?¡®Metal¡¯ para ¡®hipsters¡¯?
Si algo resulta arbitrario en el mundo de la m¨²sica son los prejuicios y la estigmatizaci¨®n de ciertos g¨¦neros frente a otros quiz¨¢s m¨¢s inmovilistas, pero infinitamente m¨¢s reverenciados. Una de las pr¨¢cticas habituales en esto de desmerecer estilos musicales es recurrir a los t¨®picos de ciertas sonoridades sin caer en la cuenta de que los argumentos utilizados perdieron su validez hace a?os, d¨¦cadas incluso.
Rompo una lanza a favor del metal, uno de esos universos en los que la riqueza de formas, sonidos, filosof¨ªas y caminos es cada d¨ªa m¨¢s amplia. Porque el metal ha dado muchas vueltas desde sus inicios. Los tiempos han cambiado y ya nadie puede acotar sus fronteras con facilidad, y cuando alguien pretende hacerlo es muy posible que erre el tiro.
Hace ya m¨¢s de dos d¨¦cadas que el concepto "metal" dej¨® de traducirse estrictamente como hard rock y heavy metal, pasando a significar much¨ªsimo m¨¢s. Ahora bien, tampoco restemos valor a los pioneros, quiz¨¢s m¨¢s c¨¢ndidos que sus nietos s¨ª, pero indispensables en esta historia ya que gracias a aquellas bases que afianzaron con sus discos se levant¨® una Torre de Babel estil¨ªstica en el que las distintas lenguas contin¨²an entendi¨¦ndose y sobre todo respet¨¢ndose mutuamente.
El caso es que, durante los ¨²ltimos a?os, son muchas las nuevas voces que est¨¢n convirtiendo el metal en un g¨¦nero m¨¢s inquieto, experimental e incluso innovador que durante la d¨¦cada anterior. Decenas de g¨¦neros y subg¨¦neros (la lista ser¨ªa interminable, as¨ª que mejor se la ahorro) han nacido para quedarse y aportar aire fresco de vez en cuando al mundo del rock duro m¨¢s extremo, pero lo que estamos viendo ahora mismo sorprende al acercar a algunos artistas a un p¨²blico que, hasta no hace demasiado, manten¨ªa total desapego frente a cualquier banda afiliada voluntaria o involuntariamente al g¨¦nero.
El metal se aleja d¨ªa tras d¨ªa de los t¨®picos por sus m¨¢rgenes y eso lo abre a nuevas audiencias que aceptan sumergirse en los desaf¨ªos creativos e intelectuales que proponen muchas de estas formaciones j¨®venes y no tan j¨®venes. Ah¨ª tenemos casos como el de Deafheaven que, con su New Bermuda (Anti/Pias, 15), firman uno de los discos del a?o en cuesti¨®n de guitarras duras, combinando post-rock, black metal arisco, melod¨ªa y pasajes emocionales.
Y podr¨ªamos seguir con Liturgy, uno de los grupos estrella de Thrill Jockey, un sello hasta ahora poco dado a publicar bandas de connotaciones met¨¢licas. Pero son muchos m¨¢s los nombres que se van ganando el respeto en otros universos musicales. Ah¨ª est¨¢n para demostrarlo Pallbearer, YOB, Sunn 0))), Wolves In The Throne Room o esa suerte de Sigur R¨®s extremos que son Solstafir, todos ellos formaciones con trayectorias que pueden superar la d¨¦cada en activo, pero que han ganado protagonismo durante los ¨²ltimos a?os. Algunos lo llaman metal para hipsters, a otros nos gusta llamarlo sencillamente metal.
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