La sombra de Franco es alargada
Una eclosi¨®n de t¨ªtulos sobre el dictador analizan la evoluci¨®n de su imagen en la propaganda, los intentos de atentar contra ¨¦l y sus apoyos en los servicios secretos
A punto de cumplirse en noviembre de este a?o el 40? aniversario de la muerte del general Franco, la previsible avalancha de obras sobre su persona y su r¨¦gimen ya cuenta con bastantes aportaciones dignas de inter¨¦s. Dejando a un lado la voluminosa biograf¨ªa firmada por Stanley G. Payne y Jes¨²s Palacios (Franco; Madrid, Espasa, 2014) y el repaso a su dictadura dirigido por Juli¨¢n Casanova (40 a?os con Franco; Barcelona, Cr¨ªtica, 2015), hay tres obras reci¨¦n aparecidas que merecen atenci¨®n especial por su tem¨¢tica.
En primer lugar cabe destacar el libro de Antonio Cazorla, historiador espa?ol afincado en Canad¨¢, que no quiere ser una nueva biograf¨ªa de Franco al uso. Es m¨¢s bien un estudio de ¡°la evoluci¨®n de la imagen p¨²blica del Caudillo, tal y como la percibieron los espa?oles de su tiempo¡±. El reto planteado le permite hacer un seguimiento de la figura mitificada de Franco a trav¨¦s de la historiograf¨ªa oficial del r¨¦gimen en Espa?a y de sus mecanismos de propaganda hagiogr¨¢fica en el interior (prensa, radio y No-Do, principalmente). Tambi¨¦n le obliga a seguir la imagen del Caudillo en el exterior, donde nunca dej¨® de ser, mayoritariamente, un tirano autoritario y reaccionario con un detestable historial proalem¨¢n en la II Guerra Mundial.
El recorrido de Cazorla sobre ¡°qu¨¦ se dijo de Franco, cu¨¢ndo y d¨®nde¡± se articula en cinco cap¨ªtulos principales que se corresponden con hitos biogr¨¢ficos del Caudillo construidos por sus hagi¨®grafos sobre bases parcialmente veraces, pero sometidas a la pertinente glorificaci¨®n mitificadora: 1) La etapa en la que se proyectaba como un ¡°h¨¦roe militar¡± casi predestinado antes de la guerra civil de 1936. 2) La fase en la que se convirti¨® en ¡°salvador de Espa?a¡± durante la contienda de 1936-1939 en la que ¡°venci¨® al bolchevismo en el campo de batalla¡±. 3) El tiempo del ¡°hombre de paz¡± que mantuvo al pa¨ªs fuera de la guerra mundial de 1939-1945 sin sucumbir a las tentaciones beligerantes y que sufri¨® un leve ostracismo internacional entre 1945 y 1947. 4) El punto cenital del ¡°gobernante prudente¡± que sobrevive en las aguas turbulentas de la Guerra Fr¨ªa hasta 1961 como omnisciente ¡°centinela de Occidente¡±. 5) Los a?os del dictador ¡°modernizador¡± que promueve y contempla los beneficios del progreso econ¨®mico y social de los sesenta y primeros setenta hasta envejecer y morir en plena crisis de 1975.
En contra de la caricatura, Franco demostr¨® inteligencia pol¨ªtica e indudable capacidad de gesti¨®n gubernativa
Cazorla desmonta esos mitos de manera convincente y, a tono con lo que ya hab¨ªan hecho otros trabajos biogr¨¢ficos m¨¢s can¨®nicos (como el cl¨¢sico de Paul Preston), recuerda a sus lectores que ¡°Franco no fue un individuo con especiales dotes intelectuales o espirituales¡±. Pero sin suscribir por eso el juicio consolador avanzado por una oposici¨®n antifranquista tan masacrada como desmoralizada, que le consideraba un mediocre tirano que s¨®lo lleg¨® al poder por la exclusiva ayuda del Eje germano-italiano y que s¨®lo sobrevivi¨® en el mismo por una combinaci¨®n de buena suerte exterior y represi¨®n inclemente interior. No parece tan f¨¢cil la explicaci¨®n porque Franco demostr¨® a lo largo de los a?os una verdadera inteligencia pol¨ªtica e indudable capacidad de gesti¨®n gubernativa. Y esas ¡°virtudes¡± tambi¨¦n estuvieron en la base de sus ¨¦xitos como dictador longevo y con ¡°m¨¢s poder que ning¨²n otro gobernante en la historia moderna del pa¨ªs¡±.
