Textos in¨¦ditos de Saramago: su creatividad ¨ªntima
El Nobel portugu¨¦s anotaba sus dudas y el proceso de escritura de sus novelas A los cinco a?os de su muerte, EL PA?S publica el ¡®making of¡¯ de ¡®Ensayo sobre la lucidez¡¯
Anotaba cu¨¢ndo se le ocurr¨ªa una idea para empezar una novela. Pod¨ªa ser de madrugada o viajando en tren. Expresaba sus dudas sobre la calidad de lo que llevaba escribiendo o manifestaba su desconfianza sobre el inter¨¦s de una trama cuando ¨¦l mismo se hab¨ªa hastiado urdi¨¦ndola. Jos¨¦ Saramago sol¨ªa apuntar todo, incluso cuando de repente decid¨ªa cambiar el t¨ªtulo de una novela hasta que el juicio de su mujer, Pilar del R¨ªo, le hac¨ªa desistir y volv¨ªa a su plan original.
As¨ª pas¨® con Ensayo sobre la lucidez, del que hoy, justo cuando se cumplen cinco a?os del fallecimiento del premio Nobel de Literatura de 1998, EL PA?S publica en exclusiva una serie de textos in¨¦ditos en castellano (en portugu¨¦s lo hace la revista Blimunda de la Fundaci¨®n Saramago). Son notas del autor en 2003 durante la redacci¨®n del libro publicado un a?o despu¨¦s que muestran el proceso creativo del autor, la construcci¨®n del relato, el c¨®mo se hizo la novela (lo que en el cine se denomina making of).
Saramago (Santar¨¦m, Portugal, 1922-Lanzarote, 2010) narra en Ensayo sobre la lucidez (publicado por Alfaguara) la historia de una ciudad cuyos habitantes deciden votar mayoritariamente en blanco, lo que provoca la reacci¨®n virulenta del Gobierno. Estos son algunos fragmentos de las notas del autor traducidas al castellano por Roser Vilagrassa [Los textos ¨ªntegros est¨¢n publicados en un documento adjunto en esta informaci¨®n]:
4 de febrero de 2003
¡°La noche del 30 al 31 de enero me despert¨¦ a las tres de la madrugada con la idea repentina de que, por fin, ya ten¨ªa el tema para una nueva novela, que ya andaba buscando de manera m¨¢s o menos consciente. Se trata de esa ¡°revoluci¨®n blanca" de la que habl¨¦ en Madrid y Barcelona durante la presentaci¨®n de El hombre duplicado, del voto en blanco como ¨²nica forma eficaz de protesta contra el loado sistema ¡°democr¨¢tico¡± que nos gobierna. Por si fuera poco, tambi¨¦n tuve la s¨²bita, la instant¨¢nea certeza de que dicho libro, en caso de que llegue a existir, tendr¨ªa que llevar el t¨ªtulo de Ensayo sobre la lucidez, como si el hecho de votar en blanco en la presente situaci¨®n del mundo fuera un acto exactamente contrario a aquellos, o a la mayor¨ªa de aquellos, que se comet¨ªan en Ensayo sobre la ceguera. Durante esos d¨ªas, la convicci¨®n de haber acertado de lleno era cada m¨¢s fuerte (...)¡±.
17 de marzo
¡°(...) He llegado a la conclusi¨®n de que el t¨ªtulo de la novela determina que los personajes sean los mismos que habitaron el otro Ensayo, el de la ceguera. Probablemente no todos. He pensado que la mujer del primer ciego se habr¨ªa divorciado del marido y que la madre del ni?o estr¨¢bico aparecer¨ªa y se ocupar¨ªa de ¨¦l. Los dem¨¢s, la mujer del m¨¦dico y el marido, la chica con las gafas de sol y el viejo del parche negro se mantienen. Tambi¨¦n el perro de las l¨¢grimas, que cerrar¨¢ el libro con la mujer del m¨¦dico muerta a su lado, asesinada por aquellos que decidieron que todo deb¨ªa volver a ser como en los buenos viejos tiempos (...)¡±.
