Entretenimiento social
La hemos visto m¨¢s veces, pero no as¨ª, y no aqu¨ª. Pel¨ªculas de venganza, del ojo por ojo, comandadas por la acci¨®n y desarrolladas (casi) en un ¨²nico escenario, cerrado, claustrof¨®bico. Lo normal al toparse con El desconocido, estupendo debut en el largometraje del gallego Dani de la Torre, es pensar en Speed: M¨¢xima potencia (Jan de Bont, 1994): una bomba en un veh¨ªculo, un escarmiento, velocidad, presencia de inocentes. Y sin embargo, quiz¨¢ comparta m¨¢s esencias con ?ltima llamada (Joel Schumacher, 2002): la conversaci¨®n telef¨®nica como yincana hacia el abismo. ?Qu¨¦ aporta entonces El desconocido? Sin duda, el elemento social. La crisis espa?ola se ha transmitido ya incluso a la intriga criminal a la americana. Los desmanes de ciertos bancos, las preferentes y sus dramas colaterales como motivo comercial.
EL DESCONOCIDO
Direcci¨®n: Dani de la Torre.
Int¨¦rpretes: Luis Tosar, Javier Guti¨¦rrez, Elvira M¨ªnguez, Goya Toledo, Fernando Cayo.
G¨¦nero: thriller. Espa?a, 2015.
Duraci¨®n: 102 minutos
Alberto Marini, que en Mientras duermes, otro thriller, ya hab¨ªa demostrado cierta observaci¨®n social alrededor de la lucha de clases, en aquella ocasi¨®n a trav¨¦s de los ojos de un portero de finca, ha escrito un artefacto que en manos de Dani de la Torre se vuelve irresistible por su manejo de la puesta en escena, de los tiempos, del montaje, de las reacciones, de las miradas, de los puntos de vista, de las m¨ªnimas pausas. Una pel¨ªcula que, adem¨¢s, trasciende los tejemanejes bancarios para acabar alcanzando otros temas de la realidad espa?ola actual como la violencia de g¨¦nero y la razonable psicosis por los asesinatos de cr¨ªos por parte de sus padres.
Puede que en su empe?o por ser comercial, El desconocido contenga unas cuantas frases de m¨¢s, de esas que pretenden explicar lo que ya se entiende, o lo que es directamente innecesario o inveros¨ªmil, pero tambi¨¦n hay que alabar su huida del manique¨ªsmo con esa escalera de sometimiento de la que quiz¨¢ todos seamos parte, e incluso c¨®mplices. Como esa l¨ªnea de gui¨®n que moralmente puede ser reprobable pero que en lo cinematogr¨¢fico es perfecta para redondear las defensas narrativas de todos los flancos: "Vosotros tambi¨¦n quer¨ªais ganar dinero, por eso firmasteis".
Los coru?eses se van a quedar boquiabiertos con lo que han rodado en medio de sus calles, de su paseo mar¨ªtimo. Una gran labor de producci¨®n redondeada por un magn¨ªfico trabajo interpretativo: de Luis Tosar y de Javier Guti¨¦rrez, enormes, pero tambi¨¦n de la revelaci¨®n adolescente Paula del R¨ªo. Eso s¨ª, cuesti¨®n peliaguda la del cine social de entretenimiento. Puede que a alguien le suene incluso grosero. Pero, ?por qu¨¦ no?
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