Feria de Abril, ¨¦xito art¨ªstico y frustraci¨®n econ¨®mica
Padilla, Morante y el toro ¡®Cobradiezmos, triunfadores de un ciclo de diecis¨¦is corridas que solo registr¨® cuatro llenos de ¡®no hay billetes¡¯
La Feria de Abril de 2016 ha sido un ¨¦xito art¨ªstico que no se fundamenta tanto en las 21 orejas que pasearon los matadores de toros, como en momentos de grandeza taurina, algunos de los cuales permanecer¨¢n durante mucho tiempo en el recuerdo. El m¨¢s importante de todos, sin ninguna duda, el indulto de ¡®Cobradiezmos¡¯, de la ganader¨ªa de V¨ªctorino Mart¨ªn, lidiado el mi¨¦rcoles 13 de abril, uno de los toros m¨¢s bravos que han salido nunca al ruedo sevillano, y al que Manuel Escribano le cort¨® las dos orejas simb¨®licas.
Juan Jos¨¦ Padilla fue el ¨²nico matador que abri¨® la Puerta del Pr¨ªncipe, y Morante de la Puebla elev¨® el diapas¨®n de la magia torera con una faena de altos vuelos que lo redimi¨® ante s¨ª mismo y Sevilla en el ¨²ltimo toro de su cuarta actuaci¨®n en el abono.
Los tres han sido reconocidos como los triunfadores del ciclo por los distintos jurados, si bien ha quedado en un segundo plano el lidiador del toro indultado; Escribano no sali¨® a hombros por la puerta de la gloria sevillana ni ha sido premiado por la Real Maestranza porque su ¡®gran gesta¡¯ es tan excepcional que no est¨¢ regulada ni por la norma ni la costumbre. Quede, no obstante, constancia de que su faena a ¡®Cobradiezmos¡¯ fue de las m¨¢s completas, redondas y emocionantes de muchas ferias.
Este balance positivo no se ha visto refrendado por la asistencia de p¨²blico, que solo ha permitido que se cuelgue el cartel de ¡®no hay billetes¡¯ cuatro de las diecis¨¦is tardes del ciclo; del mismo modo, han quedado patentes dos preocupantes realidades: la sabia y generosa afici¨®n sevillana pertenece al pasado y ha sido sustituida por una masa festivalera y carente de criterio, y el toro bravo es una rara excepci¨®n en una caba?a gravemente enferma de invalidez y falta de casta.
Se cortaron 21 orejas (tres pase¨® Padilla; dos, Morante, Escribano, Manzanares, Ure?a y L¨®pez Sim¨®n, y una cada uno Talavante, Ponce, El Juli, Roca Rey, Moral, Javier Jim¨¦nez, Rafaelillo y El Fandi, a las que hay que sumar las dos que obtuvieron los rejoneadores Diego Ventura y Andr¨¦s Romero, y una Sergio Gal¨¢n y Andy Cartagena), y destacaron los hierros de Victorino, Torrestrella, Daniel Ruiz, Fuente Ymbro y una de las dos de N¨²?ez del Cuvillo.
Entre los matadores dejaron una buena estela Pepe Moral y Javier Jim¨¦nez, que no figuran en los carteles de San Isidro; L¨®pez Sim¨®n, que mantuvo su cr¨¦dito; Roca Rey, hambriento de triunfo; Talavante, Ponce y El Juli no decepcionaron, qued¨® diluido el gran momento de Ure?a la tarde del indulto, y llamaron la atenci¨®n Jos¨¦ Garrido, valiente y err¨¢tico, El Fandi, eterno populista, y la progresi¨®n art¨ªstica de Rafaelillo.
Sobresalieron muchos hombres de plata, toreros de verdad en el albero sevillano. En primer lugar figura Curro Javier, que ha acaparado todos los premios por su brillante actuaci¨®n en banderillas el 8 de abril, y le siguen muy cerca Javier Ambel, Fernando S¨¢nchez, Curro Robles, Jes¨²s Arruga, Jos¨¦ Chac¨®n, Domingo Siro, ?ngel Otero, Abraham y Jos¨¦ Luis Neiro, entre otros; y a caballo destacaron Chicharito, Chocolate, Juan de Dios Quinta y Juan J. Esquivel, aunque el gremio de picadores tuvo escaso trabajo.
La nota c¨®mica y dram¨¢tica a un tiempo la puso el espont¨¢neo que apareci¨® en el ruedo la tarde de los miuras. Solo un milagro lo salv¨® de la cornada, pero se llev¨® una m¨¢s que reprobable tunda cuando lleg¨® al burladero. Llovi¨® alguna tarde, que no acab¨® en suspensi¨®n, y, cuando finaliz¨® la feria, casi todos sonre¨ªan, menos el empresario.
Sevilla no responde
Ram¨®n Valencia, empresario de la plaza de la Maestranza, no cesa de recibir felicitaciones, pero ¨¦l contesta con una forzada sonrisa que no oculta una profunda frustraci¨®n. La feria de Sevilla, basada desde hace a?os en carteles rematados (integrados por tres figuras) no ha encontrado el eco esperado entre el p¨²blico. ¡®Sevilla no puede con esta feria¡¯, es la queja amarga del m¨¢ximo responsable.
La vuelta de Morante, El Juli, Talavante y Perera solo ha repercutido en una subida de un ocho por ciento en el n¨²mero de abonados, de 2.165 a 2.335, y las taquillas solo han colgado el cartel de ¡®no hay billetes¡¯ cuatro tardes. Estas circunstancias, unidas al 21 del por ciento de IVA y el 22 por ciento de alquiler del coso, propiedad de la Real Maestranza de Caballer¨ªa, han sumido a Valencia en una m¨¢s que perceptible preocupaci¨®n.
Est¨¢ convencido de que no hay afici¨®n para ¡®una feria de esta categor¨ªa¡¯, lo que obligar¨ªa a un cambio de concepto si no se modifican las circunstancias actuales. Y esas ¡®circunstancias¡¯ son los impuestos y el canon, y no el cach¨¦ de los toreros, ¡®que no cobran mucho¡¯. ¡®La Maestranza no se puede comparar con Bilbao, que no paga alquiler, ni con Madrid, que paga cuatro veces menos que yo¡¯, asegura el empresario.
Afirma Valencia que ha perdido dinero con los cuatro llenos de ¡®no hay billetes¡¯, y que en esta feria hubiera ganado m¨¢s con una suspensi¨®n por lluvia que con la celebraci¨®n del espect¨¢culo.
El empresario no cita la palabra fracaso, pero su cara es todo un poema.
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