29 de marzo
¡°El primer cap¨ªtulo empezar¨¢ con la descripci¨®n (sumaria, claro est¨¢) de la tormenta y el viento que cae sobre el pa¨ªs. La televisi¨®n y la radio apelan a la conciencia c¨ªvica de los electores para que no se queden en casa pese al mal tiempo. Usar la palabrer¨ªa insustancial propia de las ocasiones patri¨®ticas. Entrar en casa de los personajes principales: la mujer del m¨¦dico y el marido (tambi¨¦n el perro, que vive con ellos), la mujer divorciada del primer ladr¨®n, la chica de las gafas de sol y el viejo del parche negro, y el ni?o estr¨¢bico (la madre nunca lleg¨® a aparecer, ?o s¨ª?), el escritor y la familia (?toda?, recuerdo que estaba casado y creo que ten¨ªa hijas). A las cuatro de la tarde salen todos para ir a votar (tambi¨¦n saldr¨¢n los habitantes que a¨²n no hab¨ªan votado). Descripci¨®n de la caminata bajo la lluvia. Barrios inundados, bomberos, barcos. La radio y la televisi¨®n se apresuran a transmitir la noticia del inopinado acontecimiento: los electores de la ciudad X est¨¢n dando un extraordinario ejemplo de civismo, arrostrando la tormenta para cumplir con su sagrado deber (...)¡±.
19 de abril.
Sobrevolando el Mediterr¨¢neo.
¡°La idea de que los personajes de la Ceguera reaparezcan en Lucidez me parece cada vez mejor. As¨ª como el t¨ªtulo del nuevo libro ya sugiere una continuidad, la presencia de los personajes lo confirma definitivamente. En la mente de las autoridades perplejas surgir¨¢ la sospecha de que la mujer que no perdi¨® la vista en la Ceguera podr¨ªa tener algo que ver con el nuevo ¡®fen¨®meno¡¯. Como consecuencia l¨®gica, esta sospecha se extender¨¢ a aquellos a quienes ella hab¨ªa guiado. As¨ª como la novela anterior obedec¨ªa escrupulosamente a ¡®cierta l¨®gica¡¯, esta no podr¨¢ quedar atr¨¢s (...)¡±.
3 de junio.
D¨ªa en que Sophia de Mello Breyner gana el Premio Reina Sof¨ªa de poes¨ªa iberoamericana
¡°El final no ser¨¢ como se ha descrito m¨¢s arriba. La mujer del m¨¦dico ser¨¢ asesinada, pero no en el balc¨®n de la parte de atr¨¢s de su casa. La matar¨¢n en un jard¨ªn donde hab¨ªa llevado a pasear al perro de las l¨¢grimas. El perro empezar¨¢ a aullar y tambi¨¦n lo matar¨¢n. Los ciegos se preguntar¨¢n: ?Has o¨ªdo algo? Dos tiros, Pero tambi¨¦n un perro que aullaba, Ya se ha callado, habr¨¢ sido el segundo tiro, Menos mal, porque el aullido de los perros me afecta a los nervios¡±.
Las obras y las ideas del Nobel siguen vivas
A los cinco a?os de su desaparici¨®n, Jos¨¦ Saramago est¨¢ muy presente. En todo el mundo han aumentado los libros sobre ¨¦l, las representaciones teatrales, las traducciones, las c¨¢tedras y las muestra y hasta se public¨®, p¨®stumamente, Alabardas, alabardas, espingardas, espingardas. "Nos llama la atenci¨®n", explic¨® ayer Pilar del R¨ªo, viuda del escritor y directora de la Fundaci¨®n Saramago en Lisboa, "que, sin iniciativa nuestra, muchas televisiones recuerdan esta fecha". En Italia se prepara una ¨®pera a partir de Las intermitencias de la muerte, y en S?o Paulo, la mayor muestra sobre el autor en el Museo de la Lengua Portuguesa. Hoy, la Fundaci¨®n estrena el documental Un humanista por casualidad escritor, del brasile?o Leandro Lopes. Y se ultima un guion sobre El fin de la paciencia, una obra jam¨¢s representada.
Sus ideas tampoco han muerto. En 1998, el primer premio Nobel portugu¨¦s propuso en su brindis en la cena de la Academia sueca crear la Declaraci¨®n Universal de los Deberes Humanos. ¡°No parece que los Gobiernos hayan hecho por los derechos humanos todo aquello a lo que, moralmente, cuando no por fuerza de ley, estaban obligados. Las injusticias se multiplican en el mundo, las desigualdades se agravan, la ignorancia crece, la miseria se extiende¡±.
Aquel brindis al sol lo ha recogido, 17 a?os despu¨¦s, la Universidad Aut¨®noma de M¨¦xico, que el pr¨®ximo mi¨¦rcoles organiza un congreso sobre su idea de los Deberes Humanos. La web Prospectivas del Mundo de la UNAM ha recogido ideas, e intelectuales de todo el mundo debatir¨¢n sobre el futuro que nos aguarda o, en su defecto, que nos guardan. "A Jos¨¦ no le gustaba que lo clasificaran como intelectual", record¨® Pilar del R¨ªo, "¨¦l era un humanista, pero un humanista compasivo".
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