¡®El Brujo¡¯ presta su alquimia a Santa Teresa
Rafael ?lvarez teatraliza la m¨ªstica en un nuevo espect¨¢culo
La p¨®cima que Rafael ?lvarez tiene preparada para la santa m¨ªstica de ?vila en su centenario lleva un revuelto de versos fundidos en la madera del escenario, unos cuantos rayos de helio ¨Cel espect¨¢culo se titula ¡®Teresa o el sol por dentro¡¯ y se estren¨® ayer en el Festival de Teatro Cl¨¢sico de C¨¢ceres y luego se podr¨¢ ver en el de Almagro, entre otros lugares-, racimos de ense?anzas cogidas al vuelo en sus largos periodos de meditaci¨®n yogui, una detallada lectura de Cop¨¦rnico, ¡°el Stephen Hawking de la ¨¦poca¡±, comenta, y una apasionada apuesta por la regeneraci¨®n.
Despu¨¦s de haber hecho suyos en los teatros y algunas plazas al Lazarillo, el Quijote, la Odisea, el Evangelio seg¨²n San Juan y haber pose¨ªdo en escena a varias de las mujeres de Shakespeare, entre otras libres adaptaciones, ¡®El Brujo¡¯, prepara la reencarnaci¨®n para el siglo XXI de la leyenda m¨ªstica. ?C¨®mo? ¡°Partiendo del descubrimiento de la divinidad como necesidad no s¨®lo mental y espiritual, sino biol¨®gica¡±.
El m¨ªstico es pr¨¢ctico, proclama ?lvarez. ¡°Lleva la experiencia de su encuentro con Dios como un equilibrio en la vida, con una felicidad de partida para experimentar dicha conexi¨®n con alegr¨ªa, gozo, fraternidad, tolerancia, conciencia¡ Eso es el fruto de una vivencia profunda en sentido trascendental: amar no por obligaci¨®n, sino porque s¨ª, porque as¨ª se siente¡±.
De aquel impulso encerrado, incomprendido, muy en los m¨¢rgenes de la locura, lleg¨® una amplia regeneraci¨®n: la del Carmelo. Era dif¨ªcil. ¡°Debi¨® enfrentarse a una visi¨®n convencional de la religi¨®n, a la pol¨ªtica de su tiempo, las costumbres de ?vila en el siglo XVI relativas a las mujeres y a las monjas, al dogmatismo, la inquisici¨®n, la estrechez de miras, el miedo, la superstici¨®n, lo tenebrosa, aun as¨ª, ella florece como una fuerza reveladora¡±.
Del escenario a las series de televisi¨®n
Rafael ?lvarez estren¨® ayer en el Gran Teatro de C¨¢ceres Teresa o el sol por dentro, un mon¨®logo teatralizado, que junto a los de Charo L¨®pez y Santi Senso protagonizan parte de la programaci¨®n del 26? Festival de Teatro Cl¨¢sico de la ciudad extreme?a.
El actor, amante de los cl¨¢sicos, se ha convertido en fan de la serie Juego de tronos gracias a sus hijos: "Me fascina por los di¨¢logos. Cuando la veo observo que los guionistas han mamao a Shakespeare. Cada conversaci¨®n lleva almendra por dentro".
No le ha hecho falta mucho esfuerzo para establecer un nexo. El que sirve a El Brujo, exorcista de pasados tra¨ªdos al presente con una radical y contagiosa comicidad, para adaptarlo todo a los tiempos que vivimos. ¡°En aquella ¨¦poca, la gente cre¨ªa que la tierra era el centro de cada cuerpo celeste. Cuando Cop¨¦rnico asoma y dice que es el sol, ?cu¨¢l es el lugar del hombre en el universo? Y mucho m¨¢s grave, ?cu¨¢l es el lugar del Papa? Este quedaba expulsado al extrarradio, a la periferia del cosmos¡±.
Los m¨ªsticos irrumpen con esa luz: ¡°Como dec¨ªa ella, ¡®me nace un sol por dentro¡¯. As¨ª es como recoloca las cosas y le resuelve el problema a Roma. La jerarqu¨ªa no se entera entonces, pero ellos le dan un empuje a la situaci¨®n porque representan un arma ante el protestantismo¡±.
Lo vio hasta Felipe II. ¡°?l dijo hay que hab¨ªa que apoyarlos. El catolicismo estaba tomado por una pandilla de golfos que montaban org¨ªas con monjas, robaban¡ Los asesinos ingresaban en los conventos, as¨ª que la reforma del Carmelo aport¨® un prestigio a la orden. Muy actual, va por ah¨ª. Regeneraci¨®n, cambio y regeneraci¨®n¡±. Podemos encontrar nuestros evidentes paralelismos. ¡°Se ha producido una conjunci¨®n que convoca toda la basura y necesitamos una urgente exudaci¨®n de la misma¡±.
Ah¨ª se plantar¨¢ ?lvarez, s¨®lo, como casi siempre, a aplicar terapias colectivas con las que saber re¨ªrnos de nosotros mismos. Hurgar¨¢ en significados que se nos escapan, nos plantar¨¢ delante una Teresa de nuestro tiempo, electrizada con sus rizos de sabio obsesionado con los significados y los significantes, con la esencia de las palabras y sus ra¨ªces bien vengan del griego, el lat¨ªn, el ¨¢rabe o el arameo.
Este catedr¨¢tico de la escena, gur¨² del humor, sacerdote de las cercanas conjunciones que eternamente nos brindan los cl¨¢sicos, echa mano de la ciencia, la ling¨¹¨ªstica y la observaci¨®n natural de las cosas para abrir a la especie en canal. Esta vez, sentar¨¢ frente a frente a Hawking con Cop¨¦rnico y a Santa Teresa o San Juan de la Cruz con yoguis como Paranahansa Yogananda¡ ¡°Es en la India donde florece la m¨ªstica de manera m¨¢s libre y transconfesional porque se da en todas las religiones, incluso al margen. En el budismo, el hinduismo, en el Sanatama dharma, la religi¨®n perenne, la que toma, seg¨²n ellos, la verdad de cada una y desecha la farfolla¡±.
Pero quiz¨¢s tambi¨¦n entre de rond¨®n a analizar una serie que le fascina por sus di¨¢logos: ¡®Juego de tronos¡¯. ¡°Es culpa de mis hijos, pero cuando lo veo observo que los guionistas han mamao a Shakespeare. Cada conversaci¨®n siempre lleva almendra por dentro¡±.
Son elementos de aqu¨ª y de all¨¢, con los que El brujo enjuaga su m¨ªstica personal: ¡°Gozo, absoluta distensi¨®n, cercan¨ªa, considerar a los espectadores como unos amigos, no sufrir innecesariamente. Hay muchas cosas de las que prescindo. Busco la mera supervivencia a nivel art¨ªstico, hacer lo que sientes y conectar con el p¨²blico, con esa otredad, que te responde¡±.
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