La larga noche del Bosco
La muestra dedicada al pintor en Holanda cierra con m¨¢s de 400.000 visitantes y horarios de apertura hasta la medianoche
Los museos regionales son cada vez m¨¢s visibles en la escena art¨ªstica europea, y el Noordbrabants, abierto en la ciudad holandesa de Den Bosch (Bolduque, en espa?ol) ha puesto el list¨®n muy alto. La muestra Jheronimus Bosch, visiones de un genio, dedicada a su famoso pintor y vecino, ha reunido en tres meses a 421.700 personas. No solo ha sido la apuesta m¨¢s exitosa en sus 180 a?os de historia. Se conmemora el 500 aniversario de la muerte del artista (1450-1516) y la gran afluencia de p¨²blico ha obligado a ampliar los horarios de apertura. Primero hasta las 20 horas, luego hasta las 11 de la noche, y el pasado fin de semana ¡ªel ¨²ltimo¡ª la sala estuvo abierta el d¨ªa entero. Fue la denominada ¡°noche de la lechuza¡±, y congreg¨® a unos 4.000 aficionados.
Con 17 pinturas y 19 dibujos repartidos sobre un fondo negro, y metidos en urnas de cristal iluminadas como si fueran joyas de poner, un 23% de las peticiones de entradas online lleg¨® de 81 pa¨ªses de los cinco continentes. Los tambi¨¦n artistas Anish Kapoor y Damien Hirst, los actores John Lithgow y Patricia Arquette, y los m¨²sicos David Byrne y Jools Holland, figuran entre los visitantes. El museo del Prado abre el pr¨®ximo 31 de mayo la mayor exhibici¨®n dedicada al Bosco, donde podr¨¢ verse El Jard¨ªn de las Delicias, que nunca sale de Espa?a.
La muestra no ha estado exenta de pol¨¦mica, ya que el Proyecto Internacional de Investigaci¨®n y Conservaci¨®n sobre la obra del Bosco calent¨® motores antes de su apertura con varias afirmaciones llamativas. Concebido para analizar y catalogar la producci¨®n completa, en noviembre de 2015 sus expertos afirmaron que Mesa de los pecados capitales (El Prado) y Cristo con la Cruz a cuestas (Museo de Bellas Artes de Gante), no son suyos. Aunque fueron ejecutados en su entorno y en su ¨¦poca, ¡°lo m¨¢s probable es que se deban a sus seguidores, y por tanto no se le pueden adjudicar¡±, dijeron. Contestada por el museo del Prado, a esta afirmaci¨®n le siguieron otras igualmente controvertidas.
En febrero pasado, Matthijs Ilsink y Jos Koldeweij, los mismos estudiosos que anularon la autor¨ªa de La Mesa, descartaron otros dos t¨ªtulos del artista: Las tentaciones de San Antonio Abad y La Extracci¨®n de la piedra de la locura, propiedad asimismo de la pinacoteca espa?ola. En su opini¨®n, ambos pertenecen a sus seguidores. El Prado tampoco comparte su parecer, y no prest¨® las tablas al centr¨® holand¨¦s. S¨ª cedi¨® El carro de heno y espera presentar sus propias conclusiones a finales de mayo. Ilsink y Koldeweij s¨ª adjudicaron al Bosco el tr¨ªptico titulado El juicio final, tambi¨¦n llamado El juicio de Brujas, expuesto en el Museo Groeninge, de la ciudad belga. Despu¨¦s aseguraron que era suya, y no de un aprendiz, una versi¨®n de Las tentaciones de San Antonio, guardada en el almac¨¦n del Museo de Arte Nelson-Atkins, de Kansas (EE UU). Lo mismo ocurri¨® con el dibujo Paisaje Infernal, en manos de una colecci¨®n privada.
El debate generado por las conclusiones del Proyecto no ha afectado la cita holandesa, ni tampoco a la ciudad de Den Bosch, tambi¨¦n llamada ?s-Hertogenbosch (el bosque del duque). El Ayuntamiento ha dedicado todo el a?o 2016 al pintor, y la villa, que no llega a los 150.000 habitantes, seguir¨¢ con sus pasacalles, festivales de comida medieval, desfiles acu¨¢ticos, teatro y m¨²sica dedicada a su paisano m¨¢s universal. Un hombre que residi¨® all¨ª toda la vida y del que, curiosamente, su ciudad no conserva ninguna obra.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.