Si entras en una canci¨®n de Damien Rice no podr¨¢s salir de ella
La secci¨®n 'Recetario de canciones' recomienda m¨²sica al acabar cada mes y, sobre todo, busca que la vida suene mejor
Fue protagonista. Burn the Witch (Radiohead)
Protagonizaron el mes de mayo por partida doble: sacaron nuevo disco y tocaron en Barcelona como cabezas de cartel en el Primavera Sound. Del silencio medi¨¢tico a copar otra vez todas las portadas musicales con su ¨¢lbum y exitoso directo. Despu¨¦s de marcar tendencia a finales de los noventa y principios de este siglo, Radiohead siguen siendo trascendentes y son muchos los que celebran que esta banda tenga la personalidad que tiene.
Una canci¨®n para una noticia. Why Do Lovers Break Each Other's Hearts? (Darlene Love)
Mariano Rajoy compuesto y sin pareja baile. Mucho mejor no lo tiene Pedro S¨¢nchez. Pablo Iglesias y Alberto Garz¨®n parece que se entienden, pero ?es aut¨¦ntica su uni¨®n? Albert Rivera parec¨ªa que se iba a llevar mucho y se queda sin nada. Volvemos a las elecciones y volvemos porque los candidatos vuelven sin pactos, sin acuerdos para gobernar y formar mayor¨ªa. Ahora que arranca otra campa?a electoral m¨¢s, vemos a los candidatos desgastados y, sobre todo, con el coraz¨®n roto porque ninguno ha logrado lo que busca. Vamos a ponerles esta canci¨®n de Darlene Love. Su dulce voz puede curar heridas y mientras resuena la pregunta: ?Por qu¨¦ no funciona?
?Disco destacado. Carrickfergus (Dexys)
El resultado del nuevo ¨¢lbum de Dexys Midnight Runners dej¨® una sensaci¨®n agridulce a nuestro cr¨ªtico musical Eduardo Ranedo. El nuevo disco de la banda brit¨¢nica fue uno de nuestros discos destacados de mayo pero, ciertamente, no contiene la efusividad instrumental de los mejores Dexys. Una pena. Hablamos de una formaci¨®n de soul blanco con ADN de folk brit¨¢nico que siempre han sido un motivo para adorar esto que llamamos m¨²sica. En esta emotiva balada del nuevo ¨¢lbum, Kevin Rowland al menos muestra su voz intensa y penetrante, sin artilugios.
Territorio nacional. Not in Love (Maika Makovski)
Leyendo su nombre, uno piensa que est¨¢ ante una cantante macedonia o de otra parte lejana y ex¨®tica del planeta. Pero no. Maika Makovski es producto nacional. Y qu¨¦ producto. Su talento es una realidad desde hace a?os, pero ahora, con nuevo disco bajo el brazo, cobra otra dimensi¨®n. La cantante mallorquina se consolida como una int¨¦rprete con car¨¢cter y una fuerza innata para ir directa a la fibra sensible con voz sugerente y su folk-rock de cu?o cl¨¢sico. Esta canci¨®n es el sencillo de adelanto de su nuevo trabajo. Perfecta para ma?anas de domingo.
La Ruta Norteamericana. That's How I got to Memphis (Karl Blau)
M¨¢s de 20 a?os de carrera y cerca de 40 discos, pero el bueno de Karl Blau no tiene nada de repercusi¨®n en estos parajes espa?oles. Superviviente y maldito, este multiinstrumentista es una de esas piezas preciadas de Nashville, con su country riguroso y emotivo pero que no se vende al mejor postor. En mayo, se public¨® en Espa?a su ¨²ltimo disco, que lleva el nombre (no sin guasa) Introducing Karl Blau, como si todav¨ªa tuviese que presentarse con tan dilatada carrera. En el ¨¢lbum incluye esta versi¨®n de la fabulosa That's How I got to Memphis, que populariz¨® en los sesenta Tom T. Hall. Explica c¨®mo un tipo llega a Memphis en busca de su amada, atravesando todos los obst¨¢culos, pero llegando a la ciudad del ritmo.
?No te pierdas este v¨ªdeo! One Too Many Mornings (Bob Dylan y Johnny Cash)
M¨¢s all¨¢ de la amistad, Johnny Cash estuvo h¨¢bil al arrimarse a Bob Dylan a finales de los sesenta y volver a engancharse al gran p¨²blico. Dylan, por su parte, se sirvi¨® de Cash para buscar un estatus dentro de la m¨²sica de ra¨ªces folk y country que empez¨® a investigar en discos como John Wesling Hardin y Nashville Skyline. Con todo, lo importante fue que supuso la conjunci¨®n de dos iconos de la m¨²sica popular norteamericana, dos cosmovisiones del gran cancionero tradicional norteamericano y dos voces que narran parte de la historia emocional reciente de EE UU. En este v¨ªdeo se les puede ver dentro del estudio de grabaci¨®n, c¨®mo cantan y c¨®mo se divierten.
D¨ªselo con una canci¨®n. Sleep, Don't Weep (Damien Rice)
Damien Rice es una especie de hechicero de los sentimientos. Necesita muy poco para provocar much¨ªsimo. Como por arte de magia, llega a un lugar al que muy pocos llegan, a ese punto indescifrable donde sucede la mayor intensidad de la vida. Arrasa las emociones con canciones de folk sencillas, pero tremendamente espirituales. El compositor irland¨¦s hace mucho que se refugia en Islandia, donde halla inspiraci¨®n y sosiego entre la naturaleza salvaje y los r¨ªos de aguas calientes. Maestro de las canciones de coraz¨®n roto, Rice tambi¨¦n tiene alg¨²n canto al amor sincero, como este Sleep, Don't Weep, el encuentro de dos personas perdidas en la vida que, en el fondo, hallan redenci¨®n en su dolor compartido... y una oportunidad para volver a amar con pasi¨®n. "Esta composici¨®n contiene adem¨¢s un crescendo marca de la casa del irland¨¦s. Y un hecho cient¨ªfico: si entras en una canci¨®n de Damien Rice, no podr¨¢s salir de ella.
?Por fin es viernes! Dance to the Music (Sly & The Family Stone)
Contra la aplastante rutina, m¨²sica. Contra el tedio, m¨²sica. Y contra la pereza, m¨¢s m¨²sica. Bien lo sab¨ªa un genio del ritmo como el estadounidense Sly Stone, revolucionario del sonido con su vertiente de funk psicod¨¦lico. Si quieres salir a despejar la cabeza y bailar como un loco, este cl¨¢sico de Sly & The Family Stone es tu medicina. Lo cura todo.
De la vieja gramola. Tenderly (Sarah Vaughan)
Buscamos en la vieja gramola para dar con el vibrato eterno de esta mujer afroamericana que represent¨® como pocos artistas la edad dorada del jazz vocal. Sarah Vaughan es sin¨®nimo de elegancia. Su estilo grave y majestuoso es un pozo sin fondo en el que sumergirse en escuchas relajadas de noches de verano. En la memoria popular, Vaughan queda eclipsada por dos divas como Billie Holiday y Ella Fitzgerald, pero esta cantante de Nueva Jersey est¨¢ a su misma altura. No desmerece ni un ¨¢pice. Escuchando esta composici¨®n, dan ganas de ponerse una copa de vino y pasar del mundo.
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