Teresa Lanceta teje un arte universal de ra¨ªz marroqu¨ª
La exposici¨®n ¡®Adi¨®s al rombo¡¯ de la creadora catalana reivindica en Madrid el talento de las mujeres an¨®nimas del Atlas
Rodeada de artistas abstractos o conceptuales, Teresa Lanceta (Barcelona, 1951) decidi¨® que quer¨ªa tejer. Corr¨ªan los a?os 70 y desde entonces no ha dejado de hacerlo. Solo que ahora la antigua incomprensi¨®n por su labor ha dado paso a una aceptaci¨®n, si no generalizada si extendida, del trabajo artesanal como una expresi¨®n m¨¢s del arte actual y por tanto, como objeto de museos referenciales.
¡°Siempre he cre¨ªdo que el arte es universal, puede abarcar todo. El artista puede ser un asesino y un gran aritista como Caravaggio o puede tener deficiencias f¨ªsicas y ser muy creativa como Judith Scott. Y como estamos en la contemporaneidad, pues lo que yo hago tambi¨¦n lo es¡±, comenta Teresa Lanceta, entre estupendos tapices, alfombras, cojines, handiras (capas o mantas de boda marroqu¨ªes), pinturas, dibujos y v¨ªdeos, que forman parte de la exposici¨®n Adi¨®s al rombo, que se exhibe hasta el 10 de septiembre en la Casa Encendida de Madrid.
¡°Mi proyecto que podr¨ªa decir casi de vida arranca en 1985 cuando descubro que hay mujeres en el mundo tejiendo al mismo tiempo que yo. No encontraba compa?eros de viaje en el arte y la artesan¨ªa. Viaj¨¦ a Marruecos y descubr¨ª unas compa?eras que tejen de manera muy creativa, con una tradici¨®n viva, de manera an¨®nima. Me impact¨® mucho y empec¨¦ a interesarme por su trabajo. Aqu¨ª, en el mundo del arte, no estaba reconocido y s¨ª un tanto menospreciado¡±, explica la artista, cuya consagraci¨®n en el mundo dentro del circuito del arte contempor¨¢neo le lleg¨® con la exposici¨®n en 2000 en el Museo Nacional Reina Sof¨ªa.
En la muestra, que despu¨¦s recalar¨¢ en el Azkuna Centroa, se ha inspirado en los trabajos de las comunidades tejedoras del Medio Atlas, cerca de Fez, dejando visible tambi¨¦n los originales para sumar su arte a una tradici¨®n, transmitida de generaci¨®n en generaci¨®n, marcada por normas, temas y h¨¢bitos ancestrales cuyo dominio permite a las creadoras una gran libertad expresiva. ¡°No siento que est¨¦ haciendo un trabajo sobre Marruecos. No es el trabajo de un pa¨ªs, sino el de unas mujeres an¨®nimas en unas monta?as, en zonas rurales, que generalmente tejen para casa¡±, a?ade.
¡°Al principio quer¨ªa pegarme mucho a lo que hac¨ªan¡ Pero me di cuenta de que nos separan muchas cosas, cosas tan simples como la vista. Ver los hilos que usaban era casi imposible para m¨ª, incluso antes de llevar gafas. Acept¨¦ que habr¨ªa cambios inevitables¡±, indica la artista y profesora de Lenguajes Art¨ªsticos en la Escola Massana de Barcelona. ¡°Lo que m¨¢s me emociona es el descubrimiento del arte an¨®nimo, singular, de persona a persona¡±, agrega Lanceta (de la que tambi¨¦n puede verse ahora una instalaci¨®n en el Centro de Arte 2 de Mayo, en la muestra La r¨¦plica infiel).
La muestra de La Casa Encendida, comisariada por Nuria Enguita, incluye una cartograf¨ªa digital de patrones y objetos del Medio Atlas realizada con Nicolas Malev¨¦ y una instalaci¨®n interactiva de audio basada en algoritmos con Lot Amor¨®s.
¡°Ahora est¨¢ de moda entre las j¨®venes coser¡±
La comisaria de la exposici¨®n, Nuria Enguita, destaca la condici¨®n pionera de Teresa Lanceta cuando se plantea que tejer tambi¨¦n es arte. Y lo hace cuando ¡°los discursos poscoloniaslistas o descolonialistas¡± empezaban a derribar las barreras entre el arte y la artesan¨ªa o lo que es arte o no. ¡°Una obra de Barnett Newman es arte y una manta navajo ?no?, se pregunta Enguita. La comisaria recuerda que, ¡°ahora que est¨¢ de moda entre las chicas j¨®venes coser, Teresa lleva cosiendo desde los 70¡±.
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