La revancha de los muralistas mexicanos

En el Museo Nacional de Bellas Artes chileno, un imponente edificio neocl¨¢sico del centro de Santiago, estaba todo preparado: el 13 de septiembre de 1973 se inaugurar¨ªa la exposici¨®n Orozco, Rivera y Siqueiros. Pintura mexicana, que presentaba una colecci¨®n de 164 obras de los muralistas. La historia y la tragedia, sin embargo, frustraron la apertura de la muestra. Apenas 48 horas antes, el martes 11 de septiembre, los militares chilenos atacaron el Palacio de La Moneda y, con la muerte del Presidente Salvador Allende, dieron inicio a 17 a?os de dictadura. Los cuadros estaban montados en las paredes del museo, que tambi¨¦n fue atacado por los golpistas. La misi¨®n diplom¨¢tica mexicana, encabezada por el embajador Gonzalo Mart¨ªnez Corbal¨¢, logr¨® rescatarlos en un operativo de alto riesgo y repatriar las obras. ¡°La ruta a M¨¦xico es: Antofagasta, Lima, Panam¨¢, M¨¦xico y escala t¨¦cnica en esos lugares. Comun¨ªquenlo al canciller Rabasa y d¨ªganle que cruce los dedos¡±, escribi¨® Mart¨ªnez en un telegrama que dibuja la tensi¨®n que se viv¨ªa.

Las obras deber¨ªan haber vuelto a M¨¦xico en el avi¨®n en el que iban la viuda de Allende y parte de la familia del presidente

Tras 42 a?os, tras varios intentos frustrados, la muestra ha regresado a Santiago de Chile: el pasado jueves, el Museo Nacional de Bellas Artes inaugur¨® La exposici¨®n pendiente 1973-2015. Orozco, Rivera y Siqueiros. Con 76 obras, la apertura se ha celebrado no solo por su importancia art¨ªstica, sino tambi¨¦n hist¨®rica y pol¨ªtica.

El curador Carlos Palacios, del Museo de Arte Carrillo Gil de M¨¦xico, propietario de la colecci¨®n, explica que ¡°la exposici¨®n tiene dos niveles: la reconstrucci¨®n de la muestra nunca inaugurada en 1973 y la versi¨®n que contextualiza el momento de esa exposici¨®n¡±. Junto a las obras de Orozco, Rivera y Siqueiros, dispuestas en salas distintas, se encuentran islas documentales que hacen comprender a los visitantes las circunstancias de la exposici¨®n fallida de 1973. Entre el material se puede observar la prensa de la ¨¦poca: ¡°Peligra en Chile la colecci¨®n de arte Dr. Alvar Carrillo Gil¡±, titulaba el 12 de septiembre de 1973 el peri¨®dico mexicano Exc¨¦lsior.

El ejercicio arqueol¨®gico fue posible gracias a la exhaustiva documentaci¨®n de que dej¨® el muse¨®grafo mexicano Fernando Gamboa, a cargo de la exposici¨®n en 1973. Proveniente de Rusia, hab¨ªa llegado a Santiago de Chile el 7 de septiembre de 1973 con las 27 cajas que conten¨ªan las obras de los muralistas. Junto al entonces director del Museo de Bellas Artes chileno, el pintor Nemesio Ant¨²nez, trabajaron a contrarreloj para instalar las pinturas que se exhibir¨ªan en el marco de las jornadas de intercambio cultural entre Chile y M¨¦xico. El Golpe de Estado le sorprendi¨® en el Hotel Carrera, a pocos metros de La Moneda. Desde ese lugar, el curador no s¨®lo presenci¨® el horror del ataque al Palacio de Gobierno, sino que escribi¨® y grab¨® en casetes el horror de lo que estaba viviendo. ¡°Si le matan, Allende ser¨¢ un h¨¦roe y m¨¢rtir de la democracia¡±, anotaba Gamboa entre el sonido de los bombardeos y el humo de La Moneda incendiada.

Las pilas de la grabadora se le agotaban y ¨¦l, entonces, tomaba el l¨¢piz. Como comisario hab¨ªa vivido situaciones l¨ªmite: en 1948, hab¨ªa rescatado m¨¢s de 40 ¨®leos y 90 piezas de obra gr¨¢fica en medio de un incendio del llamado Bogotazo, el estallido del movimiento armado en Colombia. Veinticinco a?os despu¨¦s, ese 11 de septiembre de 1973, sinti¨® el mismo miedo: ¡°S¨²bitamente record¨¦ Bogot¨¢ y tom¨¦ mi abrigo y sombrero con la idea de lanzarme a la puerta antes de que fuera demasiado tarde. Para m¨ª lo importante era la colecci¨®n¡±. Gamboa lleg¨® hasta el Museo Nacional de Bellas Artes y logr¨® desmontar las obras y guardarlas. Pero no consigui¨® sacarlas del edificio, que pocas horas despu¨¦s fue bombardeado. Una vecina de derechas hab¨ªa denunciado que revolucionarios de izquierda se escond¨ªan en sus salas y los militares, sin saber que solo hab¨ªa un guardia, dispararon contra sus murallas y parte de sus obras de arte.

El fot¨®grafo Sergio Berthoud lleg¨® hasta el museo junto a Ant¨²nez, el director, y en ocho im¨¢genes inmortaliz¨® el da?o patrimonial: ¡°Vimos los muros perforados por las balas, que hab¨ªan alcanzado dos cuadros. Sent¨ª una inmensa rabia¡±. Las 164 pinturas de Orozco, Rivera y Siqueiros estaban embaladas y no fueron da?adas.

El embajador Mart¨ªnez Corbal¨¢ realiz¨® una intensa labor para trasladar a M¨¦xico a cientos de chilenos en riesgo y llev¨® a cabo delicadas gestiones para rescatar las obras. Seg¨²n detalla Bruno Salas, director del documental La colecci¨®n en peligro, en fase de producci¨®n, las 164 pinturas llegaron hasta el aeropuerto para embarcar en el primer avi¨®n a M¨¦xico, el 15 de septiembre de 1973. En ese vuelo iba la viuda de Allende, Hortensia Bussi, y parte de la familia del presidente muerto. Las obras no embarcaron debido a su peso y dimensi¨®n. Despu¨¦s de regresar al museo pudieron ser repatriadas el d¨ªa 25. ¡°Cristalizar finalmente este proyecto es un signo de madurez hist¨®rica¡±, comenta el exembajador de M¨¦xico en Chile, Otto Granados, que durante su gesti¨®n se embarc¨® en llevar adelante esta exposici¨®n pendiente.

La exposici¨®n pendiente 1973-2015. Orozco, Rivera y Siqueiros. Museo Nacional de Bellas Artes. Santiago de Chile. Hasta el 21 de febrero de 2016.