Paco Le¨®n es una m¨¢quina
Tras triunfar en televisi¨®n, su pel¨ªcula 'Kiki, el amor se hace' ha arrasado en taquilla. Ahora rompe esquemas en la zarzuela
Si hay algo que preside su vida es el empe?o por no aburrirse nunca, el af¨¢n por no darse pereza a s¨ª mismo y buscar la sorpresa como sea. Lucha d¨ªa a d¨ªa por estar en el sitio que quiere y no convertirse en alguien que no desea. "Invierto tiempo, trabajo y energ¨ªa para obligarme a no dejarme llevar por la inercia de seguir explotando algo que he visto que funciona". Es tenaz y pr¨¢ctico. Es la luz de un artista que va dejando un rastro de ¨¦xito all¨¢ por donde pisa. Parece que nada se le resiste. El sevillano Paco Le¨®n es una m¨¢quina. Tras sus triunfos televisivos, ¡ªsus imitaciones de Raquel Revuelta y el Luisma de Aida le perseguir¨¢n de por vida y a mucha honra¡ª, su tercera pel¨ªcula como director, Kiki, el amor se hace, ha superado con creces el mill¨®n de espectadores, una cifra casi ins¨®lita en el cine espa?ol. Ahora, su estreno en el g¨¦nero chico como maestro de ceremonias de una zarzuela rompedora y sat¨ªrica, C¨®mo est¨¢ Madriz, dirigida por Miguel del Arco, no deja indiferente a nadie. La corrupci¨®n, la burbuja inmobiliaria, el bipartidismo, Pablo Iglesias, los independentistas catalanes, la historia de Madrid y sus habitantes. Todo cabe en esta funci¨®n en la que por encima de todo gana el tono festivo.
A sus 41 a?os, ha superado sus miedos y se ha lanzado a esta aventura zarzuelera, rompedora y gozosa, con la misma pasi¨®n que le pone a todo. Los abucheos y huidas de algunos espectadores, junto a los calurosos aplausos que jalonan casi todas las funciones, lo vive Paco Le¨®n con absoluta tranquilidad. "Prefiero provocar a aburrir. Prefiero que la gente grite y se indigne a que se aburra. Miguel del Arco ha desempolvado y desacralizado ese templo de la zarzuela, ha sacado la momia del sarc¨®fago. No me importa la bronca. Me encanta, porque, de repente, ves que algo est¨¢ pasando, que est¨¢ vivo. Frente a un teatro burgu¨¦s y complaciente, el teatro tiene que ser diversi¨®n".
?C?MO EST? MADRIZ! from Teatro de la Zarzuela on Vimeo.
Algunos abandonan la obra en mitad de la representaci¨®n, -"si a la gente no le gusta, que se vaya, hay que tambi¨¦n ser tolerante con eso"- y en escenas puntuales como la de la supuesta felaci¨®n a un cura en un burdel. Es uno de los momentos cr¨ªticos de la funci¨®n, que ni siquiera le gusta a Le¨®n. "?jala que toda esa gente se indignara con todos los casos reales de curas pederastas y fueran a protestar al Vaticano a pedir explicaciones. Igual que con la corrupci¨®n. ?Por qu¨¦ no se indignan con sus partidos y luchan contra ella? No es ning¨²n ataque a nadie, es la realidad misma¡±. Un d¨ªa, desde el escenario y ante las quejas en voz alta de uno de los espectadores, el actor par¨® un segundo la funci¨®n e imitando la voz del rey Juan Carlos en su encuentro con el ex presidente venezolano Hugo Ch¨¢vez, solt¨®: ¡°?Por qu¨¦ no te callas?¡±. El hombre se call¨®, la gente se ri¨® y la funci¨®n pudo continuar.
