Mar¨ªa Lassalle, en la presentaci¨®n. ¡°Desde los ochenta exist¨ªa la necesidad de unas instalaciones adecuadas para el patrimonio cinematogr¨¢fico espa?ol¡±, remat¨® Jos¨¦ Mar¨ªa Prado, director de la Filmoteca Espa?ola. Sin embargo, tras llegar a un acuerdo con la Comunidad de Madrid en los noventa para llevarse una parcela de terreno de la Ciudad de la Imagen, el proceso avanz¨® despacio.
Primero, naci¨® el archivo destinado a las pel¨ªculas inflamables. Para el centro principal hizo falta establecer las cuatro prioridades que explica Del Amo: ¡°Ventilaci¨®n, estabilidad, humedad, temperatura¡±. Con estos vectores se convoc¨® el concurso, adjudicado en 2009 a la empresa VIAS. Las obras arrancaron ese mismo a?o y finalizaron en 2013. El edificio empez¨® a funcionar pero su inauguraci¨®n se fue retrasando de mes en mes, hasta, por fin, esta ma?ana.
Joyas del patrimonio
La Filmoteca Espa?ola atesora las joyas de varias colecciones destacadas:
Archivo No-Do.
Guerra Civil Espa?ola.
Colecci¨®n Sagarm¨ªnaga.
Colecci¨®n Tramullas.
Colecci¨®n Escuela de Cine.
Cine Amateur.
Secci¨®n Femenina.
De ah¨ª que se hablara de presentaci¨®n m¨¢s que de inauguraci¨®n. De todos modos, el laboratorio del centro sigue por ejemplo sin funcionar, a la vez que la otra mitad del patrimonio de la Filmoteca ir¨¢ llegando con el goteo necesario para cuidarlo. Por lo dem¨¢s, los 20 empleados del edificio ya trabajan desde hace meses en su nueva casa. Sumando los colaboradores fijos y los becarios, se llega a una cuarentena de personas. Quiz¨¢s pocas para cuidar tama?o tesoro, un oficio que adem¨¢s ¡°solo se aprende aqu¨ª¡±, explica Mercedes de la Fuente, jefa del ?rea de Fondos F¨ªlmicos. As¨ª como poco es tambi¨¦n el dinero que gestiona el centro. ¡°Las subvenciones ahora son de unos 300.000 euros, mientras que en los momentos mejores llegaban a 800.000¡±, resume Prado. ¡°No hay dinero ni para terminar de montar las estanter¨ªas¡±, expresa de manera m¨¢s gr¨¢fica Ram¨®n Rubio, responsable de recuperaci¨®n de la Filmoteca.
En general, los ¡°fondos¡± son el principal problema de las filmotecas de toda Europa, seg¨²n Nicola Mazzanti, presidente de la Asociaci¨®n de las Cinetecas de la UE, presente en el acto. El otro asunto pendiente, para Mazzanti, es la necesidad de conservar los archivos en formato digital para que puedan ser disfrutados: ¡°Es como si fueras al Prado y no pudieras ver todas las pinturas¡±. As¨ª que la Filmoteca cuenta con un esc¨¢ner de momento en 2k, a la espera de los 4k, para digitalizar sus tesoros. Y derrotar al tiempo, de una vez por todas.
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