¡°Nunca conoc¨ª a nadie que consiguiera emular a Jane¡¯s Addiction¡±
Perry Farrell, l¨ªder de la banda, charl¨® con EL PA?S durante el festival Mad Cool
En la intimidad de los camerinos del Mad Cool el aire se siente m¨¢s pesado de lo habitual. No en vano, carteles del valor de Neil Young, The Who o The Prodigy han colgado durante tres d¨ªas de infarto. De una de esas c¨¢maras emerge en tono rosa chicle la que por momentos se asemeja a la versi¨®n californiana de La M¨¢scara, brillantemente interpretada por Jim Carrey. El l¨ªder de Jane¡¯s Addiction despide un perfume que se impregna en la piel hasta varias horas despu¨¦s de un encuentro cara a cara.
Perry Farrell no ha hecho un gran concierto, pero flota como si hubiera hecho arder Madrid. Avanza por el hall con su sombrero de filtro y zapatos de brillantes. Da la mano con una seguridad que hace temblar las rodillas. Parecen lejanos los ecos de los abusos de drogas y las peleas sobre los escenarios de una banda que cambi¨® para siempre el panorama del rock alternativo.
El saludo inicial se resuelve con un sentido cumplido hacia su vestimenta y un breve recuerdo de su ¨²ltima actuaci¨®n en Espa?a en Bilbao siete a?os antes en el BBK Live. ¡°Este festival debe ser el doble de grande que ese otro¡±, afirma. Su banda gira por el mundo con el 26 aniversario de su legendario trabajo Ritual de lo Habitual pero huye de la palabra nostalgia: ¡°Es el fin de un ciclo pero el comienzo de otro¡±. A?ade tambi¨¦n que esperan grabar nuevos temas en los pr¨®ximos a?os adem¨¢s de reeditar el citado ¨¢lbum y Nothing¡¯s Shocking.
Por su posici¨®n de estrella del rock le parece a?adida la fanfarroner¨ªa propia de su posici¨®n cuando se le pregunta en qui¨¦n se ve reflejado. No vacila en afirmar que no ha visto nadie capaz de emular a su grupo para luego mostrar una humildad que ablanda el coraz¨®n: ¡°Mucha gente dice que soy una influencia. Pero yo no lo veo muy claro¡±.
¡°Ya hac¨ªamos conciertos en Seattle y triunf¨¢bamos antes de que lo hiciera el grunge. Pero no les puedes quitar nada de m¨¦rito. Marcaron su camino en la historia de la m¨²sica y lo hubieran hecho igual sin m¨ª¡±, confirma al ser preguntado sobre si se siente una influencia del g¨¦nero. Y a?ade: ¡°Simplemente me toc¨® estar ah¨ª antes que ellos, como David Bowie, Iggy Pop y Lou Reed estuvieron antes que yo¡±.
Farrell habla mucho de energ¨ªa y car¨¢cter. No se esconde y reconoce que donde hubo llamas a¨²n quedan cenizas que pueden prender en el d¨ªa a d¨ªa de la banda: ¡°Siempre es complicado tener dos o cuatro caracteres fuertes en una convivencia. Necesitas tener paciencia para dejar las cosas en su sitio. Todos somos machos alfa y tenemos opiniones fuertes. Pero no lo cambio por nada. Siempre he trabajado con m¨²sicos excepcionalmente virtuosos. Al final lo importante es que el resultado es la excelencia, y eso es lo que buscamos¡±.
El erotismo es una especie de modus operandi para el l¨ªder de Jane¡¯s Addiction. Algo que necesita como el aire. La entrevista adquiere temperatura de jacuzzi cuando revela su ritual antes de salir al escenario. ¡°Me gusta vestirme con mujeres lindas. Empezar desnudo y prepararme para actuaci¨®n. Los chicos y las chicas se miran¡ Empiezan a estirar¡¡±.
Al final del encuentro, uno no puede dejar de tener la sensaci¨®n de tener delante a lo que pudo ser pero no fue. Porque Jane?s Addiction cultiv¨® pero no supo recoger. Y la banda que entendi¨® lo que ten¨ªa entre manos compite hoy por el n¨²mero uno con Radiohead en las listas. Y por cierto, acaban de estrenar ¨¢lbum: The Getaway.
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