¡°La pol¨ªtica tiende a silenciar a testigos y cr¨ªticos¡±

?C¨®mo le deja lo que pasa tras los asesinatos de Par¨ªs? Los jefes de Estado hablan de solidaridad; estar¨ªa bien que lo dijeran todo el tiempo. Con frecuencia a los que los critican los llevan a los tribunales.

?Ve hipocres¨ªa en esa reacci¨®n? Es la tendencia natural de la pol¨ªtica: silenciar a los testigos y a los cr¨ªticos.

?Lo conserva juvenil el grupo ?ltima Experiencia, con el que act¨²a? A eso pertenezco, soy eso. Empec¨¦ en los 70. Con El Reverendo estuve ?treinta a?os!

Y se hizo mayor. La evoluci¨®n l¨®gica, que dec¨ªa Josep Piqu¨¦: comunista en la juventud, centroizquierda despu¨¦s, luego de centro y ahora del puto centro total: ?centro extremo! Pero soy de la opini¨®n contraria: hay que recordar qui¨¦n fue uno, el mejor uno que uno fue, y recuperarlo siempre que se pueda.

?C¨®mo era el mejor uno? Ese que iba por ah¨ª. Libre de ataduras, sin miedo al futuro, sin neurosis de renta. Soy de la generaci¨®n que ha vivido la mejor ¨¦poca de la humanidad.

?Tanto? Cualquier tiempo pasado fue una puta mierda; cuando murieron mis padres fue una mierda, y lo que vivieron mis abuelos una mierda al cuadrado, y as¨ª exponencialmente. Pero justo en esa evoluci¨®n que s¨ª tuvo la humanidad yo pill¨¦ la cima, me ha tocado todo lo mejor.

?Qu¨¦ fue lo mejor? Con 17 a?os me fui de hippy a ?msterdam y los hippies eran dioses, no perroflautas de mierda. Llegabas all¨ª, no ten¨ªas un duro y lo ¨²nico que pod¨ªas hacer, como poco, eran fechor¨ªas porque de algo ten¨ªas que comer. Era la herencia de Mayo del 68, del que ahora la gente se r¨ªe...

Tambi¨¦n se r¨ªen de la Transici¨®n. Se r¨ªen los j¨®venes. Fue una explosi¨®n. He vivido la apoteosis, incluso de la entrada en el primer mundo por la puerta grande.

?Y ahora? Nos est¨¢bamos distanciando del ?frica tenebrosa que ten¨ªamos al lado. Parece que ahora nos est¨¢n volviendo a empujar hacia abajo.

La enfermedad y la droga pasaron su factura. Usted se salv¨®. Todo por falta de informaci¨®n. Recuerdo la muerte de un amigo: luego supimos que fue SIDA. Las drogas: era inevitable en el hippismo. Dar el paso siguiente a drogas m¨¢s duras era una osad¨ªa, que luego ten¨ªa mala soluci¨®n. Y la gente casc¨®.

?Qu¨¦ no ve de usted la gente? La gente distingue el de los famosos como un mundo aparte. Del mismo modo que los de Podemos hacen un mundo aparte con la casta, la gente normal tambi¨¦n hace un mundo aparte con los famosos y piensa que es otro mundo. Yo tengo a mis hermanos, a mis amigos de siempre, los m¨²sicos... ese es mi entorno. No s¨®lo es normal, sino tirando a muy bajo con respecto a los ingresos, vivo en la realidad. Lo s¨¦, aunque no lo sufra.

Podemos: ?c¨®mo vive un hombre que procede de la Transici¨®n esta nueva realidad? Como un suceso inevitable, ?por suerte!, porque creo que se ha hecho dejaci¨®n de funciones. Se institucionaliz¨® la pol¨ªtica y la gente renunci¨® a ella. Se crey¨® que esto ya no ten¨ªa vuelta atr¨¢s. La pol¨ªtica desapareci¨® del espectro ciudadano. Y se han puesto en peligro los servicios sociales.

Cita a Ferlosio en su libro Mientras no cambien los dioses aqu¨ª no cambia nada. ?Estamos en ese momento? Nos lo tenemos que plantear. ?Qu¨¦ co?o es eso de los mercados? ?Desde cu¨¢ndo los estados no son soberanos? Que nos lo cuenten porque a lo mejor no tenemos que ir contra el Gobierno sino contra los mercados... Aqu¨ª es donde digo que han hecho dejaci¨®n. Si usted no manda, d¨ªgame a qui¨¦n debo votar, usted es s¨®lo un mensajero.