La segunda contribuci¨®n al estudio del franquismo tiene como autor al periodista barcelon¨¦s Antoni Batista y se presenta bajo el t¨ªtulo de Matar a Franco. El subt¨ªtulo apunta a que se trata de un estudio y an¨¢lisis de ¡°los atentados contra el dictador¡±, un m¨ªnimo de 12 tentativas, todas fracasadas, entre 1936 y 1964, si seguimos a investigaciones previas (como la de Eliseo Bayo, publicada ya en el a?o 1976).
Batista se centra particularmente en la intentona protagonizada por Jordi Conill Vall, el Camarada Bonet, que trat¨® de hacer explotar una bomba al paso del coche de Franco en las inmediaciones del palacio de Ayete, en San Sebasti¨¢n, en agosto de 1962, durante las tradicionales vacaciones veraniegas del Caudillo en la costa vasca. Pero el resultado del esfuerzo, sin desmerecer su calidad literaria, es bastante ambiguo desde una perspectiva historiogr¨¢fica. Ante todo porque el autor, como bien dice en su pr¨®logo, ha querido navegar ¡°con un g¨¦nero entre la historia novelada y la novela hist¨®rica¡±. Y nada se compadece menos con la historia y el relato hist¨®rico que esa hibridaci¨®n que renuncia a buscar la verdad a favor de la verosimilitud, y que mezcla lo real y lo inventado sin criterio de discriminaci¨®n evidente y objetivado.
Nada se compadece menos con la historia que esa hibridaci¨®n entre lo real y lo inventado que renuncia a buscar la verdad
La tercera aportaci¨®n a esta eclosi¨®n ¡°franquista¡± es obra del periodista brit¨¢nico Peter Day y lleva el intrigante t¨ªtulo y subt¨ªtulo de Los amigos de Franco. Los servicios secretos brit¨¢nicos y el triunfo del franquismo. En realidad, el autor hace un repaso sumario a la actitud de los Gobiernos brit¨¢nicos (tanto su aparato diplom¨¢tico como sus servicios de inteligencia) hacia Franco desde el inicio de la guerra civil de 1936 y hasta el comienzo de la Guerra Fr¨ªa, pasando por el sexenio de la II Guerra Mundial. Un repaso que no deja de corroborar algo ya bien sabido desde hace tiempo: que el Gobierno conservador brit¨¢nico practic¨® una ¡°neutralidad ben¨¦vola¡± hacia el bando franquista durante la contienda civil, y que, posteriormente, se content¨® con mantenerlo al margen de la guerra mundial como mal menor y soportable pese a sus veleidades proalemanas y proitalianas, sobre todo porque no encontr¨® mejor alternativa sin riesgo de nueva guerra civil.
Las virtudes informativas del libro de Day no bastan para eclipsar algunas carencias notorias en el mismo. Por un lado, la apoyatura bibliogr¨¢fica, hemerogr¨¢fica y archiv¨ªstica es b¨¢sica y exclusivamente angl¨®fona, sin apenas uso y recurso de los abundantes materiales en espa?ol disponibles desde hace tiempo. Algo que limita, y mucho, el alcance de sus interpretaciones y valoraciones (sobre todo esa recurrente hipertrofia de la influencia brit¨¢nica en la evoluci¨®n pol¨ªtica del franquismo). Por otro lado, el formato del trabajo est¨¢, como en el caso de Antoni Batista, a medio camino entre la ficci¨®n novelada y la disciplina historiogr¨¢fica, con un peligroso equilibrio que no acierta a ser cre¨ªble en no pocas ocasiones.
En todo caso, el trabajo de Day deja perlas informativas interesantes. Como esta valoraci¨®n final del papel de la corrupci¨®n sociopol¨ªtica en el franquismo emitida por uno de los jefes del servicio secreto brit¨¢nico en Espa?a, el capit¨¢n Alan Hillgarth. Es tan actual en tantas cosas que merece la pena que sirva de colof¨®n a este texto:
¡°Franco ha establecido, o permitido que se estableciera, un n¨²mero inmenso de intereses creados en su r¨¦gimen, por medio de empleos y privilegios, y casi todos los intereses son activa y continuamente corruptos. Y el efecto de lo que ha permitido, sumado a las circunstancias de la ¨¦poca, es que en Espa?a casi todo el mundo, desde lo m¨¢s alto hasta lo m¨¢s bajo, vive de la corrupci¨®n tanto si le gusta como si no¡±.
Franco. Biograf¨ªa del mito. Antonio Cazorla. Alianza Editorial. Madrid, 2015. 392 p¨¢ginas. 22 euros (digital, 15,98).
Matar a Franco. Antoni Batista. Debate. Madrid, 2015. 240 p¨¢ginas. 21,90 euros.
Los amigos de Franco. Los servicios secretos brit¨¢nicos y el triunfo del franquismo. Peter Day. Tusquets. Barcelona, 2015. 280 p¨¢ginas. 20 euros.
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