Todos en cola por un n¨²mero uno

Decenas de personas aguardan en cola. Falta media hora pero la cuenta atr¨¢s ya ha empezado. Los organizadores se frotan las manos. Cuentan que hasta lanzaron una porra para ver cu¨¢ndo tardar¨ªan en venderse todos los 1.000 ejemplares. Uno de ellos apost¨® que quedar¨ªa alguno sin comprador: parece haberse equivocado. Pero, ?cu¨¢l es el objeto de tanto deseo? El n¨²mero uno del nuevo c¨®mic de El Hombre Hormiga, del que Panini editar¨¢ en septiembre los seis primeros tomos, pero que solo y exclusivamente aqu¨ª, en la Comic-Con del festival Metr¨®poli de Gij¨®n, se vende por separado. Y, adem¨¢s, con dos portadas especiales dedicadas a la ciudad.

?Y por qu¨¦ uno har¨ªa tanta cola por eso? ¡°?Pues, claro, es exclusivo! Solo va a estar aqu¨ª¡±, cuenta entusiasta Omar Rinc¨®n Fern¨¢ndez, 26 a?os, uno de los primeros de la fila y candidato seguro a un ejemplar, junto con Laura Garc¨ªa Fern¨¢ndez, de la misma edad. Otros, sin embargo, probablemente sean menos afortunados o paguen el retraso con el que se pusieron a esperar. Pero tendr¨¢n otras ocasiones: la Comic-Con de Gij¨®n justo acaba de abrir sus puertas y no las cerrar¨¢ hasta el domingo por la noche. Hay tebeos, charlas, mesas redondas y desfiles para todos.

La cita es el plato fuerte del festival Metr¨®poli que, tras alcanzar 107.000 visitantes el a?o pasado, busca en su segunda edici¨®n duplicar la cifra. La receta es una mezcla de todo tipo de arte y entretenimiento: cine, c¨®mics, videojuegos, m¨²sica y series, con un gui?o particular al p¨²blico friki. Quiz¨¢s el mejor resumen sea una joven que, nada m¨¢s cruzar las puertas, exclama: ¡°?Ay, es el para¨ªso!¡±.

A su alrededor circulan cientos de visitantes, sobre todo j¨®venes pero no solo. Algunos van vestidos como en un lugar cualquiera en un d¨ªa cualquiera pero este espacio no lo es y basta poco para entenderlo. De fondo, resuenan las bandas sonoras de La guerra de las galaxias, Parque Jur¨¢sico o Piratas del Caribe. Y, sobre todo, muchos visitantes llevan las prendas inconfundibles t¨ªpicas de estos eventos: por los pasillos se encuentran una Catwoman, un Capit¨¢n Harlock, una Lobezno y muchos m¨¢s cosplayers [los aficionados a disfrazarse como los personajes de sus c¨®mics, videojuegos o series favoritas]. ¡°Es una forma de sentir el personaje en tu piel¡±, explicaba Celia Mart¨ªnez, de 13 a?os, con su largo pelo rosa y sus orejas de gato, elementos clave del disfraz de Lucy, del manga Elfen Lied. Mart¨ªnez estuvo desde las dos de la tarde esperando hasta que, a las cinco, la cita por fin arrancara.

¡°La idea surgi¨® en enero de 2014 y al principio consist¨ªa en algo m¨¢s peque?o, de menos d¨ªas y con una tem¨¢tica anual¡±, relata Iker Gonz¨¢lez, uno de los tres directores del certamen. Sin embargo, ya desde el a?o pasado el concepto original acab¨® agrand¨¢ndose hasta incluir decenas de estands, conferencias, talleres y exposiciones, en el recinto ferial Luis Adaro, frente al estadio del Sporting Gij¨®n. Todo por 1,50 euros que vale la entrada al espacio. Con la esperanza, claro, de que una vez dentro los visitantes se llenen de c¨®mics y camisetas a la vez que vac¨ªan sus bolsillos.

En su primera edici¨®n el certamen tuvo un coste en torno a los 800.000 euros, cubierto en su mayor¨ªa por fondos privados, y consigui¨® cerrar, seg¨²n Gonz¨¢lez, con beneficios. As¨ª que este a?o todo se ha multiplicado. Entre las estrellas, se encuentran el m¨ªtico dibujante espa?ol Jos¨¦ Luis Garc¨ªa L¨®pez, el autor hist¨®rico de Iron Man Bob Layton, el actor de la saga original de La guerra de las galaxias Jeremy Bulloch (era el cazarrecompensas Boba Fett). Qui¨¦n no estar¨¢, en cambio, es otra figura clave del dibujo de superh¨¦roes espa?ol: Carlos Pacheco ha cancelado su asistencia en el ¨²ltimo momento.

Algunos visitantes se dicen decepcionados por su ausencia. Y los organizadores muestran tambi¨¦n cierta pena. Sin embargo, nada puede turbar el entusiasmo de Pepe Caldelas, director de la Comic-Con. ¡°Queremos crear una convention a la americana [como la de San Diego], con toda su espectacularidad. Este a?o tenemos m¨¢s invitados, m¨¢s zombies, m¨¢s Star Wars¡±, ha presumido, en la presentaci¨®n. Tras sus palabras, por fin, la cola empez¨® a fluir y los visitantes pudieron adquirir su copia del n¨²mero uno de El Hombre Hormiga, con sus portadas dibujadas por Bob Layton y Ram¨®n Rosanas. De hecho, Omar Rinc¨®n Fern¨¢ndez y Laura Garc¨ªa Fern¨¢ndez volvieron a buscar al periodista para se?alarle su ¨¦xito: ¡°Lo conseguimos¡±. En sus manos no hab¨ªa un ejemplar, sino seis.