Mira que le gusta la calle, observar a la gente, oir lo que dicen. De esa realidad, asegura, nace parte de su inspiraci¨®n. Ya no es una persona an¨®nima. La popularidad le impide pasear como a ¨¦l le gustar¨ªa. Poco puede espiar ya. Le paran por la calle de manera continua, se presta a centenares de selfies con ciudadanos an¨®nimos, graba decenas de mensajes de felicitaci¨®n a amigos de amigos. ¡°Hola Borja, me han dicho que es tu cumplea?os. Muchas felicidades y muchos besos¡±, fue el v¨ªdeo que grab¨® el pasado jueves en una cafeter¨ªa de la Plaza de Santa Ana ante la petici¨®n amable de uno de los camareros. No le importa. Tiene sonrisas para todo el mundo. ¡°No quiero convertirme en Greta Garbo¡±, asegura divertido. ¡°La tendencia podr¨ªa ser a aislarme, pero me resisto. No quiero perder la calle, porque, entre selfie y selfie, siempre hay alguien que me cuenta algo grandioso e inspirador¡±. Durante la escritura de Kiki, el amor se hace se col¨® en una fiesta de intercambio de parejas, con una m¨¢scara de lucha mexicana y unos bombachos, para poder escuchar con libertad las conversaciones. Unas conversaciones, observa divertido, de lo m¨¢s corriente.
¡°Soy miedoso y pudoroso, pero me esfuerzo por hacer uso de la libertad¡±
El ¨¦xito lo vive con felicidad, pero no sin cierta prevenci¨®n. ¡°Estoy contento, es verdad, pero tengo que luchar contra una sensaci¨®n muy fuerte para que todo esto no me haga perder la libertad. El ¨¦xito te obliga a determinadas cosas, a seguir la inercia de seguir explotando lo que funciona. La vida es muy corta y yo quiero meterme en muchos sitios y experimentar en lugares diferentes. Es un riesgo, pero s¨¦ que el riesgo tambi¨¦n se premia.Yo soy un buen ejemplo de ello. Me da p¨¢nico que la gente se aburra de m¨ª. Para m¨ª, la libertad del ¨¦xito es hacer lo que te da la gana. Soy muy miedoso y pudoroso pero me esfuerzo por hacer uso de la libertad que tenemos¡±. Reconoce haber tenido una buena br¨²jula en esta vida, su madre Carmina, a la que le dedic¨® dos pel¨ªculas nada complacientes (Carmina o revienta y Carmina y am¨¦n) . ¡°La miro y me digo, 'as¨ª tengo que hacerlo¡¯. Es un referente de tolerancia vital muy grande. Ha sido una de mis br¨²julas, primero para alejarme de ella y sentir que yo tambi¨¦n tengo gravedad, porque a su lado no hay gravedad posible¡±.
Esa misma libertad y naturalidad que utiliz¨® para asegurar hace poco en un programa de televisi¨®n que hab¨ªa tenido novios y novias. Se rie. ¡°Nunca dije que fuera bisexual, esa etiqueta nunca la he empleado, aunque tampoco estoy en contra de que me definan as¨ª. Fue una cosa completamente natural. No confes¨¦ nada, porque se confiesan los pecados y aqu¨ª no hab¨ªa nada que confesar. La gente ha aplaudido mucho el qu¨¦ y el c¨®mo. Ahora resulta que lo m¨¢s provocador es ser natural. No soy tonto y s¨¦ lo que provoca ese tipo de cosas, pero es algo que me lo quiero permitir y lo hago¡±.
¡°La tendencia ser¨ªa aislarme, pero me resisto. No quiero perder la calle¡±
El que fuera un ni?o triste y callado, eso dice y, claro, uno se lo cree, es ahora un hombre pr¨¢ctico que asegura no tener memoria, ni ning¨²n apego al pasado, sin fotos, ni recuerdos. Su mirada hacia la vida es amorosa. ¡°Me voy a poner un poco pedant¨®n pero el otro d¨ªa le¨ª una cita que me gust¨® mucho. Era de Jacques Tati. Dec¨ªa: ¡®Hago comedia porque miro al mundo de manera cr¨ªtica, pero con amor¡¯. Lo suscribo. No es que yo no vea las cosas malas, pero las quiero retratar con amor, busco ser condescendiente con las debilidades y las miserias de los personajes y para eso lo mejor es la comedia¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.