Muere la actriz Laura Antonelli
La italiana fue un mito er¨®tico de los setenta con t¨ªtulos como 'Malicia', 'Entre el amor y la muerte' o 'El inocente'
Como un juguete roto. Tras haber sufrido una desfiguraci¨®n por culpa de una mala cirug¨ªa est¨¦tica en 1992, y luchado contra la justicia italiana por una acusaci¨®n de tr¨¢fico de drogas. Sola en su casa. As¨ª muri¨® Laura Antonelli, cuyo cad¨¢ver ha sido descubierto por la se?ora de la limpieza a las ocho de la ma?ana.
Antonelli ha fallecido a los 74 a?os, en su casa de Ladispoli, cerca de Roma, muy alejada de sus tiempos de mito er¨®tico europeo ¡ªen especial en Italia y Espa?a¡ª. Probablemente fue mejor actriz que la mayor parte de las pel¨ªculas que protagoniz¨®, m¨¢s centradas en la carne que en la interpretaci¨®n.
Naci¨® con el nombre de Laura Antonaz en Pula (Croacia) que en 1941, en plena guerra mundial, era parte de Italia. De ni?a se mud¨® a Roma y lleg¨® a trabajar como profesora de educaci¨®n f¨ªsica. Pero un anuncio de Coca-cola y su presencia en diversas fotonovelas la llevaron hasta el cine. Con 25 a?os debut¨® en la gran pantalla con Le sedicenni. Fue en los setenta cuando triunf¨® y logr¨® el David di Donatello por Malicia, la pel¨ªcula que en 1973 le present¨® su rostro a todo el mundo.
Hay que reconocer que lo intent¨® en el cine de autor, que dejaba contenta a directores como Dino Risi, con quien trabaj¨® en Sexo loco (1973), una pel¨ªcula por episodios, en la que ella y Giancarlo Giannini protagonizaban todas las historias, y en Sesso e volentieri (1982); Luchino Visconti (El inocente), o Ettore Scola (Entre en el amor y la muerte, con la que en 1981 obtuvo su segundo David di Donatello). Pero sus grandes ¨¦xitos fueron por otro lado: Dios m¨ªo, c¨®mo he ca¨ªdo tan bajo, de Luigi Comencini, A su excelencia le gustan las mujeres, Camas calientes, Solo dios sabe la verdad, Me gusta mi cu?ada, La jaula o La veneciana. Todas parec¨ªan prolongaciones del mito er¨®tico de criada que ciment¨® con Malicia, de Salvatore Samperi. En realidad, Samperi es un buen espejo de su carrera: con ¨¦l tambi¨¦n hizo Me gusta mi cu?ada, Casta y pura y su ¨²ltimo trabajo, Malizia 2000 (1991). Samperi, experto en este erotismo de segunda, dirigi¨® en Un amor en primera clase (1980) a la gran rival europea de Antonelli, Sylvia Kristel, m¨¢s conocida por la saga Emmanuelle.
De Me gusta mi cu?ada, uno de los grandes ¨¦xitos de Antonelli, ?ngel Fern¨¢ndez-Santos escribi¨®: ¡°Es una vieja historia verde, con algunos tonos ros¨¢ceos, pero tocada de una pretensi¨®n de cinismo que embarulla un poco las cosas a medida, que el filme avanza. La historia del adolescente que recibe de su hermano mayor el encargo de escoltar a su cu?ada de los moscones de playa y termina ¨¦l como ¨²nico favorecido mosc¨®n, es una de las muchas variantes posibles del manantial del Decamer¨®n, solo que las posibilidades del asunto est¨¢n neutralizadas por un gui¨®n insulso y mal construido. Los ep¨ªgonos de la gran comedia italiana suelen dar pocas veces en la diana. Las joyas del g¨¦nero, procedentes sobre todo de los a?os cincuenta y primeros sesenta, crearon un estilo, cierta facilidad entre los profesionales italianos para imitarlo y todo ello en un desierto de la imaginaci¨®n, que ha ido poco a poco degradando el peque?o gran g¨¦nero hasta dejarlo en nada. Una muestra de esa nada es esta pel¨ªcula¡±.
En abril de 1991, la polic¨ªa encontr¨® 36 gramos de coca¨ªna en la casa de Laura Antonelli, y fue condenada a arresto domiciliario por posesi¨®n y tr¨¢fico de drogas. La siguiente d¨¦cada la pas¨® apelando la sentencia hasta que la justicia italiana le dio la raz¨®n: la droga era solo para su consumo personal. En noviembre de 1996, por problemas de salud mental, Antonelli fue internada en la secci¨®n psiqui¨¢trica de una cl¨ªnica de Civitavecchia. Nunca m¨¢s volvi¨® a actuar, a pesar de que le siguieron llegando ofertas.
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