Espartaco: ¡®Fue la retirada so?ada¡¯
Tras su despedida definitiva, el torero continuar¨¢ como ganadero y participar¨¢ en festivales
"Ha sido la retirada so?ada, el triunfo del toreo". As¨ª se expresaba el diestro Juan Antonio Ruiz Espartaco horas despu¨¦s de que dijera adi¨®s a los ruedos el pasado domingo en la plaza de la Real Maestranza de Sevilla en una tarde gloriosa, en la que recibi¨® el afecto y el reconocimiento de la afici¨®n, cort¨® dos orejas y fue sacado a hombros por la Puerta del Pr¨ªncipe por sus propios compa?eros.
"Ahora mismo puedo asegurar que soy un hombre plenamente feliz. Despu¨¦s de todas las preocupaciones y los miedos que he pasado antes de la corrida, volver a sentir Sevilla como la sent¨ª, y el cari?o y el respeto con el que me trataron mis compa?eros, fue algo tremendamente emocionante", ha reconocido el torero en unas declaraciones a Efe.
Casi catorce a?os despu¨¦s de su ¨²ltima tarde, el 29 de septiembre de 2001, tambi¨¦n en Sevilla, Espartaco volvi¨® a asumir el reto de vestirse de luces para dar la alternativa a su paisano y protegido Borja Jim¨¦nez, y para sacarse la espina de aquella primera despedida, que result¨® desangelada y triste, e impropia de su exitosa carrera.
"Jam¨¢s pude imaginar que la tarde de mi adi¨®s iba a salir as¨ª, y no por las orejas que cort¨¦, pues a estas alturas de mi vida el reto y las sensaciones eran m¨¢s personales que profesionales, sino porque mi objetivo era despedirme de 'mi plaza', con mi padre al lado y con mi hijo peque?o que nunca me hab¨ªa visto torear", coment¨® el torero.
"Y, gracias a Dios, sali¨® todo redondo; ni en mis mejores sue?os hubiera imaginado algo as¨ª, pues era consciente que volver a torear en Sevilla a mi edad y despu¨¦s de tanto tiempo apartado de los ruedos era una locura que, por fortuna, sali¨® bien. Fue algo ¨²nico, un debut y una retirada al mismo tiempo; las emociones no han podido ser m¨¢s fuertes", a?adi¨®.
Con la plaza hasta la bandera, Espartaco cort¨® una oreja de cada toro de su lote, de la ganader¨ªa de Juan Pedro Domecq, en dos faenas en las que dio lo mejor de s¨ª mismo y consigui¨® encandilar a los tendidos.
"Esa era una de mis grandes preocupaciones, saber si era capaz de sacar todo eso que llevo dentro y que, por cuestiones de edad y de facultades, llegas a dudar si puedes lograrlo. Pero cuando al final se consiguen vencer los miedos, las dudas y a la angustia interior, y vuelves a sentirte t¨² despu¨¦s de 14 a?os, da una alegr¨ªa tremenda y se disfruta much¨ªsimo m¨¢s delante del toro".
Los momentos m¨¢s emocionantes de la tarde fueron, primero, cuando su padre -el verdadero gestor de su carrera- y su hijo peque?o, Juan, de 13 a?os, procedieron al corte simb¨®lico del a?adido que significaba su retirada definitiva, y, despu¨¦s, cuando numerosos toreros de ayer y hoy se lanzaron al ruedo al finalizar la corrida para auparlo a hombros y sacarlo por sexta y ¨²ltima vez en su carrera por la Puerta del Pr¨ªncipe de la Maestranza.
"Imag¨ªnate la cantidad de emociones que pude sentir. Ver a mi padre, que lo ha sido todo para m¨ª en mi carrera, y a mi hijo, al que jur¨¦ que iba a verme un d¨ªa torear en Sevilla, cort¨¢ndome la coleta... me entr¨® un escalofr¨ªo de esos que a¨²n perduran y perdurar¨¢n mientras viva", dijo Espartaco.
"Y cruzar otra vez el umbral de la Puerta del Pr¨ªncipe a hombros de tantos toreros, y ver a tanta gente esperando mi salida, gritando y vitoreando mi nombre hasta que me dejaron en el hotel fue m¨¢s que un sue?o, el momento m¨¢s grande en 36 a?os como matador de toros", a?adi¨®.
A pesar del triunfo cosechado, Espartaco confirm¨® que la del domingo fue su ¨²ltima corrida en activo, y que a partir de ahora seguir¨¢ disfrutando del toreo "de otra manera".
"No puedo seguir porque es imposible. Esta profesi¨®n es muy sacrificada y hay que estar muy preparado, y yo ya no estoy para estos trotes. Ahora le toca a otros tirar del carro, como a Borja o a su hermano Javier, dos chicos a los que conozco de peque?os, a los que quiero mucho, y a los que apoyar¨¦ siempre que me necesiten para alcanzar el sue?o de ser figuras del toreo", se?al¨®.
Por eso, a partir de ahora, Espartaco desea vivir "una vida normal", la misma de los ¨²ltimos 14 a?os. "Jam¨¢s podr¨¦ desvincularme del toreo, pues tengo mi ganader¨ªa y seguro que torear¨¦ alg¨²n tentadero o alg¨²n festival, pero ahora lo que quiero es vivir mi vida con mi familia y mis amigos, sacar a mis hijos adelante y cuidar todo lo que Dios me ha dado", concluy¨® el torero sevillano de Espartinas.
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