El escritor que quer¨ªa hacer historia
La cr¨®nica de la Guerra Civil de Ludwig Renn, editada en alem¨¢n en 1955, ve la luz en Espa?a. Es literatura de combate comunista, sin lugar para la ret¨®rica o los sentimientos
La guerra civil espa?ola fue en su origen un conflicto interno entre espa??oles, pero en su curso y desarrollo constituy¨® un episodio de una guerra civil ?europea que acab¨® en 1945.
Tras las subida de Hitler al poder, el sentimiento popular antib¨¦lico de los a?os veinte dio paso gradualmente a pol¨ªticas de rearme y a una crisis de la seguridad internacional. En ese ambiente tan caldeado, para muchos ciudadanos eu?ropeos y norteamericanos, Espa?a se convirti¨® en el campo de batalla de un conflicto inevitable en el que al menos hab¨ªa tres contendientes: el fascismo, el comunismo ¡ªo la revoluci¨®n¡ª y la democracia.
Muchos narraron los hechos de primera mano, en el frente o en la retaguardia, transmitiendo al mundo historias de horror, heroicidad, compromiso y traiciones. Con las Brigadas Internacionales llegaron a Espa?a obreros manuales, aventureros en busca de emociones, intelectuales y profesionales de clases medias, corresponsales de guerra y escritores. La mayor¨ªa ten¨ªa claro que el fascismo era una amenaza internacional y Espa?a era el lugar apropiado para combatirlo. Se hab¨ªan sentido atra¨ªdos por el Partido Comunista, que les daba amparo y una doctrina fuerte a la que agarrarse, en un momento en el que en Par¨ªs confluyeron un mont¨®n de exiliados de la Europa oriental, central y balc¨¢nica, huidos de la represi¨®n fascista y dictatorial.
Ludwig Renn, aunque representaba todo eso, era un tipo singular. Nacido en una familia aristocr¨¢tica de Dresde en 1889, Arnold Vieth von Golssenau combati¨® como oficial en un regimiento de Sajonia durante la I?Guerra Mundial, una experiencia militar que relat¨® con ¨¦xito en Krieg (guerra), en 1929, y continu¨® en Nachkrieg (posguerra), en 1930, cuando ya hab¨ªa abandonado el Ej¨¦rcito y su clase, incluido su nombre, para abrazar el comunismo y la ortodoxia estalinista.
Con el ascenso nazi al poder, estuvo en la c¨¢rcel a?o y medio y, tras ser liberado, huy¨® a Suiza, donde se enter¨® de la sublevaci¨®n militar contra el Gobierno republicano en Espa?a. A principios de octubre de 1936 se subi¨® a un tren con destino a Cerb¨¨re y despu¨¦s a Barcelona. As¨ª comienza su cr¨®nica de la guerra civil espa?ola, editada en alem¨¢n en 1955 y que ve ahora la luz por primera vez en Espa?a, m¨¢s de 600 p¨¢ginas de literatura de combate comunista, sin apenas lugar para la ret¨®rica o los sentimientos, porque ¡°el amor en el campo de batalla es una invenci¨®n de los escritores. En el frente, la vida real no deja hueco a esos lujos¡±.
Alejado, por tanto, de las fantas¨ªas de los ¡°tibios¡± burgueses de izquierda que nunca se jugaron el cuello, Ludwig Renn describe lo que ¨¦l considera la aut¨¦ntica realidad, dando fe, desde el principio hasta el final, del relato oficial comunista, frente a ¡°anarcofascistas¡± (amigos del desorden y de la ¡°palabrer¨ªa¡±, inservible en la guerra); ¡°socialtraidores¡±, representados por Largo Caballero y el ¡°redomado golfo¡± Indalecio Prieto, y esp¨ªas trotskistas y del POUM.
Renn arriesg¨® su vida en primera l¨ªnea de fuego, como hab¨ªa hecho ya en la Guerra Mundial, primero como dirigente del batall¨®n Th?lmann y despu¨¦s como jefe del Estado Mayor de la XI Brigada Internacional. Estuvo en todas las grandes batallas, desde Madrid hasta Brunete, pasando por el Jarama y Guadalajara, hasta que a comienzos de septiembre de 1937 emprendi¨®, con pasaporte espa?ol ¡ªHitler le hab¨ªa despojado de la nacionalidad alemana¡ª, una ¡°misi¨®n oficial¡± de propaganda a favor de la Rep¨²blica por Estados Unidos, Canad¨¢ y la Cuba de Batista.
Muchos narraron los hechos de primera mano, en el frente o en la retaguardia, transmitiendo al mundo historias de horror, heroicidad, compromiso y traiciones
El 21 de septiembre de 1938, Juan Negr¨ªn, presidente del Gobierno de la Rep¨²blica, anunci¨® en Ginebra, ante la Asamblea General de la Sociedad de Naciones, la retirada inmediata y sin condiciones de todos los combatientes no espa?oles en el Ej¨¦rcito republicano, con la esperanza de que el bando franquista hiciera lo mismo. Quedaban entonces en Espa?a aproximadamente un tercio de todos los que hab¨ªan llegado para luchar contra el fascismo, y el 28 de octubre, un mes despu¨¦s de su retirada del frente, las Brigadas Internacionales desfilaron en Barcelona ante m¨¢s de 250.000 personas. All¨ª estaba Renn, quien permaneci¨® en Espa?a hasta la ca¨ªda de Catalu?a. De all¨ª pas¨® a Francia, despu¨¦s a M¨¦xico y regres¨® a Alemania 10 a?os despu¨¦s.
El problema de la Rep¨²blica, concluy¨® Renn, no fue ¡°la falta de experiencia militar¡±, que tampoco la ten¨ªan, seg¨²n ¨¦l, las tropas de Franco, sino ¡°el guirigay entre partidos¡±, donde s¨®lo el comunista mantuvo el tipo: sin ¨¦l, y sus ¡°abnegados camaradas y amigos¡±, la Rep¨²blica espa?ola ¡°hubiera sido borrada del mapa en un santiam¨¦n¡±.
Renn no era s¨®lo un escritor comprometido, que luchaba con la pluma y la palabra contra el fascismo. Como les dijo a algunos de sus colegas famosos en el II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura, en julio de 1937, ¨¦l peleaba en el frente y hab¨ªa dejado la pluma porque no quer¨ªa ¡°escribir historias, sino hacer historia¡±.
La guerra civil espa?ola. Cr¨®nica de un escritor en las Brigadas Internacionales. Ludwig Renn. Traducci¨®n de Natalia P¨¦rez Gald¨®s. F¨®rcola Ediciones. Madrid, 2016. 721 p¨¢ginas. 39,50 euros.
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