El triunfo de los veteranos brit¨¢nicos
Charlotte Rampling y Tom Courtenay, protagonistas de ¡¯45 years¡¯, se llevan los premios de interpretaci¨®n en la Berlinale
Aparecieron ante los flashes con sus estatuillas en la mano e hicieron ver que los dos Osos se besaban, jugando como si fueran cr¨ªos, aunque los dos juntos ya sumen 146 a?os. Charlotte Rampling y Tom Courtenay, int¨¦rpretes de raza con p¨¢gina propia en la historia del cine europeo, recibieron este s¨¢bado los dos premios de interpretaci¨®n de la Berlinale por 45 years, filme brit¨¢nico sobre un maduro matrimonio enfrentado a una crisis tard¨ªa, a pocos d¨ªas de la celebraci¨®n de su 45? aniversario de boda, donde tienen pensado escenificar el triunfo de ese amor tan duradero. En la pel¨ªcula, una de las m¨¢s aplaudidas de la competici¨®n berlinesa, el conflicto est¨¢ provocado por la aparici¨®n del cad¨¢ver de la primera novia del marido, desaparecida tras un accidente en los Alpes suizos cinco d¨¦cadas atr¨¢s. El inesperado descubrimiento de su cuerpo har¨¢ que la esposa empiece a poner en duda si el amor de su marido ha sido sincero, o m¨¢s bien una vulgar puesta en escena.
Minutos despu¨¦s de alzarse con el premio, los dos aparecieron euf¨®ricos, exhibiendo buena sinton¨ªa y sobreactuando una supuesta pelea con algo de teatrillo, como si todav¨ªa estuvieran metidos en sus papeles. Rampling luci¨® un indudable orgullo escondido bajo su rictus tragic¨®mico: a los 69 a?os, este es solo el segundo premio de interpretaci¨®n que recibe en su carrera. ¡°Me ha hecho ilusi¨®n, porque tengo pocos premios. Hasta ahora solo ten¨ªa uno [el premio a la mejor actriz europea de 2003, por Swimming pool]¡±, reconoci¨® Rampling. ¡°Los premios son valiosos para m¨ª. Siempre he intentado tomar el camino m¨¢s dif¨ªcil, el del cine de autor por encima del comercial, as¨ª que no es necesariamente el que te lleva a ganar premios. Por eso estoy tan contenta¡±. La actriz confi¨® en que este doble premio interpretativo lleve al p¨²blico a los cines, antes de ser interrumpida por Courtenay, el m¨ªtico protagonista de La soledad del corredor de fondo y una de las cabezas visibles del free cinema junto con Albert Finney y Alan Bates. ¡°?No me deja hablar!¡±, protest¨® ella ante la prensa. ¡°?Es que habla todo el d¨ªa, a todas horas!¡±, respondi¨® ¨¦l.
Rampling dud¨® hasta el ¨²ltimo segundo: cre¨ªa que no iban a darle el premio, pese a que el festival la hubiera llamado para que regresara a Berl¨ªn. Su compa?ero de reparto hab¨ªa sido el primero en subir al escenario y la espera se hizo tensa para la actriz. ¡°Cre¨ªa que no me lo dar¨ªan porque casi nunca se dan los dos premios a los actores de una misma pel¨ªcula¡±, reconoci¨®. Preguntada sobre por qu¨¦ ha gustado esta historia de personajes maduros en un mundo tan obsesionado por la juventud eterna, Rampling discrep¨® respecto a los estereotipos. ¡°Esta pel¨ªcula la ha dirigido un se?or de 42 a?os a quien el asunto le interesaba. E, igual que a ¨¦l, supongo que interesar¨¢ a otras personas. Cuando un tema resulta interesante, desaparecen todos los l¨ªmites. Y yo creo que existen buenos temas por todas partes. No creo que esta historia tenga nada de particular¡±, espet¨® la actriz, redescubierta por j¨®venes directores franceses como Fran?ois Ozon (Bajo la arena) o Laurent Cantet (Hacia el sur), despu¨¦s de a?os de baja actividad en el cine tras su hora de gloria en los setenta.
Courtenay, quien cumplir¨¢ 78 a?os a finales de este mes, tuvo palabras amables para el director de la pel¨ªcula, el brit¨¢nico Andrew Haigh, quien son¨® para el Oso de Oro hasta el ¨²ltimo momento. ¡°Se ha quedado sin su Oso, pero es como si lo tuviera a trav¨¦s de nosotros¡±, afirm¨®. Agarrada a su galard¨®n, Rampling brome¨® que no pensaba ced¨¦rselo a Haigh, antiguo montador formado por Ridley Scott, que empez¨® a hacer ruido con Weekend, pel¨ªcula que inspeccionaba el inicio de un amor entre dos homosexuales, antes de convertirse en uno de los impulsores de la serie Looking, de la cadena HBO, ambientada en la escena gay en San Francisco. Su nueva pel¨ªcula inicia en Berl¨ªn una andadura internacional que, en vista de la excelente acogida y el impacto emocional que ha tenido en este festival, se anuncia larga y fruct¨ªfera para sus dos protagonistas.
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Pablo Larra¨ªn: ¡°El cine puede ser peligroso¡±
Tras recibir el Gran Premio del Jurado por El club, el director chileno Pablo Larra¨ªn lament¨® este s¨¢bado que el ganador del Oso de Oro, el cineasta iran¨ª Jafar Panahi, no pudiera recoger el premio a la mejor pel¨ªcula en Berl¨ªn. El director disidente se encontraba retenido en Ir¨¢n a causa de la prohibici¨®n de viajar fuera del pa¨ªs que le fue impuesta en 2009. "Si no puede estar aqu¨ª, es solo porque las autoridades de su pa¨ªs creen que es un tipo peligroso cuando, en el fondo, todo lo que hace es rodar pel¨ªculas", afirm¨® Larra¨ªn. "Sus filmes son afilados y pueden llegar a lugares suficientemente profundos para que las autoridades consideren que tiene peligro". Para el director chileno, que Panahi tenga la prohibici¨®n de rodar "demuestra que, para los poderosos, el cine puede ser algo peligroso".
Preguntado sobre el espectacular ¨¦xito de las cintas latinoamericanas en esta edici¨®n de la Berlinale, donde las tres pel¨ªculas que compet¨ªan en la secci¨®n oficial se marcharon con premio y tres m¨¢s se han llevado premios en las secciones paralelas, Larra¨ªn respondi¨® con contundencia. ¡°Ninguna de esas pel¨ªculas estaban en Berl¨ªn por ser latinoamericanas, sino por ser buenas pel¨ªculas. No es como si el festival quisiera ayudar a esos pobres tipos latinoamericanos. Ning¨²n programador nos mira con esos ojos. Todo lo que buscan es buen cine¡±, afirm¨® Larra¨ªn.
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