¡®Viergado¡¯, un toro bravo de Saltillo, protagonista en la plaza de Las Ventas

Una oreja cada uno pasearon los diestros S¨¢nchez Vara y Jos¨¦ Carlos Venegas en Las Ventas, en una interesante corrida de Saltillo, en la que destac¨® un gran toro, el quinto, de nombre ¡®Viergado¡¯, un dechado de bravura, y tambi¨¦n fue bueno el templado cuarto.

Con un cuarto de entrada, se lidiaron toros de Saltillo, con hierro y divisa de Jos¨¦ Joaqu¨ªn Moreno de Silva, muy bien presentados, serios y astifinos, encastados y de variado comportamiento. Destac¨® el quinto, un gran toro, encastado y bueno, y tambi¨¦n el cuarto. El resto desarroll¨® complicaciones.

S¨¢nchez Vara: pinchazo, estocada delantera, tendida y atravesada que escupe (silencio), y casi entera ligeramente tendida (oreja); Jos¨¦ Carlos Venegas: dos pinchazos y estocada (silencio), y estocada tendida (oreja), y Marco Antonio G¨®mez, que confirmaba alternativa: estocada ligeramente trasera (silencio); dos medias defectuosas y descabello (silencio).

En cuadrillas, destacaron Curro Vivas, con el capote, al tercero y quinto, a los que clav¨® cuatro grandes pares David Adalid. Tambi¨¦n Gabriel Mercado pic¨® muy bien al quinto.

Lo que cambia una tarde cuando la bravura hace acto de presencia; esa virtud fundamental para que el toro emocione con sus vibrantes y codiciosas embestidas, y, sin duda, el motor de la Fiesta. Sin bravura no hay espect¨¢culo.

En Madrid la hubo y a raudales, gracias a ¡®Viergado¡¯, posiblemente el toro m¨¢s bravo de la temporada en la primera plaza, lo que demuestra que lo de encastes minoritarios habr¨ªa que revisarlo, porque lo que verdaderamente hay son toreros acomodados que reh¨²yen estas corridas para que su privilegiada posici¨®n no se vea amenazada.

De ah¨ª, que los tres toreros de este festejo deban ser catalogados como h¨¦roes, pues tiene m¨¦rito venir a Madrid, en septiembre, con la siempre exigente corrida de Moreno de Silva, con la que, no obstante salieron reforzados dos nombres: S¨¢nchez Vara y Jos¨¦ Carlos Venegas, que sorte¨® el ya afamado ¡®Viergado¡¯.

Este animal tom¨® tres varas y tuvo mucha transmisi¨®n y codicia en la muleta, bravo de verdad. Venegas plant¨® batalla con mucha decisi¨®n, muy firme, muy de verdad, y logr¨® pasajes de mucha emoci¨®n por el pit¨®n derecho, aunque no lograra templar las vibrantes acometidas del ¡®saltillo¡¯, que marc¨® el ritmo de una interesante faena.

El m¨¦rito de Venegas fue no afligirse nunca y llegar a los tendidos, que disfrutaron con ¨¦l, pero, sobre todo, con las encastadas embestidas del toro, al que llegaron a pedir la vuelta al ruedo en el arrastre, que el presidente no concedi¨®, despu¨¦s de sacar su pa?uelo para concederle el trofeo al joven torero jienense.

El escaso motor y falta de casta de su primero le impidi¨® romper a embestir y le cost¨® cada vez m¨¢s desplazarse hasta que se raj¨® definitivamente, y se ech¨® en la arena antes de que el torero montara la espada. Venegas estuvo firme ¨¦l, muy bien colocado, muy quieto y consigui¨® meritorios muletazos, dentro de una digna actuaci¨®n.

Alto, largo y astifino fue el primero de S¨¢nchez Vara, un toro a punto de cumplir seis a?os, que hizo una fea pelea en varas, donde le pegaron fuerte para tratar se asentar las inciertas y brutas embestidas que tuvo de salida.

Cort¨® se mostr¨® en banderillas y, ya en el ¨²ltimo tercio, viaj¨® siempre con la cara natural, aparentemente ¡®dormidito¡¯, pero muy inc¨®modo seg¨²n avanzaba la lidia, para estar delante. S¨¢nchez Vara lo intent¨®, sin violentarlo, pero no logr¨® sacar nada en claro de tan ingrato animal.

El cuarto, al que S¨¢nchez Vara salud¨® con una larga en el tercio, hizo sonar estribos en el caballo. Esta vez s¨ª tom¨® las banderillas el matador, y destac¨® el subalterno Ra¨²l Ram¨ªrez, que hizo el salto de la garrocha.

El toro respondi¨® con temple y por abajo en la muleta, y S¨¢nchez Vara, a base de oficio y t¨¦cnica, logr¨® aprovecharlo en una entonada labor sobre la mano diestra, donde se le vio muy seguro, y que le vali¨® una oreja, discutida por el sector m¨¢s cr¨ªtico de la plaza, por la mala actuaci¨®n del puntillero.

Al confirmante Marco Antonio G¨®mez se le notaron los pocos contratos que lleva a sus espaldas para estar con soltura ante el toro de ceremonia, un animal con nervio, aunque sin acabar de emplearse; y algo parecido con el sexto, con el que quiso y pudo.

Oreja para Rafael Serna en Guadalajara (M¨¦xico)

El novillero espa?ol Rafael Serna cort¨® la ¨²nica oreja en el quinto festejo de la campa?a de novilladas en la plaza de Guadalajara (M¨¦xico), en tanto que los mexicanos Angel Espinosa Platerito, que sufri¨® un puntazo en el muslo derecho, y Andr¨¦ Lagravere El Galo se fueron en vac¨ªo.

Con un cuarto de entrada se lidiaron cinco novillos de Cuatro Caminos y uno, el sexto, de San Francisco de As¨ªs, que dieron un juego irregular.

Platerito: silencio en el primero, y aplausos en el cuarto tras sufrir un puntazo en el muslo derecha; El Galo: destellos en el segundo y saludos desde el tercio, y silencio en el quinto, y Rafael Serna: muy torero con el tercero de la tarde, faena que cal¨® y cort¨® una oreja, y decidido ante el sexto y escuch¨® una ovaci¨®n final.