¡°Es muy grave que los estadounidenses vayan a votar a Donald Trump¡±
Rose Mary Salum ataca al magnate y candidato a la presidencia de EE UU en la presentaci¨®n de su nuevo libro
Rose Mary Salum (Ciudad de M¨¦xico, 1964) se expresa con un tono de voz calmado, incluso risue?o, que desaparece y se torna iracundo cuando comienza a hablar del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump. "Es una desgracia que alguien que puede ser el pr¨®ximo presidente del pa¨ªs m¨¢s poderoso del mundo no tenga la empat¨ªa para comprender qu¨¦ est¨¢ pasando en el resto del planeta e intentar arreglarlo", reflexiona la escritora mexicana sobre los conflictos en Oriente Medio y la reforma migratoria en EE UU. "Y me parece igual de grave que los estadounidenses vayan a votarle", advierte.
La literata, de origen liban¨¦s, est¨¢ en Madrid para presentar su nueva obra El agua que mece el silencio (Vaso Roto Ediciones, 2015), una novela estructurada en 16 relatos conectados entre s¨ª, que lleva al lector al L¨ªbano desde una perspectiva hispanoamericana. Afincada en Houston (Texas, EE UU), Salum, uno de los referentes de la cultura hispana en Norteam¨¦rica, considera que la sociedad occidental ha dejado de ser solidaria y solo piensa en esconder los problemas "debajo del tapete". "Por desconocimiento, porque no saben, ni quieren saber", remarca. Por eso, su obra, una b¨²squeda de una identidad compleja, ¨¢rabe-hispano-americana, trata de arrojar algo de luz sobre el Beirut de 2006, en plena guerra entre Israel y Hezbol¨¢.
Cuenta Salum que ese a?o su hija, Lor¨ªs, hizo un viaje a la capital libanesa, para "comprobar si los recuerdos de sus bisabuelos eran ciertos: si los limones ten¨ªan all¨ª el tama?o de las naranjas". Pero lo que se plante¨® como una vuelta a las ra¨ªces acab¨® convirti¨¦ndose en una pesadilla. Afortunadamente, su hija volvi¨® tan solo dos d¨ªas antes de que estallara el conflicto. Los padres de la ni?a no pod¨ªan quitarse de la cabeza la pregunta de c¨®mo habr¨ªan hecho para "rescatar" a su hija si la guerra hubiera estallado 48 horas antes. Una noche, la escritora so?¨® con "un ni?o flotando en la pecera", una imagen tan poderosa como las sobrecogedoras fotograf¨ªas de los peque?os ahogados en el Mediterr¨¢neo. A partir de ah¨ª comenz¨® a relatar las historias de unos ni?os en el umbral de la pubertad, en plena creaci¨®n de sus identidades.
"En ese momento, en L¨ªbano, hab¨ªa que ser algo: maronita u ortodoxo, chiita o sunn¨ª", explica Luz G¨®mez, profesora de Estudios ?rabes e Isl¨¢micos de Universidad Aut¨®noma de Madrid, que acompa?a a la escritora en la presentaci¨®n del libro. Estos sentimientos se mezclaban, unas veces se disolv¨ªan y otras se acrecentaban, con los propios de unos adolescentes que estaban descubriendo la fuerza de su sexualidad. Un episodio del libro narra ir¨®nicamente la incapacidad de uno de los protagonistas de concentrarse en una clase de historia porque solo puede pensar en c¨®mo ligar con la compa?era de al lado. El agua simboliza en esta novela el flujo de sentimientos. El hielo, muy presente en toda la obra, es la representaci¨®n del bloqueo emocional que sufren estos chavales. La calle solo aparece como un lugar de muerte o de desolaci¨®n.
Salum, que pertenece a esa larga lista de mexicanos con ascendientes libaneses en la que se encuentran, entre otros, el magnate Carlos Slim y la actriz Salma Hayek, no descarta escribir una obra sobre qu¨¦ habr¨ªa sido de su identidad si sus abuelos, durante la Primera Guerra Mundial, hubieran aterrizado en EE UU en lugar de en M¨¦xico. El mismo ejercicio que llev¨® a cabo el escritor Amin Maalouf ¡ªde origen liban¨¦s y que emigr¨® a Francia¡ª en su obra Or¨ªgenes. En ella, parte de la siguiente premisa: "?Qu¨¦ hubiera sido de m¨ª si en lugar de viajar a Francia, hubiera viajado a Cuba y me hubiera convertido en un hijo del Tr¨®pico?".
Babelia
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